Cap 16- Deber

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Disclaimer: Dachau pertenece a Jayne Stark

Capítulo XVI - Deber

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Ha pasado un mes. Un mes completo sin noticia alguna del desgraciado soldado nazi.

"Menos mal" Piensa Tzuyu, llenando de mala gana un vaso reluciente del agua chocolatosa que fluye torpemente por las tuberías del edificio antiguo; las provisiones han comenzado a agotarse, dentro de poco se verá obligada a conseguir más.

Da un gran sorbo al terrible líquido en completo silencio.

Está amaneciendo, o eso puede deducir de las amarillentas tonalidades que se filtran furtivamente por las gruesas cortinas pues, aunque el condominio parece hundirse en la tierra, lo cierto es que su nivel con respecto al suelo es más que perfecto.

"No importa cómo lo vea" Piensa Tzuyu con cierto pesar "Sigue siendo el infierno"

Su infierno. Su silencioso infierno personal.

Es a esta hora, entre la madrugada y el amanecer, donde todo es demasiado tranquilo para su gusto: Jihyo, como siempre, está enfrascada en su lectura diaria; tanto Sana como Momo se encuentran roncando como lo harían un par de osos en pleno invierno; Jeongyeon merodea furtivamente por los pisos superiores en compañía de Nayeon.

Nada fuera de lo normal.

-Vete tú, a saber qué hacen allá arriba- Suele bromear Momo muerta de la risa, completamente inconsciente del sentido que pueden tener sus risotadas triviales.

Después de todo, ¿no han visto como la chica mayor utiliza sin pena aquella preciada medalla que Yoo protege tan celosamente? ¿No es eso una señal de que algo sucede?

"Solo son tonterías" Concluye intentando controlar las arcadas insoportables que le produce el agua en su paladar.

Ciertamente, una simple medalla es lo menos que debe preocuparle en un momento donde todos, absolutamente todas, parecen estar molestos con ella.

Bueno, todas a excepción de…

-B-Buenos días.

Mina Myoui.

-Buenos días- Murmura Tzuyu cortante, observando cómo la pálida chica rubia se encamina tímidamente a la cocina improvisada sin devolverle la mirada.

Reproches inconscientes, así han sido todas las mañanas desde que la antigua prisionera del III Reich se reunió nuevamente con la decadente Twice (Nombre que le dieron a su pequeño grupo de amigas hace muchos años, en una de sus tantas tardes de juego en la vieja Múnich).

Todas salvo ella, desde el primero hasta el último, todas parecen estar molestos con ella.

¿Qué hizo mal? ¿Que estuvo mal en una acción destinada a protegerlos?

Funcionó, ¿No es así?

Logró expulsar al malviviente que raptó sin misericordia a la más inocente de sus amigas.

¿No fue por el bien de ella? ¿No fue por el bien de todos?

Después de todo, aquel soldado de mirada mordaz nunca volvió a aparecer.

-Cuídala bien, niña mimada- Dijo aquella persona llamada Chaeyoung en el momento en que atravesó la puerta de hierro para no volver; tenía el uniforme maltrecho, arreglado a medias, mostrando orgullosamente ciertas marcas en su cuello que daban mucho en qué pensar -Si tocas a mi chica, te arrancaré los dedos uno a uno hasta que pidas clemencia.

"¡Miserable!"

¡Incluso se contuvo de matarlo en aquel momento, cuando le dio la espalda altaneramente!

Dachau - [TWICE FIC] (AU) - MICHAENG - 𝙁𝙞𝙣𝙖𝙡𝙞𝙯𝙖𝙙𝙤Donde viven las historias. Descúbrelo ahora