Regalame Flores (2 parte) [Omegaverse] Soukoku / Shin soukoku

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Masaki estaba sentado frente a Dazai mientras miraba al piso.

-Tómate tu tiempo.- dijo el adulto.

-Creo que Thomas me odia.

-¿Por qué crees eso?

-Es que... papá, ¿alguna vez mamá se ha molestado contigo?

-Muchas veces.

-Sí, lo sé. Pero... me refiero a ¿alguna vez has hecho o dicho algo tan cruel para lastimarlo?

-B-bueno... sí.

-¿Sí?- preguntó Masaki sorprendido. No esperaba que sus padres hubieran tenido problemas.

-Sí, hace muchos años. Mucho antes de que conociéramos a Atsushi. Éramos demasiado jóvenes...

-¿Qué fue lo que hiciste?

Dazai sonrió amargamente, se puso de pie y se acercó a Masaki y lo abrazó con fuerza.

-Te lo contaré, pero necesito abrazarte para saber que todo salió bien.

Masaki abrazó también a su padre. Nunca lo había visto así, y le preocupaba.

-No es necesario que hables de esto.- dijo.

-Ya lo sé, pero siento que deberías saberlo. Chuuya y yo acordamos que no hablaríamos de esto, pero creo que necesitas aprender algo de esta historia.

-¿Fue tan malo?

-No, sí, no lo sé. Pero fue lo peor que pude haber hecho en mi vida.

-¿Qué fue lo que pasó?- preguntó Masaki un poco nervioso.

(•••)

Yayoi había sacado la nota de su libro y estaba nerviosa por leerla.

Miró a su alrededor para asegurarse de que Emiko no estuviera cerca y comenzó a leer.

"Hola Yayoi :)
Probablemente no estés feliz por la situación. Porque apenas nos conocemos, pero ya descubrimos que somos una pareja destinada.

Yo estoy feliz por eso.
Porque siempre soñé con tener a alguien así.

Pero no sé qué es lo que realmente pienses tú.
Me haré responsable de todo esto. Seré una novia muy buena, lo prometo.

De todos modos, tal vez deberíamos hablar de esto. Ven mañana al café y hablemos calmadamente de eso.

Atentamente: Emiko :) "

-¿"Mañana..."?- preguntó Yayoi para sí misma.

-O sea hoy.- dijo alguien detrás de ella.

Era Emiko, quien sonreía tímidamente.

-¿Qué haces aquí?- preguntó Yayoi por instinto.

-Trabajo aquí, me viste.

-Ah, sí...

-¿Y tus amigos?

-Se fueron.

-¿Todos?

-Eso parece.

-Oh, entonces... ¿podemos hablar?

Yayoi miró a su alrededor tratando de buscar una excusa. No quería hablar de eso, sabía que diría algo hiriente.

-¿Ahora?

-Sí, ahora.- dijo Emiko.- Oh, espera, ahora vuelvo, traeré algo para ti.

Emiko volvió a la cocina y dejó sola a la otra chica, quien rápidamente comenzó a guardar sus cosas.