El Príncipe de las Sombras [Nevra Eldarya]

Capítulo 31 El Bosque de los Condenados

Alysa POV

<< ¿Siguen peleando?>>

<<Sí, han estado así desde ayer en la noche. En serio estoy planteándome tirarlos a ambos por la borda>>

<<No sé por qué esperabas algo diferente. Sabias muy bien que Karenn y Ezarel han estado fastidiándose la vida el uno al otro desde lo de la carta falsa que le envió Karenn a nuestro amigo elfo>>

<<Lo sé muy bien, pero esperaba que, dada la importancia de nuestra misión, ambos adoptarían algo de madurez y dejarían de comportarse como niños>>

<<Bueno, amor, lamento decirte que seguirás esperando en vano. Posiblemente seguirán así hasta que lleguen al Reino de las Amazonas, así que tendrás que soportarlos>>

<<No sé por qué se me hace que todo esto te está haciendo gracia>>

Estaba tan acostumbrada a los gestos de Nevra, que, aunque no podía verlo en este mismo instante, estaba cien por ciento segura de que se encontraba frunciendo el ceño. Sinceramente no podía culparlo por pensar eso, ya que sabía que él era capaz de sentir mi humor a través de nuestro vínculo.

<<Lo siento, Nevra, pero realmente suenas como un padre enojado porque sus dos hijos no paran de pelear, y dado que estos dos hijos hipotéticos son Karenn y Ezarel, la situación solo se hace cada vez más graciosa>>

<<Me alegra saber que mis desgracias te divierten>>

<<A ver, Nevra, no te hagas el ofendido, bien sabes que, si me hubieras llevado a mí en su lugar, en este momento no estarías frustrado porque la estaríamos pasando muy bien en ese barco>>

Reí al escuchar a Nevra refunfuñar molesto ante mi comentario. Él sabía que tenía razón, pero no quería dármela así que eso le molestaba.

A veces mi novio se comportaba como un niño.

<<Por qué no mejor me sigues contando sobre esa serie de la otra vez. Sigo sin entender porque la chica esta, Rachel, se enojó con Ross si se habían dado un tiempo>>

Reí por el inteligente cambio de tema de Nevra y también me sentí feliz porque estuviera tan interesado en algo que me gustaba tanto como lo era Friends. Había estado contándole sobre la serie desde el día en que se fue hacía el Reino de las Amazonas. El viaje en barco iba a ser largo y no había gran cosa que hacer hasta que llegaran, así que Nevra había tenido demasiado tiempo libre y me había pedido que le hablara sobre esa serie que ya le había mencionado en el pasado.

Yo contenta, obviamente acepté.

<< ¿Recuerdas cuando tú y yo nos dimos un tiempo para pensar en lo que queríamos antes de comenzar a salir oficialmente?>>

<<Lo recuerdo, aunque tengo que aclarar que yo sabía exactamente lo que quería en ese momento y te lo había dicho, eras tú quien no se atrevía a decirme que querías lo mismo que yo>>

Nevra se rio al sentir mi molestia a través del vínculo. Al igual que él, yo también me comportaba como una niña a veces y odiaba tener que darle la razón, aunque la tuviera, sobre todo en ese asunto en particular. Me sentía bastante estúpida cada vez que rememoraba ese momento en específico. Me había privado a mí misma de ser feliz junto al hombre que amaba, solo porque tenía miedo de decir lo que ahora salía tan fácilmente de mis labios.

Antes nunca hubiera pensado lo fácil que es decir te amo, ni siquiera había podido decírselo a Damien, no solo porque no sentía eso hacia a él, sino porque la idea me aterraba, pero ahora, esas dos palabras luchaban constantemente por salir de mi boca cuando estaba con Nevra. Deseaba que él siempre supiera que lo amaba, que nada en el mundo haría cambiar ese sentimiento.