Tranquility base Hotel & casino - Alex Turner.

5

-Katrina

Era jueves y me encontraba en mi departamento, tomando un té en una silla que estaba al lado de la ventana con una gran vista hacia la ciudad de Londres.

El sonar de mi celular me desconcentró de mi paz mental, fruncí el ceño, ya había terminado mi día de trabajo ya que eran eso de las 18 horas.

-¿Diga? - pregunté al ver el número desconocido en la pantalla.

- ¿Katrina? Soy Alex... - cuando escuché su ronca voz sentí un cosquilleo en la espalda.

- Ah.. Alex, ¿Cómo estás? ¿Ya pensaste en algo? - pregunté dejando mi taza en la mesita ratona del pequeño living room de mi departamento.

- Todo en orden, gracias... Y no he pensado en nada, la verdad estuve haciendo otras cosas... De todos modos te llamaba para preguntarte si podrías venir mañana, según tu horario ví que podrías tomarte el día en la empresa, se que ellos no tendrán problema ya que esto cuenta como trabajo.

Pensé unos segundos, esto sumaría mucho más a mi analítico profesional.

- Está bien. - acepté por fin. - 10 AM estaré en tu hotel, nos vemos ahí.

- Estupendo, te espero, que tengas un lindo día. - sonreí y colgué.

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Arreglé el frente de mi sweater color vino, la verdad no estaba muy elegante el día de hoy ya que solo me limitaría a caminar y tomar notas, varias notas.

Entré al gran hotel, había venido en taxi ya que no tenía ganas de conducir el día de hoy.

- Buenos días - me acerqué al recepcionista - Vine a ver al señor Turner... - antes de decir otra palabra Alex apareció detrás del recepcionista.

- Katrina. - sonrió amplio.

- Hola Alex... dime Kate - lo saludé con un beso en la mejilla.

-¿Cómo estás? vaya, eres puntual. - dijo mirando su reloj en la muñeca, hoy vestía elegante...como siempre. Una camisa color blanca, pantalón de vestir, y zapatos negros.
Olía a un perfume amaderado, fuerte...y también a puros.

- Me encuentro bien gracias... Y si, me gusta aprovechar el día al máximo. - sonreí amplio caminando por los pasillos de aquel gran hotel acompañada por éste intimidante hombre.

- Bueno, quiero que a partir de hoy te sientas como en tu casa, eres libre de venir cuando quieras a tomar fotos, notas... Lo que necesites. Planeo hacer algunas pinturas para algunas habitaciones, ambientar el último piso, y quizá también algún que otro corredor. - explicó Alex mientras caminábamos por la planta baja.

- Bien... ¿Podríamos empezar por el último piso? - pregunté curiosa, la verdad desde la última vez que ví el tablero tenía muchas ganas de ir a ver qué es lo que había en el último piso. Alex rió.

- Me gustaría dejar eso para el final. - dijo y cuando entramos al ascensor marcó el número 5.

-¿Qué es lo que hay allá? En el tablero dice exclusivo. - dije señalando con mi dedo.

- Ya te dije, lo verás al final. - dijo riendo con aire de misterio, me quedé seria y le reste importancia mirando hacia el frente.

Llegamos al piso cinco y comenzamos a caminar por los corredores, Alex abrió una puerta con su tarjeta. Era una suite realmente grande, parecida a la que había ido con Liam hace una semana.

- Ésta es la Hillarius - dijo haciendo referencia al nombre. Estaba ambientada como todo el hotel, una mezcla de estilo renovado, barroco, y muchos muebles que parecían ser realmente caros. Predominaban los tonos dorados.