15

477 33 1
                                    

Las vísperas de Navidad transcurrieron cómo cada año, con muchas cosas por hacer. Mamá cocinando desde temprano, limpiando la casa, acomodando cosas, y Alex ayudaba en todo momento.

Eso de las 8 pm habían llegado mi hermana, Luke y la bebé.

- ¡Katrina! - comento feliz al verme, no nos veíamos hace tiempo, al igual que con mamá. Nos abrazamos fuerte.

- ¿Cómo estás? Estas hermosa, te he echado mucho de menos - comenté feliz al verla, me alejé del abrazo. - Caroline, Luke, el es Alex.

Alex saludó amablemente a ambos, y a la pequeña Helena.

- Hola hermosa. - hizo cosquillas a la niña, que ya caminaba sola y soltó una risita.

- Di Hola Alex - le indicó mi hermana arrodillándose a su lado.

- Hola Alex - saludo helena con su vocecita, Alex sonrió enternecido.

Una hora más tarde mamá sirvió la cena de navidad, Pavo relleno, papas y coles de Bruselas, una comida típica del país para afrontar las frías navidades.

La noche transcurrió en largas charlas, viejas historias, anécdotas y muchas risas. Tener a Alex en mi casa éstos días, e inclusive hoy había sido como si mi familia lo conociera hace años, estaba tan agradecida por cómo se habían dado las cosas, ya que podría haber ocurrido un escenario totalmente distinto y que Alex no se lleve bien con mi familia como podría ocurrir, pero todo había salido de maravilla.

Luego de lavar y ordenar todo, Caroline fue a recostar a Helena que ya se había dormido en el sofá, ésta noche estaba permitido que duerma con Alex - la noche anterior habíamos dormido juntos a escondidas, mi madre era tremendamente anticuada.- así que habíamos mudado todas sus cosas a mi cuarto. Y nos encontrábamos en la sala bebiendo vino y comiendo cosas dulces, las charlas eran entretenidas y las horas se pasaron tan rápido que habíamos olvidado qué hora era. El reloj marcó las doce haciendo sonar las doce campanadas y mamá feliz comenzó a saludarnos uno por uno con un gran abrazo.

- Feliz navidad... - susurró Alex en mi oído, en medio de un cálido y fuerte abrazo. uno sincero, que demostraba todo lo que el sentía por mi, y todo lo que yo había llegado a sentir por el.

Una vez que todos nos fuimos a acostar, salí del baño lavando mis dientes mientras Alex tocaba suavemente una melodía en mi vieja guitarra color rosada. Lo miré sonriente y el me devolvió la mirada.

- ¿No hago mucho ruido, cierto? - pregunto asegurándose de no molestar a mi hermana que se encontraba durmiendo al lado, tocaba súper bajito para no hacer ruido.

- No, cariño - dije como pude entre pasta de dientes y el rió por eso. Volví a terminar de lavarme y cuando salí me recosté a su lado.

El dejo la guitarra y comenzó a besarme suavemente.

- Tengo una sorpresa para ti, pero tendrás que esperar hasta mañana. - dijo bajito, en medio del beso. Asentí sin decir mucho más ya que disfrutaba besarlo.

- Prométeme que cuando te vayas te acordarás de mi. - dije separandonos nuevamente. El me miró serio.

- ¿Por qué tienes que mencionarlo? Justo ahora...

- Porque hay que hablar de ésto Alex... - dije atando mi cabello en un moño. El me miraba molesto.

- No, creí que había quedado claro en qué íbamos a disfrutar éstas vacaciones... Solo nosotros, nadie más, ningún otro viaje o gira. - mencionó haciendo un ademán con sus manos.

- Ya sé lo que dijimos, pero realmente me está matando... - lo miré entristecida. - Cada día que pasa es peor... - baje la mirada. - cada día me pierdo más en ti, y me aterra lo que se avecina, es inevitable.

Tranquility base Hotel & casino - Alex Turner.Where stories live. Discover now