Superdotados, la clave olvidada

Negocios sucios

8. Negocios sucios

8.1. Bases del engaño

Cualquier deseo, esperanza o temor puede ser explotado por personas sin escrúpulos. Ahora bien, la mayoría de los negocios sucios que usan la superdotación como anzuelo tiene un rasgo en común, y es que suelen explotar precisamente las imágenes distorsionadas de la superdotación (que al ser más simples que la realidad se difunden más fácilmente) y también se aprovechan de las actitudes asociadas a estas distorsiones (sobreexigencia, sobreprotección, elitismo, falso igualitarismo, etc.), que suelen formar extremos opuestos, todos simplistas y perjudiciales.

Creencias erróneas que se suelen explotar:

La superdotación como éxito fácil

Permite vender falsas promesas como la de "fabricar" superdotados (ya hay bancos de semen, y se ofrecen donantes por Internet), o la de convertir en genios a niños normales mediante métodos de aprendizaje, productos o tratamientos diversos.

La superdotación como problema

Lleva a las familias a preocuparse en exceso, gastar mucho dinero y tomar medidas contraproducentes. En tales casos se fomentan actitudes nocivas para el sujeto y su familia que generan dependencia del supuesto profesional. Esto se hace principalmente tratando la superdotación como un estado patológico, o como una posible ventaja de la que hay que suprimir los defectos.

Origen sobrenatural

La excepcionalidad de la superdotación (o de algunas de sus formas) se ve como una señal de entes sobrenaturales (ángeles, demonios, espíritus, etc.) o de seres extraterrestres, abriendo así la puerta a todo tipo de estafa y manipulación mental sectaria.

8.2. Tipos de negocios sucios y malas praxis

Venta de superdotación,

ya sea en forma de supuestos genes de superdotados (lo cual no garantiza nada, ni aun siendo auténticos), o de métodos de aprendizaje, drogas, aparatos, etc., supuestamente capaces de convertir en superdotados a sujetos corrientes.

Intrusismo y estafa:

La titulación del intruso puede ser falsa o inexistente. Además, puede afirmar ejercer o haber ejercido cargos en instituciones extranjeras (que quizá no existan, o sean de otra especialidad) o puede que haya trabajado en ellas, por ejemplo, en un puesto administrativo.

Vínculos sectarios:

Intentos de adoctrinamiento, de dirigir la vida de las personas (con reglas minuciosas, chantaje emocional, etc.), secretismo, contactos con organizaciones sectarias, uso de técnicas de control o manipulación mental, creencias y prácticas no científicas etc.

Crear dependencia:

se diagnostica siempre superdotación con algún problema (en tal caso no se detectan sujetos normales ni superdotados sanos); si hay algún problema real se exagera, y si no lo hay se "detecta" algo que nadie había notado hasta entonces. Se prescriben tratamientos innecesarios (puede haber experimentos camuflados, intrusismo, etc.).

8.3. Prevención

Para evitar el engaño, tener en cuenta que:

· La superdotación no garantiza el éxito (miles de casos históricos y actuales lo prueban); valorarla como medio para el éxito más que por sí misma contribuye a su fracaso.

· El potencial intelectual (condicionado su rendimiento por factores ambientales) es de naturaleza genética; no puede ser adquirido.

· También es falso que cualquiera pueda ser un genio si se entrena para usar "todo el cerebro".

· Es imposible crear superdotados por selección de un gen (la superdotación implica muchas combinaciones de genes distintas y muy complejas), y la clonación es por ahora inviable.

· La superdotación no es un rasgo aislado deseable (la "inteligencia", que da buenas notas), acompañado de una serie de taras a suprimir (la "pesada" curiosidad, la "excesiva" sensibilidad, etc.) sino un conjunto de características que dependen unas de otras y han de ser encauzadas de forma adecuada, no tratadas como enfermedades o defectos.

· El cerebro no es menos humano que los músculos: si los acróbatas circenses, atletas olímpicos, etc. no deben sus capacidades a la acción de seres sobrenaturales o alienígenas, tampoco los superdotados y talentosos mentales (que a veces se designan con términos esotéricos, religiosos o pseudocientíficos).

· Situar fuera del cerebro humano el origen de la superdotación alimenta el sectarismo y los negocios sucios, por muy bellas leyendas que éstos usen como cebo y por más que éste atraiga a excelentes personas.