Capítulo 29 Los Hombres Murciélago

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Alysa POV

Durante los días que siguieron después de dejar que Nevra bebiera mi sangre, estuve manteniendo ciertas distancias con él. No es que estuviera enojada ni nada parecido, pero quería darle tiempo a Nevra para que dejara de sentirse mal por lo que pasó, para que entendiera que no estuvo mal lo que hicimos y que no dudara en volverme a decir cuando necesitaba alimentarse otra vez.

Tal vez estaba pidiendo demasiado.

De cualquier manera, una vez Nevra hablara conmigo al respecto, diciéndome todo eso que esperaba me dijera. Nos recompensaría a ambos con un rato de delicioso e increíble sexo.

-¿Me sigue observando? -Le pregunté a Karenn al tiempo en que arremetía contra ella con una daga de punta roma.

-Sí, lo hace -Karenn esquivo fácilmente mi golpe y blandió su Bō contra mí consiguiendo darme un golpe certero en la parte lateral de mi muslo. Estoy segura de que me va a dejar un horrible morado. -¿Se pelearon?

-No realmente. Solo le estoy dando algo de espacio para decidir sobre ciertas cosas -Aproveche la momentánea desconcentración de Karenn para tomar su Bō, halarlo hacia mí y por consiguiente a ella también, levantar mi codo y golpear a Karenn en todo el rostro.

Solté el Bō y la vampiresa retrocedió escupiendo sangre a un lado de la colchoneta.

-Creo que ya no me parece tan malo tu palo de madera -Le sonreí pretenciosa por el golpe que había logrado acertarle.

-Odio cuando lo llamas así, me haces parecer una matona del bajo mundo -Karenn se volvió hacia mí sonriendo como si tramara algo, cosa que sabía era así, y antes de que pudiera decir o hacer algo la vampiresa corrió hacia mí, uso el Bō de impulso para levantarse del suelo y me acertó una patada en todo el centro de mi estómago. Caí de rodillas sobre la colchoneta sintiendo todo el aire escapar de mi cuerpo. Terminé yéndome hacía atrás para sentarme e intentar normalizar mi respiración -Creo que ya no te está gustando mucho mi palo de madera ¿verdad?

-¿Entonces si aceptas que es un simple palo? -Karenn me miró mal y antes de poder responderme al respecto. Dos personas que conocía perfectamente se habían acercado a nosotras.

-¿Alguna de las dos entiende que esto es solo un entrenamiento? -Nevra nos estaba mirando molesto a ambas. Creo que no le gustó que lleváramos la pelea un poco más lejos de la usual. Era la primera vez que nos hacíamos daño realmente.

Sorprendentemente, tanto Karenn como yo, habíamos disfrutado de ese combate. La sonrisa de satisfacción en su rostro no dejaba lugar a dudas sobre ello. Yo también había sentido la excitación de dejarme llevar de esa manera, de sentir como hubieran sido las cosas en un combate algo más real. No un simple entrenamiento.

-Nevra tiene razón -Valkyon también parecía algo molesto, pero sobre todo creo que estaba más bien impresionado por lo que habíamos hecho. -Deben de ser más cuidadosas, pudieron lastimarse seriamente

-Están exagerando las cosas -Dije y de inmediato sentí la mirada de mi compañero sobre mí. -Solo nos dejamos llevar un poco

Nevra se acercó a mí y sin decir nada. Me tomó por debajo de las axilas y me levantó del suelo. Sus manos bajaron un poco hasta mi cintura. Sabía que estaba asegurándose de que me podía mantener en pie sola antes de soltarme.

-¿Y si le hubieras roto la nariz a Karenn con ese golpe? ¿Y si Karenn no hubiera controlado su fuerza y te hubiera dado un golpe más duro del que tu cuerpo pudiera soportar?

Me sentí algo mal por las palabras de Nevra y de reojo vi que Karenn también. Más que enojado, Nevra se había angustiado de nos hubiéramos hecho daño mutuamente.

El Príncipe de las Sombras [Nevra Eldarya]Wo Geschichten leben. Entdecke jetzt