𝑯𝒖𝒈 𝑴𝒆 ; 𝓛𝓮𝓮 𝓜𝓲𝓷𝓱𝓸.

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El sol estaba saliendo y lo podía ver a través de la ventana que daba la vista al mar, el sol se reflejaba en el agua dando un hermoso toque nostálgico, me quedé atrapada en mis pensamientos que no sentí las manos de mi novio rodear mi cintura.

— ¿Por qué tan temprano, linda?

Negué mirándolo, dejé un pequeño beso en sus labios, sonreí pasando mis brazos alrededor de su cuello y ladee mi cabeza de manera tierna.

— No podía dormir, Minho quisiera vivir aquí, es un lindo lugar para relajarnos, ¿Que dices?

Soltó una pequeña risa mirándome para luego asentir.

— Si tú quieres, no tengo problema con eso preciosa, solo debes buscar un trabajo aquí y todo solucionado.

Le lance una almohada de la cama e hice un puchero, luego lo fulmine con la mirada y suspiré con una sonrisa.

— No quiero trabajar, Minho.

— Que niña para más perezosa

— Disculpe joven por querer disfrutar de mi vida.

— Trabaja desde casa, además solo es fotografía y pensándolo bien tu eres la única que puede tomar muy bien las fotos y en lugares como estos son dónde más ganarias dinero

Solté varias carcajada y volví a tirarle una almohada.

— Baboso

Rei a carcajadas y sentí como me tiraba a la cama nuevamente.

— ¡Lee Minho!

Río al igual que yo y dejo algunos besos en mi cuello y labios.

Tomé su rostro y lo mire a los ojos, era demasiado hermoso, sus ojos, el lunar que tiene en su nariz, su risa, su sonrisa. Todo de el me encanta y no me arrepiento que ahora sea la razón de mis sonrisas.

La abrace y enrede mis piernas en su torso quiso lecnatatse pero no lo deje. Correspondió a mi abrazo y escondió su cara en el hueco de mi cuello.

— Sabes cuánto he esperado esto.

Sonreí escuchándolo.

— Es la primera vez que tomas la iniciativa de dar una abrazo.

Me abrazo más fuerte y solté una pequeña risa, te la razón era la primera vez que yo le daba una abrazo por voluntad propia, me he dado cuenta que de a poco he logrado abrirme más a las personas que son cercanas a mi.

Y todo gracias a él.

Me sentó en su regazo y beso mis labios, pase mis brazos por su cuello y jugué con su cabello mientras sus labios jugaban con los míos. Sonreí al separarme y junte nuestras frentes.

— Tu eres esa persona que me ha ayudado a seguir creyendo que todos tienen diferentes formas de amar, y tú eres la más bonita y sincera, Minho.



Tomé su mano entrelazando sus manos con las mías, sonreí al sentir su beso en mi mejilla y lo mire.

— Vamos a comer, muero de hambre

Rei levemente y me deje llevar por el hasta el restaurante que quedaba cerca de la playa, acomode la tela de mi cadera que tapaba parte de mi trasero y lo seguí.

Me senté frente a él y ordenamos algo de comer, habíamos estado todo el día en la playa, sabía de sobra que luego me llevaría a la piscina del hotel, acaricie el anillo que tenía en su dedo anular y sonreí al encontrarme con su mirada.

— No puedo creer que en unas semanas nos casaremos, nos fuimos de luna de miel antes de la boda

Solté una carcajada y metí un bocado de la sopa a mi boca, sonreí al ver mi anillo de compromiso, todo había pasado rápido, en dos años habíamos construido muestra vida sin terceras personas de por medio, ahora estaba a punto de casarme y me gustaba ver su sonrisa sincera en su rostro.

— Te ves realmente bien, Min.

El chico se sonrojo y yo seguí comiendo como si nada, se sorprendía de los comentarios que le hacía, y es que no podía creer que alguien que no me gusta las muestras de cariño sea tan melosa con el, pero había una razón.

Él era el único que sabía entenderme y también sabía de sobra que yo era así, pero siempre e inesperadamente yo salía con mi lado cariñoso hasta podía llegar a empalagarlo.

Al terminar de comer volvimos al hotel para poder descansar lo que no sabía era que el había preparado algo en la habitación, tapo los ojos y sonreí al ver el pasillo de flores, seguí el camino hasta llegar a la cama, la cual estaba decorada con flores en forma de un corazón.

Empezo a besar mi cuello y sujeto con fuerza mi cintura, me recostó en la cama y empezo a besar mis labios a lo cual correspondì de inmediato rodeando mis brazos alrededor de su cuello.

— Te amo~

Fue lo único que dijo antes de volver a besar mis labios está vez con más intensidad.