PERFUME [[JINSU]] 《Oₘₑɕₐᵥₑᵣₛₑ》

🐺11🐺

La vida de Yoongi avanzaba relativamente bien. No iba a decir que estaba excelente, porque a veces venían aquellos bajones que le hacían llorar y querer quedarse encerrado todo el día en casa sin salir de su burbuja, pero sabía que no podía.

Su vida había cambiado tanto en tan solo dos meses.

Dos meses que no se dio ni cuenta como pasaron, pero habían sucedido varias cosas.

Y aún no superaba la mayoría de aquellas.
Pasó de ser un dueño de casa a trabajar y administrar una cafetería. Obtuvo un departamento todo pagado y amueblado como regalo. Park Jimin era el mejor amigo que se pudo conseguir, lo sabía. A pesar de discutir debido a sus propias decisiones, al ser su hyung, Jimin lo respetaba, lo quería y lo cuidaba demasiado, aunque eso no significaba que no tuvieran discusiones o desacuerdos, como cualquier grupo de amigos. Además, estaba en espera de un cachorro, cosa que nunca había pasado por su cabeza, al menos no sin tener una marca.

Ahora estaba en su cama, un Miércoles por la mañana, ya que ese día tenía su hora con la ginecóloga y Jimin le dijo que no fuera a trabajar, que se tomara el día. Estaba hecho bolita en su casa, sintiendo muchas náuseas, no quería comer nada y tampoco salir, así que le mando mensajes a Hoseok, para que por favor pasara por él al menos una hora antes por él, para que le ayudara.

Hoseok, como el alma buena y preocupada que es, le había dado en el gusto y así lo haría. Se sintió un poquito mejor con eso, ya que un alfa estaría a su lado, pero su omega clamaba por otro alfa. Su lobo buscaba el olor del padre del cachorro y eso lo tenía peor. Lo único que quería era quedarse acostado hasta que todo pasara.

Con lágrimas fluyendo por sus ojos, se quedó dormido, hasta que su celular vibró entre sus manos y de mala gana, sin verificar quien llamaba, contestó.

-Sí?- preguntó con la voz ronca y adormilada.

-Yoongi hyung, soy Hoseok. ¿Estás bien?- le preguntó por el auricular.

-Ajam…-contestó sin ganas y levemente mareado.

-Bien, ¿puedes abrirme? Estoy afuera- comunicó.

Y Yoongi observó con ojitos chiquitos la hora en el celular y se maldijo en silencio. Ya debería estar vestido, pero el aún estaba en cama y en pijama, sin ningún ánimo de salir de ahí. Tenía sus ojos bastante hinchados por haber llorado y dormido más de la cuenta.

Volvió a poner el celular en su oreja y suspiró.

-Espera, ya voy- contestó y dejó el celular sobre la cama, sentándose en la orilla.

Con lentitud se puso las zapatillas de descanso y así mismo como estaba, salió a recibir a Hoseok. Al abrir la puerta y sentir al alfa, su cuerpo se relajo un poco, demasiado poco.

Hoseok lo observó y le sonrió.

-Debe ser un pecado que luzcas tan bien después de haber dormido tanto- murmuró, sabiendo que Yoongi lo había escuchado, notando sus rosados mofletes.

-Tonterías- dijo negando el mayor- ¿Me abrazas?- le preguntó.

No hubieron más palabras, solo simples acciones. Hoseok se acercó al mayor y lo envolvió en sus brazos y Yoongi quedaba justo en el cuello de Hoseok, ahí donde su olor era intenso y aspiró. Aspiró como si no hubiese mañana y se aferro al cuello del menor, sintiendo el agarre más fuerte en su cintura.

Aquello era totalmente nuevo para Hoseok, ya que nunca antes se había sentido de aquella manera hacia un omega y eso, solamente su mejor amigo, Jeon Jungkook, lo sabía. Así que de igual manera, hundió su nariz en el cuello del mayor, deleitándose con su olor a chocolate y frutillas, aquel olor que siempre que veía al omega lo volvía loco.