El Miedo De Yin

3.7K 447 214
                                    

La desconfianza invadía mi ser

Oops! This image does not follow our content guidelines. To continue publishing, please remove it or upload a different image.

La desconfianza invadía mi ser. No podía confiar en nadie, y menos si era una misión dónde solo iba con Anbus. Estaba atenta a cada sonido que se escuchaba al rededor, cada movimiento de mis acompañantes.

El líder del escuadrón iba enfrente de nosotros; nos estaba guiando. Había dicho que el terreno que teníamos que explorar estaba cerca Konoha, por lo tanto debía de ser rápido.

No quería mostrar mi inseguridad, e incluso el poco miedo que tenía, si lo hacía, me haría un blanco fácil.

—¿Estamos cerca?— cuestionó uno de los Anbus.— Ya deberíamos de haber llegado.

—Solo un poco más.— respondió el líder.— El mapa es un poco confuso.

No era común que tuviera miedo, o que estuviera angustiada, pero al ser una misión dónde el consejo estuvo presente a la hora de la asignación, me ponía los cabellos de punta.

Seguimos caminando un poco más, pero sentí la presencia de otras personas, y al parecer no fui la única, pues los Anbus se detuvieron.

Mire por el rabillo de mi ojo, y noté como uno de ellos sacaba un Kunai. Sin pensarlo, lo lanzó directo a mí, pero otro kunai choco evitando el ataque.

Solo uno se puso frente a mí, mientras que los otros tres estaban enfrente de nosotros.

«¿Por qué? ¿Por qué de nuevo? Solo quiero que me dejen en paz».

—Uchiha.— llamo el que me estaba protegiendo.— Corre, yo los detendré. Uno contra tres, no es nada.

No lo pensaba dejar, no si era porque me buscaban.

—Pero no solo son tres.— se escuchó una voz a lo lejos.— Somos más.

De los árboles, salieron más Anbus, y nos rodearon.

—¿Qué significa esto?— hablo de nuevo.

—No hay terreno que explorar, solo queremos a Uchiha Yin.— apunto con su katana.

Esa fue la señal para que los Anbus nos atacarán. Empezaron lanzando Kunais y Shurikens, ambos dimos un salto.

¡Estiló de fuego: Justu bola de fuego!— grite.

Algunos evadieron mi ataque, mientras que otros no pudieron. Alguien había aparecido detrás de mí, pero un Kunai lo atravesó. Nos escondimos detrás de un árbol.

—Debe salir de aquí.— ordenó el Anbu.

Negué con mi cabeza, no podía dejarlo, Kakashi nos había enseñado a nunca abandonar a un compañero.

—Mi vida, no vale nada comparada con la tuya.— me tomo de los hombros.— Si te atrapan, será el fin.

Una ráfaga de viento nos atacó, ambos nos separamos; mi cuerpo se estrelló contra un árbol, mientras que varios Anbus aparecieron frente a mí.

La Última Uchiha Where stories live. Discover now