OCULTOS(CHENGNING)

Promesa

Después de la resurrección de Wei Wuxian de los Túmulos Funerarios y haber peleado a muerte contra Wen Chao y Wen Zhuliu, Jiang Cheng lo perdono; la gran venganza que había estado obsesionándolo por fin se había llevado acabo. Wen chao y Wen Zhuliu había tenido una muerte espantosa a manos de su hermano, una muerte justa, pagando todas las muertes ocasionadas en El muelle del loto incluyendo la de sus padres.

El sabía que en parte la terrible tragedia que había pasado en su hogar no había sido culpa de Wei Wuxian, más sino la avaricia del clan Wen y las ganas de querer apoderarse de todas las sectas; pero había alguien a quien culpar y segado por la ira, envidia y frustración creciente en su interior de varios años la apunto a su hermano.

Al saber de su muerte en los túmulos funerarios y la gran falta que le hizo ese ser idiota, pudo darse la paz de perdonarlo incluyendo también la dura verdad que se le fue revelada días después al haber preguntado sobre la energía resentida que podía dominar Wei Wuxian. 

El tenía su núcleo dorado.

Gracias a su propia ignorancia y sed de venganza había entrado a la boca del lobo, indefenso, le habían aniquilado su núcleo y si no fuera por él y las personas -desconocidas para él, ya que Wei Wuxian se negó a contárselo- que lo ayudaron en la operación nunca hubiera podido volver a luchar, muchos menos ser un líder de secta. ¿Cómo no podría perdonar a su hermano con tan gran sacrificio que hizo por él? ese mismo día se juró a si mismo apoyar y ayudar a su hermano fielmente, contra todos y contra todo. Poco sabía Jiang Cheng que por la boca muere el pez.

Una semana antes del ataque contra Wen Ruohan.

Era una noche tranquila en El Muelle del Loto. Wei Ying y Jiang Cheng caminaban por las viejas tablas que conformaban el puerto, haciéndolas sonar en cada paso que daban. Observando las hermosas estrellas y la luna que les iluminaba la calma agua del lago, Wei Wuxian pensaba en cómo empezar este tema.- Debe ser hoy, no queda tiempo. Se los prometí.-pensaba.

Llegando al final del muelle se sentaron en la punta, uno junto al otro meciendo sus pies. Jiang Cheng llevaba una pequeña jarra de licor. Era costumbre para ellos venir todas las noches a beber unos tragos al final del muelle aunque esta noche era diferente y él lo sabía, su hermano JAMAS había sido un tipo callado, mucho menos cuando habría licor de por medio. Lo miro, estaba pensativo casi como en trance. Soltando un suspiro cansado, le acerco la jarra y hablo.

- Wei Wuxian, si tienes algo que decir, suéltalo me estas cabreando.- dijo con irritación, para ser ignorado mejor se iría a dormir.

- Eh, si, si ¿Cómo sabes que quiero decir algo?- Agarrando la jarra y observándola en su mano empezó a destaparla.

- ¿No es obvio? Estas callado, crecí contigo, idiota.- Lo miraba fijamente, realmente estaba cabreado.- ¿Qué cosa podría tenerlo tan consternado?-

- Aiya~ Tomando una gran bocanada de licor y limpiándose la boca con la manga de su túnica negra hablo.- Tengo que pedirte un favor... no, más bien, necesito que me ayudes. Es algo muy importante y ya no me queda tiempo.- Lo soltó lo más rápido que pudo. Sabia el temperamento de su hermano y no sabía cómo podía reaccionar a tal semejante petición, así que había venido preparado con ropa ligera por si lo tiraba al lago para ahogarlo.

-¿Puedes ir directo al punto? ¡NO TENGO TODA LA NOCHE PARA ESCUCHAR TUS TONTERIAS!-

Wei Wuxian sabía que esta noche seria su triunfo o su perdición, así que soltaría todo. Si había de morir, lo haría por una buena causa en manos de su tan querido Shidi.