Culpable © | ᶜᵒᵐᵖˡᵉᵗᵃ ✔ |

CAPÍTULO XXI

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Morana

— Mora... déjame explicarte.

— ¿Explicarme? —dolía que fuera él. — ¿Me viste sufriendo, buscando a Boy G, para que luego me salgas que siempre fuiste tú? —estaba aguantando las ganas de llorar. —¿Te divertiste viéndome así? —la situación estaba fuera de control, él intento acercarse, pero me aleje.

— No es lo que crees. Primero tranquilízate y te diré como fueron las cosas; no sabía cómo decírtelo. —su expresión era de desesperado y dudé un poco; pero pronto vino los recuerdos dolorosos y me abstuve.

— Tú viste lo mal que estuve, te abrí mi corazón y te dije las cosas más importe que me había pasado.

— Espera. Yo nunca te he mentido, las cosas que te he dicho son ciertas, nunca había sido yo mismo hasta que te conocí. 

Y a partir de ese momento mis sentimientos se congelaron, no podía ni siquiera encontrar el sentido de esa confusión con lo que sentía. Volví a mi escudo de antes; con mi sonrisa fría y la mirada despectiva que solía usar para todos.

— Tuviste la última oportunidad en la fuente de la escuela, Tae Hyung. Fuiste tú quién me dijo que invitara a Boy G, y me hiciste esperar como una estúpida destrozando mi corazón. —solté cruelmente. — Se acabó. Esto se termina ahora.

Tae Hyung intento detenerme cuando me había girado rumbo al auto, pero no logro hacerlo ya que no podía detenerme cuando me cerraba de esa forma. Me subí al auto de mi madre y lo dejé en ese lugar. Estaba furiosa conmigo porque de verdad creí que había encontrado la persona perfecta para mí y sería feliz después de todo. 

Miré por última vez el retrovisor dejando correr algunas lágrimas. Estaba tan desilusionada. 

***

Transcurrieron las dos últimas semanas de clases y volví a ser la chica de antes. Cara inexpresiva. Escuchaba murmuran a mis compañeros de clases lo notorio de mi cambio tan retraída y malvada que todos conocían. Era como resurgir de las cenizas, con más rumores acerca de lo despreciable que era. Pero no me importo. Ya no.

— Estas actuando como antes. —soltó, Ethan a mi lado escondiéndonos detrás de las gradas para fumar tranquilos y sin ser visto por el señor Will. — Hasta el rubio con el que te solías juntarte parece bastante dolido por tu actitud. —me comenta, pues estaba evitando a toda costa a Evan. Esa mañana estaba tan de mal humor que explote con él diciéndole que estaba cansada que me usara.

— Créeme que le hago un favor. No es nada bueno que se junte conmigo. —le di otra calada y entre los dos hubo un silencio.

— Lo único que te puedo decir, es que lo estas arruinando lo que tenía por un tipo que es un gran idiota. —dice y era más complejo que eso. Recupere en ese tiempo la confianza, ilusiones, hasta había pensado asistir al instituto de Arte de California todo por el apoyo de Tae Hyung. Pero ahora perdí toda motivación.

— No quiero escuchar sermones, Ethan.

— Ni que te estuviera regañando. Sabes que no es mi estilo y sería muy hipócrita de mi parte. —en eso estuve muy de acuerdo. Lo mire un par de segundo y esa sonrisa me dejaba un poco más tranquila que un amigo este a mi lado en ese momento. Estaba agradecida por eso.