And if we can't? (Larry Mpreg)

Capitulo 15

-Chancho tengo una idea.- Hablo Harry una vez que Louis se fue a su habitación.

-¿Qué cosa papa?.- Pregunto ella estirando sus brazos para ser cargada.

-¿Vamos al mercado y compramos para hacer galletitas? Asi le hacemos una merienda sorpresa a papi.- Dijo ajustándola en su cadera.

-Siii galletitas.- Respondio ella entusiasmada.

-¿Queres que vayamos caminando?.- Pregunto el y ella asintió.- Vamos a buscar una campera entonces.- Camino con ella hasta su habitación.

Una vez listos caminaron a la salida en silencio y salieron a la calle. Iban caminando de la mano, riendo de los chistes que Harry contaba y de los que Arya intentaba contar.

-Papi.- Lo llamo ella y el la miro.- ¿Por qué yo no la vi?.- Pregunto y Harry alzo una ceja confundido.

-¿Qué cosa no viste amor?.-

-A la cibueña.- Respondio y Harry se atraganto con su propia saliva.

-Seguro estabas dormida mi amor.- Respondio sin saber que responder en verdad.

-¿Las galletitas pueden ser de chocolate?.- Ella cambio el tema y Harry suspiro alividado.

-Si gorda las que quieras.- Le contesto tomándola en brazos haciendo que se acurruque en su cuello.

Volvieron a su casa con todos los ingredientes para cocinar. Se lavaron las manos y comenzaron a trabajar.
Podemos decir que la cocina no quedo de la manera en que debería, y ellos tampoco. En algún momento, no se especificar cual, arrancaron una guerra de harina dejándolos a ambos cubiertos de esta. Reian bajito intentando no despertar a Louis, pero convengamos que Arya no era la mejor controlando su volumen.
Se las arreglaron para terminar las galletitas y meterlas al horno.

Tendrian que estar ahí unos cuarenta minutos por lo cual Harry decidio que mientras esperaban Arya iba a tomar una ducha rápida la cual acepto sin quejas.
Una vez limpia, cambiada y perfumada la dejo en el sillón y llego justo a tiempo para sacar las galletitas del horno. Acomodo todo en una bandeja, preparo dos café y la mamadera de Arya y la llamo para ir a despertar a Louis.
Cuando llegaron a la puerta Harry le pidió que entre en silencio pero ella no presto atención y entro gritando para después tirarse en la cama a un lado del menor.

-PAPI GALLETITAS.- Grito ella muy feliz justo en el oído de Louis haciéndolo casi caerse de la cama.

Con una mano en el pecho intentando calmar su corazón abrió los ojos despacio y vio a su esposo y a su hija a su lado.

-Arya te pedi que no grites hija.- La reto Harry y ella respondio con un puchero.

Louis vio su cara y una vez que estuvo mas calmado la atrajo a su brazos.

-¿Hicieron galletitas?.- Pregunto enternecido.

-Si papi ayudo.- Respondio ella y el mayor rodo los ojos.

-¿Me destruyeron la cocina?.- Pregunto con los ojos entrecerrados.

-No gordo esta todo intacto.- Respondio dándole un besito.

-¿Y porque mi hija esta recién bañada? Que yo sepa la bañe a la mañana.-

-Emm puede que emm hayamos tenidounaguerradeharina.- Dijo rápido y sin respirar.- Pero ya esta todo limpio asi que no te preocupes. Proba las galletitas dale.- Louis rodo los ojos bufando.

-No los puedo dejar solos dos segundos dios mio.- Dijo fingiendo un tono sufrido y Harry rio.

-Papa empezó con la harina.- Arya hablo.

-Dios Harry ¿Cómo vas a llenar de harina a mi bebe?.-

-Si dios Hady.- Repitio Arya y ambos la miraron con ojos abiertos.

-Bicho de porquería.- La tomo en brazos alzándola sobre su cabeza.- Para vos soy papa ¿Entendiste? Harry no.- Le decía mientras ella se retorcia de la risa.

-Hady.- Volvio a decir y esta vez le saco la lengua dejando a Harry sorprendido.

-Listo ahora te quedas en tu habitación mientras papi y yo comemos las galletitas y nos tomamos tu mamadera.- Dijo haciendo que salía de la habitación.

-No papa no.- Rogo ella.- Galletitas de Arya.- Dijo con un puchero y Harry freno su paso mirándola.

-Entonces ¿Cómo me tenes que decir a mi?.-

-Papa bonito.- Respondio ella y Harry hizo lo imposible por no reir.

-Ay te amo tanto mi gorda.- La abrazo fuerte y la beso por toda la cara.

Louis por su parte miraba todo desde la cama con una enorme sonrisa mientras acariciaba su vientre. Ahora no solo tendrían un bebe, sino que tendrían tres. Era mucho cambio, pero podían adaptarse ¿No?.