Capítulo 42

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Nota de la autora: Chiquitites, cómo están? Espero que bien :) solamente quería recordarles que también tengo un fanfic omegaverse de pintor nocturno que va en el capítulo 9 y una historia original titulada MATELOTAGE, por si les gustaría leer más de mi trabajo. 

Disfruten!!

- Arattae

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Las manos esqueléticas de aquél hombre se extendieron hacia él, tomando entre sus dedos la hoja de papel que el pequeño le ofrecía entusiasmado.

-- Ohhhhhhh, es un buen dibujo pequeño. Lo colgaré en mi refrigerador para mirarlo todos los días -- Sonrió -- ¿Ya has salido al descanso? ¿Qué te parece si vamos a aquél lugar del que te conté? Podrás llevar todos los panes de frijol dulce que quieras.

-- ¡Yaaay! Ajusshi, ¿Puedo llevar para mi papá y para el señor Yang también? 

-- ¡Por supuesto! Pero tenemos que apresurarnos -- Guardando la hoja de papel en su bolsillo, tomó al niño del torso, por debajo de las axilas --  De esa manera podrás regresar a tiempo para cuando haya acabado tu descanso.

-- ¡Bien! ¡Vamos!

El hombre lo cargó para transportarlo al otro lado de la cerca del prescolar, y tomándolo de la mano, comenzaron a caminar apresuradamente hacia la densa arboleda que rodeaba las casitas aledañas. 

-- ¡HEY! ¡TÚ! ¿QUÉ HACES CON ESE NIÑO?

De la nada, el sonoro rugir de una voz masculina timbró en los alrededores, seguido del crujir de las ramas bajo las prestas pisadas de un individuo que se acercaba a ambos. El hombre de famélicas manos se sacudió, y virando su semblante hacia el origen de aquél grito, emprendió una desesperada huida, dejando al infante rezagado tras de sí. Pero su reacción fue acompañada de tal torpeza, que terminó cayendo en bruces tropezándose con sus propios zapatos. 

De inmediato, quien había alertado al sujeto, se abalanzó contra él, forcejeando con ambas manos para evitar que el susodicho intentara levantarse nuevamente. 

-- ¡Profesooooooooooor! Aquí hay dos señores peleandoooooooooo

La voz era de una niña que se asomaba desde la esquina del prescolar, acompañada de un par de pequeños más. Todos atraídos por el ruido del alboroto. El grupito miraba, con cara de espanto la escena, mientras el individuo sometía al hombre que pretendía llevarse a Jungwoo. Éste último, sin saber qué hacer, había caído de sentón y ahora miraba, en completa confusión. 

No pasaron ni diez segundos cuando el joven profesor, habiendo llegado al lugar, cargaba en sus brazos al perplejo Jungwoo y dirigía a los niños hacia el interior del prescolar, llamando al mismo tiempo, con el teléfono entre su hombro derecho y su oreja, al número de emergencias...


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Min Ji Hyun tenía razón. Esa foto que le había mandado al correo podría estar en la constancia de liberación de servicio militar de alguien llamado Choi Hanwon, pero no podía ser otra persona más que Oh Sangwoo. Tenía que ser él. Era inconfundible. Tenía memorizada su cara desde antes que su caso le fuese asignado a él. Desde antes de sus roces con el oficial Min y el oficial Kang. Era imposible que sus ojos le mintieran.

"Y que me parta un rayo ahora si lo que pienso no es verdad" Pensaba, mientras abría la puerta de la casita de madera, y se quitaba los zapatos en el recibidor.

-- Llegaste pronto...

La suave voz de Bum le endulzó los oídos. 

-- Sí, el pueblo es muy tranquilo a esta hora -- Respondió, sonriente, tras calzarse las pantuflas e incorporarse para ver al omega, cuya esbelta figura apareció bajando por las escaleras.

KILLING STALKING OMEGAVERSE FICTIONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora