TU MI LUNA

PUSE MI VIDA EN RIESGO POR TI

Sasuke poco a poco empezó a abrir los ojos, asustandose al verse en un lugar desconocido. Luego recuerdos de como fue arrebatado de los brazos de su mamá y llevado ante un anciano gordo y feo, lo hizo pararse de golpe de la cama y correr sin mirar atrás.

Ante el movimiento, Naruto se despertó y al ver al pequeño correr, no dudo en pararse de un salto de la cama eh ir tras él.

-¡Sasuke, espera! - fue lo único que pudo pronunciar, al ver hacia donde iba el azabache. -¡Espera por favor, no vayas por ahí! - suplico, algo que por más que grito, no fue escuchado.

Pero al ver que Sasuke entró a la mansión, de inmediato sus pies se detuvieron y su cuerpo se negó a obedecer la orden de seguir adelante.

Por lo que sólo se mordió el labio inferior y miro hacia el suelo, sintiendo como sus ojos se humedecian.

Él nunca se consideró alguien amable, toda su vida fue tratado como basura, así que el pensar en él mismo, era lo único que podía hacer y nadie podía culparlo. Así que haciendo caso a su instinto de supervivencia, empezó a retroceder, mientras su mente se lleno de recuerdos donde Kushina lo golpeaba hasta casi matarlo por haberla interrumpido cuando follaba con Minato, era algo que no quería volver a vivir. Al menos aún no cuando las cicatrices dolían como si estuvieran abiertas.

Sin saber que Sasuke sólo reaccionó al ver que no era su mamá quien estaba a su lado. Por lo que al entrar a la mansión, no dudo en gemir de miedo y llorar en busca de su progenitora o de alguien que la llevará con ella.

Pero cuando escuchó un sonido proviniendo de la sala, lo hizo caminar hacia allá. Encontrando a una leona pelirroja sobre un Omega rubio. Ambos desnudos y llenos de sudor.

Por reacción retrocedió, pero sus piernas le fallaron ante el aroma que lo aturdio y cayo de sentón al suelo. Lo que provoco que la peli roja lo viera de reojo y dejará de embestir a su Omega, quien por andar tan cachondo, no se percató de nada.

Kushina se relamio los labios al sentir aquel aroma de miedo que expulsaba el pequeño cachorro. Así que sin perder oportunidad, salió del interior de Minato y camino totalmente desnuda con su miembro aún erecto eh hinchado por la recién faena, hasta quedar frente al pequeño. Importandole poco mostrarse totalmente desnuda.

Sasuke a su corta edad nunca sintió un miedo tan horrible como ahora, por eso al tener a esa mujer frente a él, bajo la mirada hacia el suelo y sin poder evitarlo, se hizo pipi del susto mientras su cuerpo temblaba sin poder evitarlo. Ya que su pequeño y nada desarrollado instinto le gritaba "peligro, peligro, peligro" una y otra vez.

-Quien mierda eres tú, y porque estas en mis dominios, asqueroso enano - pronunció asqueada Kushina al ver como su hermoso piso había un charco de pipi y el aroma a miedo ya la estaba sacando de sus cabales, ya que este se mezclaba con el aroma a sexo.

Sasuke no pudo contestar, sólo lloro más fuerte, lo que provocó que su aroma se amargara. Pidiendo entre gimoteos que su mamá fuera por él y lo acobijara en sus brazos y le diera protección.

--¡Cállate! -- pero la paciencia de Kushina llegó a su límite, por lo que sujeto al pequeño de los cabellos y lo jaloneo con fuerza.

Aquello asustó tanto a Sasuke que sólo pudo agarrar con sus pequeñas manitas, la mano de aquella Alfa que lo estaba lastimando. Hasta que una melena color rubio le llegó al pensamiento.

--¡Narutoooo! -- su grito fue tan fuerte que detuvo por unos segundos a Kushina.

Quien se relamio los labios de manera sádica eh intentando escuchar más ruegos, empezó a abofetear el rostro de Sasuke.

--¡Naruto, Naruto, Narutoooo! -- el pequeño a pesar del dolor, no dudo en seguir llamando al rubio. Esperando que este lo salvará como el día anterior.

--¿Crees que va a venir? Él mejor que nadie sabe que pasaría si lo hace -- sus palabras calaron tan hondo en Sasuke, que este dejo de gritar y sólo pudo bajar la mirada mientras lágrimas gruesas de dolor y miedo escurrian por sus mejillas. --Asi está mejor --. Cuando Kushina estaba por rebanarle la garganta, fue mordida tan fuerte en el brazo, que por inercia soltó al menor.

