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T o g a.

Me movía de un lado a otro dentro de mi celda con un aire de impaciencia.

Desde el momento en que me habían regresado después de hablar con Tara no me había podido quedar quieto. Todo esto me inquietaba a la vez que me hacía sentir como un traidor hacia mi amiga por no decirle nada acerca de mi trato con Hux y el elaborado plan que estábamos ideando para acabar con Ren.

Giraba sobre mis pasos hasta que escuche la puerta de mi celda ser abierta y observar la peculiar figura de Hux entrar por está, viendo como cerraban la puerta tras el para darnos privacidad.

- ¿Aceptó?

Suspiré vencido haciendo que Hux se llevará una mano a su frente, rompiendo con esa pose rígida que siempre llevaba.

- No lo hizo...

- No pude decirle nada, está demasiado constipada con lo que está sucediendo ahora y tal parece que aún confía en la palabra de Ren.

Hux soltó una risa sarcástica lanzando los brazos para solo dejarlos caer a sus lados, vencido.

- ¡Te dije que el jamás lo cumplirá!

- Lo se...

- ¡Su intención es tenerla aquí hasta que ella o él mueran!

- ¡Ya lo sé!

Ambos miramos al suelo, cómo si las respuestas fueran a salir de la nada de este.

- Podríamos... Intentar...

- Ni hablar. No resultará.

- No lo sabes, Hux.

Me miró con un rostro incrédulo tomando una postura rígida y "amenazante".

- ¿Te crees que no lo sé? ¿Habiendo estado ya 6 años a su servicio como el segundo al mando?

Levantando su mano me punteo el pecho repetidas veces mientras hablaba.

- ¡El maldito me ha intentado matar más veces de lo que yo he podido contar! ¡No hay manera de acercarnos sin que se de cuenta!

Aparté su mano de mi pecho con un manotazo mientras él se giraba chasqueanfo la lengua, despectivo.

- Sería más sencillo si tu amiga lo hiciera.

- No lo hará, y tampoco la obligaré. Esto te toca a ti ahora Hux.

Me pare detrás de él con aire amenazante, si no fuera por mi altura y el que soy parte de su complot me encontraría en una posición completamente diferente. Pero no lo estoy. Tengo poder sobre él y sus intereses.

- Ren está indefenso y tienes el poder para cerrar todo el ala medica si te parece.

El se giró ligeramente viéndome de reojo a lo que entendí como me prestaba atención.

- Con eso, tienes una oportunidad que nunca se repetirá. Solo debes tomarla.

Por fin se giró, dejándome ver el rostro de un hombre aterrado pero decidido. Permitiéndome soltar el aire que había retenido en mi pecho como alivio, un movimiento de su mano frente a mi rostro me regresó al momento.

- Espero y tengas razón.

[•••]

"Esto es una mala idea"

Se repetía el General Hux mentalmente mientras acariciaba el blaster en su cinturón. Su respiración se cortaba y ya iban un par de veces en donde se había tropezado por alguien gracias al mareo que le causaba estar en u a situación tan estresante.

Disparale, y eso será todo.

Fácil.

Así como giró sus pies llegando al ala medica llamo a qué activarán la alarma ante la fuga de un prisionero por el ala B.

El plan era simple: Toga distraía y Hux asesinaría a Ren.

No había manera de equivocarse.

En ese mismo momento, la alarma resonando por toda la nave alertó a Tara haciendo que está saltará de su asiento. El androide médico que la acompañaba en la habitación recibió la notificación comenzando a escoltar fuera a Tara.

- ¿Que sucede?

- Una fuga ma'am, me han indicado que nos traslademos a la sala de reuniones para su mayor seguridad.

Tara, a quien un presentimiento no la dejaba avanzar se negó plantandose en su lugar.

- Vaya a un lugar seguro, yo cuidaré de mi maestro en su ausencia.

- Ma'am, me temo que...

- Es una orden.

Su voz autoritaria terminó por convencer al androide quien sin decir más retomó su camino hacia la salida, dejando a Tara sola junto a Ren.

- Tengo un mal presentimiento sobre esto...

Tara se giró hacia su maestro y sosteniendo su mano con fuerza. Habiendo recargado su frente en la mano de su maestro se sintió perturbada por otra presencia dentro de la habitación.

Inmediatamente se levantó y encendiendo su sable amenazó a la figura que se asomaba en la puerta, encontrándose con la cara de su amigo Toga.

- No podré escapar si me cortas a la mitad.

- ¿Que diablos haces aquí? ¡¿Estás loco?!

- Me regañas luego. Tenemos que ir por tu Padre.

Su amigo tomándola del brazo la arrastró fuera de la habitación a pesar de sus protestas.

- ¡Toga! ¡Espera!

- ¡No hay tiempo, Tara!

Girando la esquina Tara logro notar una sombra entrar a la sala de Ren haciendo que sus sentidos se dispararán, cómo su propia alerta roja en su cabeza. Sacándose el agarre de su amigo de encima ambos se quedaron pasmados en medio de un pasillo viéndose uno a otro.

- ¡¿Que diablos haces?!

- ¡Debo volver con mi maestro!

Girando sus pies empezó la carrera para regresar a proteger a Ren dejando a Toga ver solo como su amiga se alejaba encendiendo el sable de hoja negra en su camino.

Jadeando ante la tensión que sentía en el pecho, los pensamientos de Tara brincaban de un lado a otro haciéndola sentir mareada. Algo la llamaba, algo le obligaba volver a los brazos de su maestro.

Fuera bueno o malo, era una fuerza con la que no podía pelear.

Entrando en la habitación levantó el sable lista para atacar encontrándose con un par de troopers en el suelo y uno suspendido en el aire ante la acción de un brazo extendido hacia él.

Kylo Ren había despertado.

-✏️

[[ C r a c k e d ]] (Kylo Ren)Where stories live. Discover now