𝑯𝒖𝒈 𝑴𝒆 ; 𝓛𝓮𝓮 𝓜𝓲𝓷𝓱𝓸.

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Sentí unos sonidos insoportables a mi lados y con un poco de dificultad abrí lentamente mis ojos soltando un quejido por la intensa luz de la habitación, escuché unas voces de fondo para luego sentir como un señor de no tan avanzada edad vení para revisarme.

Entonces me sorprendí, el día de ayer estaba en un departamento con Minho, divirtiéndonos y siendo felices, como nunca antes lo había sido, mire al doctor buscando alguna respuesta, mis palabras no salían sintiéndome asustada, mire a mi costado encontrandome con Seungmin, mis lágrimas no tardaron en salir con solo verlo y negarme a aceptar mi realidad.

El doctor salió del lugar juntó con Seungmin mientras yo me quedaba mirando la ventana de la habitación tratando de recordar algo.

— Jihu..

Escuché una voz muy reconocida para mí, mire al pelinegro soltando un pequeño sollozo.

— Dime qué todo lo que viví no fue un sueño, por favor.

— Jihu...

— ¡Seungmin, por favor!

— Has estado en coma casi por tres años.

Me quedé viéndolo con algunas lágrimas en los ojos, deje caer la primera para luego estallar en llanto sintiendo como mi corazón latía con fuerza, a la vez que sentía como se rompía.

— ¿C-como paso?

Lo mire con miedo para luego bajar la mirada, suspiré suavemente mirando mis manos viendo que el anillo que tenía en mi dedo anular de mi mano derecha no estaba.

Seungmin me abrazo sin decir nada más dándome su calor corporal, acariciaba mi cabello en forma de aliento y para poder darme tranquilidad, sentía como mis ojos pesaban mientras el llanto cesaba, me acomode en sus brazos quedándome dormida con mis ojos ardiendo y una que otra lágrima saliendo.

Pasaron unas cuantas semanas para que me pudieran dar el alta, el doctor le daba varias indicaciones a Seungmin porque yo era capaz de poner atención a todo lo que decía, luego de ver qué ya podíamos irnos empecé a caminar lo más alejado de ellos mirando a mis alrededores. Mire un carro color blanco a lo lejos y me quedé parada en mi lugar viendo como un hombre que podía reconocer a lo lejos se acercaba a mi, mi padre tenía una expresión sería mientras me veía a los ojos, una vez frente a frente me entrego un sobre el cual no me moleste en abrir.

— ¿Cómo estás, pequeña?

Levanté la mirada suspirando para luego responder con pocos ánimos.

— Creo que tuve días mejores, ¿Que haces aquí?

— Solo venía a entregarte este sobre, no te volveré a molestar con nada referente a lo sentimental, pude entender que mi hija es lo más valioso que tengo.

No dijo nada más y antes de irse se acercó a besar mi frente dándome una ligera sonrisa, se dió la vuelta lata ir directo al su auto e irse, baje la mirada encontrandome con el sobre, lo guarde y seguí caminando con Seungmin detrás mío.

Durante todo el camino a mi casa no dije ninguna palabra a pesar de que mi amigo quería sacar una conversación para poder verme sonreir.

Cuando baje del auto mire a lo lejos una silueta reconocida, me fui acercando poco a poco pensando que era él, al darme cuenta que solo fue una ilusión me di la vuelta y camine hasta la puerta de mi casa.

— Deberías comer algo, Ji.

Negué otra vez con la cabeza haciéndome un ovillo en la cama, está era la décima vez en el día que Seungmin me insistia comer, habían pasado algunas días desde que llegué del hospital, no salía de mi habitación a menos que fuera necesario, me la pasaba en la cama llorando o durmiendo con la esperanza de que todo esto sea un sueño y volver a la vida que tenía antes.

El pelinegro tocó nuevamente la puerta de mi habitación avisando que estaba entrando, se acostó a mi lado pasando sus brazos por mi cintura, me di la vuelta escondiendo mi cabeza en su pecho volviendo a estallar en llanto, sentía como trataba de calmarme, así estuve durante unas horas hasta quedarme dormida.

Cuando desperté no sentí la presencia del más alto, supuse que había ido por algo de comer viendo la hora, era algo tarde así que me quedé en la cama escondiendo mi cabeza en mis rodillas.

Escuché el golpe de la puerta pensando que sería Seungmin con la comida, pero al ver quién entro por la esa puerta sentí que estaba viviendo nuevamente un sueño del cual no quería despertar, se quitó su tapabocas mirandome a los ojos con una pequeña sonrisa en su rostro.

— Mi pequeña, Ji.

Dejé salir algunas lágrimas de mis ojos levantándome a pasos torpes hasta él para abrazarlo con fuerza sin dejar de llorar.

— Por favor, abrázame y dime qué eres real, que regresaste solo por mi, Minho, por favor.

Pedí sin dejar de llorar, el mayor me envolvió en sus brazos cargandome hasta la cama, limpio mis lágrimas con sus pulgares dejando un beso en mi frente.

— Perdón por desaparecer así, pero si viaje sin decirte nada fue porque mi madre estaba en sus últimos días de vida, lo siento tanto pero tuve que hacerme cargo de todo lo que me dejaron y ahora que me estabilice pude venir a verte.

Lo escuché atentamente sin soltarlo, no quería que se fuera o solo despertar para darme cuenta que puede ser un sueño.

— Cuando el enteré de tu accidente no supe cómo reaccionar, no quería perderte pero no podía volver.

Asentí a todo lo que me decía escondiendome en el hueco de su cuello.

— Ahora estoy aquí, estoy abrazándote, ahora ves que todo lo que soñaste podrá ser real.

— Minho..

— Mi pequeña cereza, vamos a estar juntos apartir de ahora, ¿Entendido?

Lo abrace nuevamente uniendo sus labios con los míos sabiendo que ahora sí lo estaba besando de verdad, porque quería que esto funcionará, porque en mi sueño los dos éramos felices juntos, y quiero hacerlo real.

Por eso siempre le dije "abrázame" porque así podía saber que él era real y sus abrazos eran los más cálido haciendome sentir el amor que me tenía.

Minho, te amo.

Fin.

Les quiero agradecer el apoyo que le han dado a hug me, la verdad tenía está idea planteada desde el principio hacer que todo sea un sueño, muchas gracias por todo y espero que hayan pasado una linda navidad y tengo un próspero año nuevo, si re tarde se los digo, pero se los digo jjaaja. También les pido perdón por la inactividad pero mi familia a estado pasando por algunos contagios y hasta yo, así que si van a salir tomen todas las medidas necesarias para evitar futuro contagios, contagiarse no es muy bonito que digamos y no le deseo a nadie que lo pase.

Cuidense mucho y l@s quiero.
Gracias por leer. ,💕✨