Conexiones Oscuras

Capítulo 11

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Habíamos decidido ésta vez ir en una sola camioneta dónde entramos todos sin dificultad alguna.

Conduciendo iba Alexander, a su lado Annie, pues había insistido demasiado en ir en la parte delantera y en una ventana. Según ella se mareaba en los viajes, cosa que tomó como ventaja para tener el lugar que quería. En el medio estaban. Abiel y Arthur, y detrás Alec Asher y yo.

Desde hacía buen rato habíamos agarrado camino y yo intentaba terminar de leer un libro que tomé de la biblioteca el día que con Alex planeamos la ida al bosque y no había tenido tiempo de leer. La verdad, es que no le encuentro el sentido. Es aburrido, su protagonista es un pueblo y su historia, el desarrollo de éste. La voz de Abiel me trajo de vuelta a la situación en el auto. Era todo un caos.

— Bri—Me llamó Annie y levanté la mirada de mi libro para prestarle mi atención.— ¿Cómo es que siempre estás tan despreocupada por los parciales? O sea, estamos aquí intentando estudiar un poco y tú ni atención prestas—Dijo con reproche en la voz.

Solté una risa por lo bajo. Iba a responder pero Asher se me adelantó.

—¿Es que no te habías dado cuenta antes? Bri es una genia, es súperdotada.

Todos pusieron la atención sobre mí. Y fue Arthur el primero que habló después de echarme una mirada de arriba a abajo.

—Si, de eso estoy seguro.— Dijo con tono de voz pícaro mientas se mordía ligeramente el labio inferior. Que idiota. Que sexy idiota.

Resoplé a la vez que Asher se estiraba a meterle un golpe seco en el hombro.

—Auch—Se quejó—¿Y eso por qué fué?

Dijo con burla en la voz mientras que los chicos soltaban risas ligeras.

—Por pensar esas cosas de mi hermanita ¿No ves que está chiquita? Viejo tonto— Dijo Asher entrecerrado los ojos.

—Tenemos la misma edad, además tu mismo lo dijiste, y eso que lo tuyo si es raro.

Hizo una pausa.Lo estaba diciendo apropósito, sabía que no se refería a eso

—Norteño—Masculló por lo bajo y dedicándole una de esas miradas suyas que hacían molestar a todo el mundo.

—Cállate imbécil—Corté en tono mordaz. Y tomé la palabra. Arthur seguía con su mirada burlona.

—No, no soy una super dotada— Le lancé una mirada de advertencia a Art que hizo que todos rieran— No soy una cerebrito ni nada por el estilo. Solo tengo algo que se llama memoria fotográfica. Puedo recordar prácticamente cualquier detalle de mi vida solo con haberla experimentado por muy poco tiempo o en este caso, recordar muy bien algo que he leído una sola vez.

—Mierda—Soltó Alexander desde el asiento del conductor— Eso es brutal.

—Te arrebataron el puesto que tenías como el nerd del grupo—Dijo Alec burlón como siempre.

—Si, pero aún así, te sigo superando.— Rebatió.

—Ya quisieras— Dijo, y antes de que pudiera decir otra cosa saltó Annie de su asiento para hablarme.

—Me puedes ayudar a estudiar, serías excelente profesora si lo intentas.— Me miró y cuando vió vacilación en mi mirada hizo un pequeño pucherito y solté una risa, mientas enarcaba una ceja.

—Está bien, lo haré.

—¿Cómo es posible que a mí nunca me has pedido ayuda?— Exclamó con indignación Alexander poniendo una mano en su pecho y ligeramente inclinado hacía Annie.