⚜Capitulo 13⚜

74 12 24
                                    

BRENDA

Ya llevo un mes viviendo con Christian y me atrevo a decir que nuestra relación ha mejorado mucho, Christian es atento, tierno, hasta puedo decir que me estoy enamorando de él, pero no estoy segura de abrir mi corazón aún.

Mi relación con Benjamín también ha mejorado mucho, él es un chico muy lindo, merece a una chica que lo amé mucho, no pensé que fuera a tener como mejor amigo a mi cuñado.

—Hoy nos iremos a vivir a mi departamento, creo que es hora de ser independientes — me dice Christian acercándose a mí por detrás.

No puedo evitar sonrojarme, este mes ha sido algo distinto, con Christian nos besamos y nos hemos tocado varias veces, pero de ahí nada más ha pasado, sé que es normal que entre esposos tengan relaciones sexuales, solo que aún no estoy lista para entregarme a él y menos por la manera tan rápida en la que nos casamos y las circunstancias.

—Okey — contesto y no digo nada más.

—Me gusta cuando te sonrojas — dice Christian volteándome y con sus labios muy cerca de los míos.

Este hombre me va a matar, es tan guapo — dejo de pensar porque Christian estampa sus labios a los míos dándome un beso tierno y caliente a la vez.

—Te espero abajo — me dice él dejándome con los nervios de punta.

Me pongo a acomodar mis cosas y cuando termino bajo para ver a Christian.

—¿Enserio te tienes que ir teletubi? — me dice Benjamín

—Si, pero te voy a visitar Pooh — le digo dándole un abrazo.

—Te voy a extrañar demasiado teletubi — me dice Ben y sé que se siente triste al igual que yo por dejarlo.

—Siempre voy a estar para ti — le digo mirándolo a los ojos.

Benjamín es como el hermano que nunca tuve, él siempre me trata super bien y las personas podrían pensar que él está enamorado de mí, solo que eso no es así, Benjamín es homosexual, solo que aún no se atreve a decírselo a sus padres por miedo.

—Vámonos — me dice Christian todo frio, pero sé que esta así porque esta celoso.

—Adiós Pooh — me despido 

—Adiós teletubi.

Christian sube a su auto y veo como la servidumbre sube nuestras maletas al carro. No hablamos durante el trayecto a su departamento, pero noto que está molesto.

—Christian, no sé qué pasa, pero si he hecho algo malo perdóname — le dije cabizbaja, a pesar de saber que no tengo la culpa, no puedo evitar pedirle perdón.

—Tu no has hecho nada malo preciosa — me dice él mirándome a los ojos.

Las palabras de Christian me reconfortan.

—¿Porque estabas enojado? — pregunto.

—No es nada — dice él

—Dime la verdad —pido.

—No me gusta la confianza que tienes con mi hermano — dice refunfuñando.

—¿Por qué?, él y yo nos llevamos muy bien — le respondo.

—Simplemente no me gusta, mantente alejada de él — me dice él.

—No eres quien para decirme que me aleje de Benjamín, yo quiero a Benjamín y voy a seguir siendo su amiga, te guste o no — le digo

—Haz lo que quieras, con tal que después no me vengas a decir que estas embarazada y que es obra del espíritu santo—dice Christian y sus palabras están cargadas de odio.

Una firma y un papelDonde viven las historias. Descúbrelo ahora