Una firma y un papel

Capítulo 20

CHRISTIAN

Quien diría que Brenda me perdonaría tan rápido, ella es distinta a las demás, ella es única

Llego a la universidad después de dejar a Brenda en la suya y hablar con sus profesores por sus faltas, tuve que ir a entregarle un certificado de la clínica para que no la perjudique.

—Hermano, ¿Dónde has estado? — me saluda Daimon.

—Por ahí, por acá, por todos lados — le digo sin importancia alguna.

—Llego otra chica, es guapa — me dice Daimon.

—No me importa — le digo muy seguro de mis palabras.

—Esa ni tú te la crees — dice Daimon burlándose.

—Me he enamorado de Brenda, mi esposa — le digo serio.

—¿Quién diría que el mayor rompecorazones se ha enamorado?, no pensé estar vivo para este momento — dice Daimon riéndose escandalosamente.

—Ríete todo lo que quieras, pero por ella voy a cambiar — le digo

—Ojalá no vuelvas a sufrir — dice esto se va

Brenda no sería capaz de engañarme, ella es distinta, ella me ama, yo la amo, por ella voy a cambiar, por ella seré una mejor persona, ella es mi mundo, ella es solo para mí.

***

Las clases terminan igual que siempre y ya me he puesto al corriente por la semana que falte, ahora solo iré a recoger a mi amada niña a la universidad.

—Daimon, ¿vienes al club?, estarán Nancy y sus amigas — me dice Aaron.

—No — digo esto y me voy en busca de mi auto.

30 minutos es lo que me demoro en ir a recoger a mi niña hermosa.

Me estaciono frente a su colegio y espero a que ella salga.

Son las 2:45 p.m. y Brenda aun no sale, ella debió salir hace 15 minutos.

No puedo esperar mas, me bajo del auto y voy hacia el colegio.

Noto las miradas de muchas jovencitas de la edad de Brenda y algunas mayores, si me hubieran mirado de esa forma hace unos cuantos meses atrás habría caído, pero ahora solo quiero hacer feliz a una sola jovencita y ella es mi esposa, mi niña, mi Brenda.

Sigo caminando entre los pasillos hasta que escucho como un profesor le grita a una de sus alumnas.

—Me importa muy poco por lo que estés pasando, no puedes estar faltando a mis clases cuando se te de la gana, eres una vergüenza para esta institución, me das pena — le decía ese profesor a una chica que no lograba ver quien era.

Solo se escuchaban sollozos por parte de la joven estudiante.

—No llores, que nadie te va a salvar de esta, de mi clase estas expulsada y no creas que tendrás una nota aprobatoria— le dijo el profesor.

El profesor la mira con deseo, él sabe lo que quiere y sabe lo que la chica está dispuesta a aceptar con tal de salvar el curso.

—Salvo que quieras ayudarme en algo, así podrías seguir en mi clase y tener esa nota que tanto deseas — le dijo el profesor y se iba acercando a ella.

—No, prefiero perder su curso antes de que me ponga una mano encima — dijo la chica cuya voz se me hace muy familiar.

—Y ¿Quién crees que te salvara?, no hay nadie, estas sola conmigo, te hare mía — le dijo el maldito hijo de perra y la arrincono contra la pared.

—Ayuda, no me haga nada, AUXILIO — grita la chica, pero es callada por una cachetada del profesor

Esa voz se me hace demasiado conocida.

Brenda, esa voz es de Brenda...no lo pensé dos veces y la puerta del salón ya estaba abajo.

—Aléjate de ella maldito cabron de mierda— le dije a este viejo estúpido.

—No es lo que parece, ella se me estaba ofrecien — no lo deje terminar porque mi puño ha estampado su boca

—Te arrepentirás de haberla asustado, no vivirás para contarla de eso me encargo yo — le dije y saqué a Brenda del salón.

Saco a Brenda del salón de clases y llamo a mi jefe de seguridad para que se haga cargo de este puto cabron que intento abusar de mi pequeña niña.

—Tranquila, ya paso — le digo a Brenda mientras la abrazo fuerte 

—Tenia tanto miedo, pensé que me haría algo — me dice ella llorando en mi pecho.

—Prometo protegerte con mi vida—le digo mirándole a los ojos.

—Gracias por salvarme Christian — me dice ella.

—Por nada pequeña — le digo y le doy un beso en la frente.

Ayer hablamos y quedamos como amigos, pero me muero por besarla y hacerle olvidar ese mal rato que paso con ese idiota.

***

Veo a Brenda acomodarse el vestido turquesa a cada rato, se nota que esta nerviosa

—Tranquila, no creo que sea para tanto lo que te dijo Benjamín — le dijo agarrándola por la cintura

—Traerá a alguien muy especial para él, obvio es importante — me dice ella

—Como tú digas — le digo

—Prométeme algo — me dice ella agarrándome las manos

—Lo que quieras — le digo yo

—Cuando llegue Benjamín y su acompañante no harás ninguna mueca desagradable — me dice ella

—No tendría porque hacerlo — le digo yo sin entender el porque me lo dice

—Y cuando Benjamín nos presente a su acompañante tampoco dirás nada y mostraras tu mayor sonrisa y felicitaras a tu hermano ¿okey? — me dice ella muy seria

—Okey, ¿oye te he dicho que te ves sexy cuando intentas ponerte seria? — le digo rosando mis labios a los suyos.

—Basta Christian — me dice ella en un susurro, pero sin alejarse.

—No quiero — le digo riendo 

—Solo haz lo que quieres hacer y ahórranos el tiempo — me dice ella y rueda los ojos.

No espero otra palabra y estampo mis labios a los suyos, no sé cómo siendo tan pequeña tan frágil su cuerpo y el mío se sincronizan tan bien, encajan perfectamente, su altura y la mía están diseñada para poder darle esos besos atrevidos y tiernos a la vez, sus labios son tan suaves que siento que beso un poco de algodón, su sabor es exquisito, un sabor a fresas, su olor es algo que me vuelve loco, todo en ella me vuelve loco y tengo que decirlo.

—Te amo demasiado, me vuelves loco en todas las formas posibles, no te vayas nunca — le digo mientras nuestras respiraciones se combinan por lo cerca que estamos

—También te amo — me dice ella.

No necesito otra cosa más, solo su amor.

Ella es mi hogar y yo quiero ser el suyo.

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COMO ESTAN?

Yo estoy feliz de la vida...

Quieren que les haga un especial de san Valentín?

OJALA LES GUSTE ESTE CAPITULO

LOS AMA SU PERVERTIDA Y LOCA ESCRITOSA

BESOS Y ABRAZOS A LA DISTANCIA...CUIDENSE MUCHOO