Dancing With The Devil

21

Desperté con dolor de cabeza, y no era resaca, la verdad no había tomado casi nada, me duche, me puse ropa cómoda y baje, papá ya no estaba, me prepare café fuerte, y me puse a mirar la tv.
No tenía ganas de nada, el celular sonó, lo tome sin ganas.
"Ven a las oficinas, queremos proponerte algo" no, pensé, no gracias, me quedé pensando por un momento, quizás no era mala idea.
"Voy en una hora" le conteste, subí de nuevo a mi cuarto, mire el armario, mis ganas eran pocas.
Saqué un suéter blanco con rayas marrones grandes, unos jenas algo claros rotos en las rodillas, y unos Nike Airforce blancos, me planche el cabello, me lo acomode, me vestí y me fui.
Estacione el coche, respiré profundo, y me baje, me estaban esperando en sala de reuniones, entre, estaba papá, Billy y John, los mire, respiré y me senté, me miraron atención.
- cómo estás? - me preguntó Billy, mal pensé
- estoy bien - force una sonrisa, no quería preocupar a nadie y menos con tonterías como esas.
- Bueno - dice Billy y hace una pausa - tu papa y nosotros queramos ofrecerte un puesto en el fbi cuando termines tus estudios - lo mire a los tres sorprendida
- y que tendía que estudiar - pregunte, la verdad no tenía idea
- lo que tú quieras, ser policía, detective, perito, lo que quieras
- y me darán tiempo para decidir
- si - dije John - y por mientras puedes trabajar en lo que quieras aquí
- si - dije - acepto - otra vez no sabía a donde estaba yendo, pero tome uno de los camino que tenía entre de mi, ya no habría vuelta atrás, una señora interrumpió en la habitación
- jessy qué pasa? - le preguntó john
- llegó esto de la CIA - le entró una carta sellada, papá la agarró, la miro por unos segundos, y la abrió, la leyó, nos miro fijo
- qué es? - le preguntó Billy
- la cia nos invitó a la fiesta del nuevo presidente, ósea el coreano - dijo papá, no estaba molesto, peor su tono no era el mejor
- iremos? - dije - yo también?
- si, acá dice que están invitados todos los que ayudaron para su captura - dice papá y pone un poco de sarcasmos en esta última palabra.
- cuando es? - pregunta John
- mañana, a las 7pm - el corazón se me aceleró
- me puedo ir ahora - pregunte
- si - dijo Billy, y salí de ahí casi corriendo, el corazón a me empezó a latir fuerte y la respiración me faltaba.
Me subí al coche y me fui a la casa, me quedaría ahí hasta que me dieran ganas de salir, mi mente quedo blanco, mañana lo vería de nuevo después de una semana, me paré tome las llaves del coche mi cartera y salí.
Fui a uno de los malls más grande de Los Ángeles, buscaría el vestido perfecto, y los zapatos perfectos, estaba un poco desanimada, respiré profundo y me fui.
Compre una bebida en Starbucks, y recorrí tienda por tienda, nada me convencía, nada me decía, si este es el vestido o algo así, entre a la última tienda y a mi última esperanza.
- la puedo ayudar en algo - me dice una de las chicas, la miro, sus ojos verdes me miraban fijamente.
- busco un vestido de fiesta
- de que color?
- el que sea
- Bueno - me dijo, me miro de arriba a abajo - ven - la seguí por casi toda la tienda. - este - me señaló uno blanco, con escote V, algo largo y ancho, era corto y un poco más largo en uno de los lados, ese es pensé - y estos zapatos - eran blancos con pequeñas piedritas, con tacón fino y plataforma.
- Gracias - le dije a la chica y me fui, trate de respirar y calmarme.

Me tome tres tazas de té y no lograba calmarme, subí, llené la ducha de acá súper caliente, puse algunas espumas y me quedé ahí como dos horas, mire la hora, eran las 6, papá había llegado.
- nos vamos 7:50 - me grito desde el pasillo, me depile las piernas, me lave el cabello, el agua estaba súper caliente y caía por mi cuerpo, y mi corazón latía un poco más con cada gota.
Me puse una toalla en el pelo, mi bata y salí, me senté enfrente del espejo, me seque el cabello, y me hice ondas largas y algo despeinadas, me puse un poco de bace, me mire al espejo, haría que mis ojos resaltaran más que nunca, me hice una pequeña raya negra abajo, y me la esfumine un poco, con rosado abajo, me puse sombra de ojos rosada y blanco de un lado, y marrón con algo de negro, me pinte las pestaña de negro, me acomode las cejas, me pinte los labios de rosado, con pequeñas luces, me terminé de poner bace y lado de rosado en la mejillas, me arregle el cabello, las ondas habían quedado perfectas, busqué el collar que papá me había regalado, tenía un pequeña perla, me puse el vestido, y me mire al espejo, me quedaba súper bien, y había que mi cuerpo se viera bien, me puse los zapatos, me coloqué perfume, casi todo el tarro, baje las escaleras, papá estaba un perfecto traje negro.
- estas hermosa - me dijo, y me sonrió
- gracias pa - me acerque a él y le acomode la corbata
- todavía no lo puedo creer - dice papá y se ríe
- el que pa
- todo lo qué pasó, es increíble - dijo y se reía.
Papá estacionó el auto, nos bajamos y nos acercamos a la puerta, el corazón se me iba a salir del pecho en cualquier momento, entramos, el salón estaba casi todo obscuro, con pequeñas luces de colores y blancas, una enorme barra de bebidas, no habían tantas mesas, y la mayoría eran pequeñas y altas, el salón se llenó de gente en un rato.
- muchas gracias por venir - dijo, esa vos retumbó por el salón, mi corazón se aceleró, me puse nerviosa, me di la vuelta para mirarlo, estaba con un perfecto traje, con camisa blanca, corbata negra,y unos jenas ajustados, y zapatos de vestir negros, su cabello perfectamente arreglado y súper negro, respiré profundo, mi corazón se aceleró.
- agradezco a la cia por darme esta oportunidad de ser su presidente, daré lo mejor de mi para proteger este país - todos lo aplaudieron y el sonrió - muchas Gracias - dijo y se fue, fui a la barra, necesitaba un trago, fui a la barra, el chico se me quedo mirando, le sonríe, y el a mi.
- qué te sirvo - no tenia ni idea de que pedir, lo mire sin saber que responder
- un devil's margarita - dijo esa voz hacia que mis nervios se alteraran, se paró al lado de mi, no quería mirarlo, el pecho se me puso triste y mis ganas de llorar me invadieron, moví los dedos y lo mire - hola - me dijo y se me quedo mirando
- hola - le dije tratando de disimular todo lo que su presencia me causaba, se me quedo mirando - felicitaciones - le dije, mi corazón se aceleró y pecho se cerró.
- Gracias - dijo y sonrió, me tenía que ir de ahí de inmediato
El chico me entregó la bebida, era blanca con toques de amarillo y rojo arriba con una rodaba de lima a un lado, la tome, y me fui dejándolo solo, salí para afuera, la noche estaba cálida, mire para arriba, la luna estaba llena, y habían pocas estrellas, le di un trago al vaso, sentí que alguien estaba detrás de mi.