--¡Déjalo por favor mamá! -- Naruto había llegado a rescatar a Sasuke, quien al verse libre, corrió a sus brazos y este lo acobijo.

Mientras que Kushina estaba en shock al ver que su bastardo se le reveló de aquella manera y no por intentar sobrevivir, sino intentando salvar a alguien más.

--Parece que olvidaste que pasa cuando entras aquí -- la voz de Kushina fue tan penetrante y fría, qué hizo que el poco valor que el rubio habia reunido para enfrentarla, se fuera a la basura.

--P-Por f-favor mamá -- suplico con voz entrecortada al sentir como la Alfa caminaba hacia él con sed de sangre.

--¿Rogando Naruto? -- ni bien pregunto eso, agarró el cabello de su hijo y lo alzó con fuerza. Logrando que este soltara a Sasuke, quien para ese momento estaba llorando más fuerte en el piso. --Sabes que pienso de los débiles y patéticos que ruegan por piedad -- y sin lástima alguna le dio un zarpazo a la mejilla derecha de su hijo, sonriendo al ver que este se tragó un quejido de dolor. --Tan débil, patético, miserable, cobarde -- todo eso lo susurro en el oído de Naruto, logrando que este le diera un golpe en la mejilla en respuesta de aquellas palabras. Pero que aún así, Kushina no lo soltó.

--¡No importa lo que hagas conmigo, pero a Sasuke no lo tocaras! -- sus palabras lograron que su mamá lo aventara al suelo con rudesa y lo pateara hasta que el cuerpo del rubio choco con una pared. Sacándole a Naruto un quejido de dolor.

Sasuke corrió a abrazar a Naruto, quien lo acobijo en sus brazos en un intento de protegerlo. Pero su mirada no dejaba de ver a su madre, mientras está estaba sonriendo de una manera escalofriante.

--¿Piensas dar tu vida a cambio de la de esta basura? -- pregunto refiriéndose a Sasuke, quien sólo se escondía en el cuello del rubio y lloraba más fuerte. Al ver que su hijo se levantó y colocó a Sasuke detrás de él de nuevo, supo como sería lo demás.

Así que sin aviso alguno, le propinó otro zarpazo a Naruto, pero esta vez en la mejilla buena. Dejándole a su hijo la cara escurriendo de sangre.

-- No es de nuestro clan, es basura, así como tú -- Naruto no dijo nada al escuchar eso, sólo miro hacia donde estaba Minato. En un intento mudo de pedirle ayuda, pero este sólo desvió el rostro a un lado.

"Como siempre" pensó con dolor el rubio al ver que si su mamá lo mataba, su "madre" no haría nada para evitarlo.

Cuando Kushina vio que Naruto abrazo a Sasuke y siguió con la idea de protegerlo aún sobre su propia vida, sonrió mientras se relamia los labios.

--Solo los cobardes se echan para atrás en su palabra, Naruto -- cuando él rubio alzó la mirada, su madre estaba caminando lejos de ellos. --Recuerda esto Naruto -- al ver que su bastardo le puso atención, vio a Sasuke -- ser débil, te lleva a perder lo que más te importa. Y esas cicatrices que te quedarán, serán el recordatorio de ello --.

Naruto al ver que su madre ya no lo iba a lastimar, camino hasta ella y le sujeto la mano de manera suave.

--¿Sasuke puede quedarse? --. Kushina se rió tan fuerte que hizo que Minato se asustara porque hace mucho no la veía así.

-- Lo que quieras hacer con él, es tu problema -- dijo al jalar su mano y girarse -- aunque si yo fuera tú, lo mantendría muy bien cuidado. Si otros leones lo ven, no dudo que quieran destrozarlo, y no de la manera sádica -- susurró, viendo que su hijo entendió a que se refería.

Por eso Naruto no dudo en cargar a Sasuke y salir de la mansión. Dejando en el camino, sangre.

--Me pregunto si este mocoso será tu perdición o tu salvación, querido Naruto --. Cuando Minato escuchó eso, se acercó a Kushina para saber a qué se refería, pero retrocedió del miedo al ver que la Alfa tenía los ojos de un color rojo y sus colmillos crecieron más.

El mejor que nadie sabía que era peligroso acercarse a la pelirroja en ese estado.
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