Capítulo 7

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"El dolor es la única cosa que me recuerda que aún estoy viva."

Chiara

Hoy desperté sola en mi habitación, sin Kelly, sin mis padres, sin nadie.

Hoy no hay nada, nada más que yo y el cáncer que ha estado matándome desde hace ocho años.

Hoy no tengo nada.

No tengo nada que ofrecer al mundo.

No tengo una sonrisa de buenos días que darle a mis padres.

No tengo una canción que acompañe a relate lo que siento.

No tengo un lugar que visitar con Kelly.

Solo soy yo, en mi habitación a oscuras. Con mi desayuno sin tocar a un lado de mi cama. Deseando que la vida tenga piedad de mi por una vez y decida terminar con la miseria de existencia que he estado arrastrando desde que tenía doce. Hoy no hay nadie. No están mis padres, no está Kelly, no tengo una cita con Adriana para saber que tanto durara el cáncer antes de decidir matarme de una vez.

Hoy solo soy yo y mis demonios, esos que a cada segundo se hacen más fuertes, me torturan, les encanta jugar con mi cabeza porque saben que siempre van a ganar.

Saben que soy débil.

Patética.

Un cuerpo que respira sin alma.

Aman verme así, saben que no voy a luchar, saben que no me importa lo que decidan hacer. Estoy acostumbrada a ellos, a sus juegos. Me conocen mejor que yo misma. Saben como derrumbarme y dejarme ahí, tirada en el suelo de la indiferencia, del dolor.

Son la antesala de la agonía, de la espera de un dolor mayor. Uno del que no me levanto, del que nadie puede levantarme.

Hoy es uno de esos días en los que el cáncer gana, la depresión gana, mis miedos ganan, mis demonios ganan, y no porque sean más fuertes, no porque sean mejores , ganan porque estoy cansada, porque respirar duele, porque las lágrimas no tienen sentido, pero aun así no cesan.

Cuando ya no tienes motivos para pelear. Cuando el aire se siente pesado y tóxico. Cuando no puedes mantener los ojos abiertos por el cansancio, pero no puedes cerrarlos por las pesadillas, ¿qué haces?

¿Qué haces cuando las pastillas no alivian el dolor?

¿Qué haces cuando tu cuerpo es tan pesado como el acero, pero tienes la fuerza de una pluma?

¿Qué haces cuando estás muriendo?

¿Qué haces cuando deseas morir?

Anoche estaba en una fiesta, sola, incluso rodeada de personas estaba sola. Siempre estoy sola, sin importar que llena este la habitación, estoy sola.

Es triste sentir que no perteneces a ninguna parte. Cuando el destino juega en tu contra haciéndote sentir inferior, cuando ya estás acostumbrada a ese sentimiento. No encajas, no perteneces. Solo eres una persona más en un mundo que ya tiene suficientes problemas como para ocuparse de los tuyos también. Llevo años sintiéndome así.

Por que desde el momento en el que mis demonios ganaron por primera vez siempre estoy sola. He estado viviendo en un mundo de colores en el que yo solo veo gris.

Y ya no duele. Hoy importa un poco menos que ayer, pero aun así me aterra. Vivir una vida de fracasos, en la que todo el mundo espera que todo el mundo espera que te levantes, todos, excepto yo.

¿Cuál sería el motivo?

¿Qué cosa buena puede brindarme una vida que solo se ha encargado de hacerme pedazos, día tras día?

Tu Nombre En Mis VenasWhere stories live. Discover now