Mistletoe |Larry Stylinson| [2]

Capítulo 15.

—Wow, ¿en serio?— Harry asiente y rompe por la mitad la pequeña rama que tenía entre sus manos, Niall y Taylor sabían que estaba centrando su atención en eso para no toparse con los ojos de ellos.

—¿Piensas que lo asustaste?— Harry deja de juguetear con la rama y niega con la cabeza, se queda callado por unos pocos segundos y suelta un suspiro derrotado.

—No sé, yo me siento asustado— Taylor frunce su ceño y analiza a Harry con la mirada intentando buscar la posible causa para que se sintiera así.

—Creo que te gusta tanto, que te causa miedo descubrir que tan lejos pueden llegar tus sentimientos— Taylor tararea estando de acuerdo con Niall.

—Pero- —la chica alza su mano cuando siente el aroma de galletas recién hechas, la época de Navidad ya había comenzando.

—Oh por dios, Niall muévete, tenemos galletas que hornear— el recién nombrado suelta un pequeño gritito de emoción y entran a la casa de Harry como si fuera la de ellos.

Bueno, prácticamente lo es, ya que pasaban más en la casa de Harry que en las suyas.

Harry suelta la rama que tenía entre sus manos y mira hacia donde se habían ido sus amigos, un puchero se forma en sus labios y lleva la mirada hacia al frente.

Posándola en la preciosa vista de Zermatt.

—Yo sólo quería hablar de mis sentimientos.

|❄️❄️❄️|

El ojiverde recorre los puestos navideños, había decido ir por su cuenta para despejar su mente, un saco largo estaba sobre su cuerpo el cual lo mantenía abrigado y cálido.

Sonríe al ver un puesto de artesanías, amaba demasiados esos puestos a decir verdad.

Su mirada recorre los distintos artículos que estaban a la venta, su mira se posa sobre dos collares en forma de anclas que al unirlos entre sí se enganchaban el uno del otro, eran bastantes bonitos.

Harry alza la mirada hasta James y sonríe amablemente.

—Hola James— el chico de ojos miel frente a él deja de tallar en la madera y mira al chico frente a él.

—¡Harry! Tanto tiempo sin verte, ¿cómo has estado?— el ojiverde se encoge de hombros restándole importancia a la respuesta que iba a dar.

—Bien, no me quejo, ¿qué tal tú?— James apunta hacia su puesto y se encoge de hombros.

—Ya sabes trabajando para estas fechas— Harry asiente ante la respuesta y sin esperar más apunta hacia los collares que habían llamado su atención.

—Todo lo que haces tiene significado, ¿cuál es el significado de las anclas?— James posa sus ojos sobre los collares que lea indicaba Harry, alza sus cejas en forma de sorpresa ya que era la primera vez que veía al ojiverde consultando por collares a juegos.

—Son dijes y las anclas atraen nuevas aventuras, estos collares son especialmente para una pareja aventurera— Harry tatarea de forma pensativa y muerde su labio inferior, ¿sería muy imprudente de su parte si los comprara?

—¿Sabes James? Los llevo— el ojimiel no puede evitar reír ante eso y sin poder contenerse más abre sus labios para preguntar lo que tanto estaba picando en su interior.

—¿Algún enamorado?

—¿Por qué piensas que es para alguna pareja? Puede ser para Niall o Taylor.

—En todos estos años jamás has comprado algo a juego para ellos, Taylor tiene tablas nuevas todos los años y Niall es felíz con las cervezas caseras que les preparas.

—Touché, pero aún no lo sé James, lo estoy descubriendo.

—Suerte en eso compañero.