One Shots +18

SeRim // Cravity.

Mi madre no deja de comerse al muchacho con sus besos. Él conductor que está a mi costado se veía incómodo con tremendo espectáculo. Sentí vergüenza por el comportamiento de mi mamá y también de SeRim. Par de calenturientos. Sólo bufé bajando mi gorro tapando mi vista de esos dos PuErkOs ¿Cómo pude aceptar venir con ellos a mis vacaciones de Hawaii? Y luego recordé que soy menor de edad. Mi vida no puede apestar más de lo que está. En fin cuando llegamos mi madre se pidió dos habitaciones y cuando digo pido ella fue la que pago. Aquel chico de cabellos rubios que se encontraba al lado de ella abrazándola por la cintura era su mantenido. Era como una especie de llavero se lo llevaba por todos lados hasta por el calzón creó.

—Cariño —me llamo mi madre la muy cínica.

Solo tomando mi maletita de ruedas caminando hacia ella con una sonrisa forzada.

—Las habitación ya están reservadas —me entrego una llave— esa es la tuya ya te puedes ir —

Mire que mi llave decí 110 mientras de ellos 230.

—¿No me tengo que quedar contigo por que soy menor? —alzando mi ceja.

—No hijita linda —la voz burlona del rubio oxigenado me respondió— tu mami y yo tenemos que hacer cosas—

Si sacarle más dinero Idiota. Solo alcé mis hombros levemente sin mostrarle mucha importancia.

—Diviértanse —me di la vuelta ya que mi habitación queda al otro lado de ellos.

Cuando llegue a esta lo primero que hize fué tírame a la cama.

—Genial primer día sin hacer nada —susurre bostezando— debería dormir solo un ratito —acomodé mi cabeza en el colchón— solo un poquito —cerre mis ojos por completo.

Abrí mis ojos al escuchar como tocaban mi puerta bufé levantándome de la cama cuando note que había oscureciendo ¿Qué hora es?.

—¿Quién es? —volviendo a cerrar mis ojitos recostandome en la puerta.

—Soy yo SeRim —se escucho su voz al otro lado de la puerta.

¿SeRim? ¿Qué diablos así aquí?.

—¿Qué quieres? —pregunté abriendo la puerta.

—Si yo también estoy bien —me respondió sarcásticamente entrando a mi habitación.

Solo volteó los ojos. El muy inepto se tiró en mi cama sin mi consentimiento ¡¿Acaso estoy pintada?!.

—Salte de mi cama —me acerque a él para sacarlo definitivamente de mi habitación.

—¿No debería llamarme papá? —me miró con una sonrisa burlona.

—Ni en tus sueños más sucios idiota —lo cogí del brazo para sacarlo pero me jalo haciendo que me cayera encima de él.

Intenté de levantarme pero el muy imbécil había puesto sus manos en mi cintura.

—¡Sueltame! Soy capas de llamar a la policía y te jodes SeRim —

Puse mis rodillas a sus costado de su cadera y también hice lo mismo manos mis manos para impulsarme para por fin salirme de su agarre pero no lo logré.

—Sueltame ya —hable molesta cuando mi mejilla choco a su pecho.

—Te has portado muy mal ____ —

Me sostuvo con un brazo a mi cintura y con su mano libre me levanto mi falda para tírame nalgadas. Mis chillidos de dolor se escucha por toda la habitación me ardían de tantas palmadas.

—SeRim... —jadeó con fuerza— para... —intente de regular mi respiración.

—Te dije que te voy a castigar y eso lo que voy hacer —su voz se oía firme.

Se separó de mí quitardose la camisa y la correa. No pude levantar de la cama me sentí ¿Agotada?. Es algo que nunca podré explicar. Me agarró de los muslos poniéndome en cuatro. Sentí una especie de humedad en mi parte íntima. De pronto sentí un correazo.

—Ah... —aprete las sábanas y agache mi cabeza.

—Eres una niña muy mala ____ —

¿Ahora yo que hice?. Sentí el segundo correazo que me hizo sacar unas cuantas lágrimas ¿Por qué no lo detenía?. Me preguntaba me mi cerebro ni mi cuerpo no respondía. Me cogió de los extremos de mi trusa y los bajo hasta las rodillas. Me agarró de la cadera penetrandome de una estocada.

—SERIM —grite cayendo al colchón pero mis piernas seguían en firmes.

—Joder estás estrecha —gruñio ignorandome.

Empezó a moverse suave. Se sentía demasiado bien que él estuviera dentro mío. Paso sus manos por mis cintura enderezandome en la cama. Sus labios pasaron por mi cuello para después morderlos. Me agarró del menton haciendo que girará un poco mi cabeza para poder besarme. Sus labios eran suaves y un poco finos. Mientras nos deborabamos sus dedos comenzaron tocar mi clítoris causandome más placer al instante.

—SeRim... —gemi entre besos.

Sentí como mis paredes lo apretaban. Me volvió a ponerme en la misma posición de antes. Para coger de la cadera embistiendo fuerte hasta brusco llegando al punto G cayendo rendida por completo. Sentí algo espeso caer de mi vagina. Él se había eyaculando dentro de mí. También cayó rendido a mí lado.

Abrí mis ojos de golpe sentandome en el colchón ¿Todo había sido producto de imaginación?. Sentí como mi parte íntima tenía una especie de punzadas y húmeda. Negué con la cabeza resoplando fuerte. Tendría que darme una ducha bien fría para quitarme estás ganas que traigo con el idiota del novio de mi madre.