"DESCONOCIDOS" DAMIRAE

Capítulo 16

—No crees que Jason deba saberlo- pronunció Damian.
—Después de todo lo que ha pasado, por supuesto que no- dijo tomando a su bebé.
—¿Cómo se llama?
—Tom...- dijo con indiferencia hacia Damian, el bebé comenzó a llorar despertando a Raven.
—Tiene hambre, iré a darle de comer- dijo Rose marchándose.

—Aún no ha llegado Shiva y Slade?- preguntó Raven preocupada por la demora.
—No, pero no creo les haya pasado algo, de lo contrario, nos hubieran encontrado- recalcó.
—Damian...podemos hablar- susurró.
—...- el sólo giró hacia sí dirección.
—Perdón, solo quería saber cómo se encontraba Alfred y...
—El está bien- interrumpió-.Gracias a él estoy aquí- dijo sorprendiendo a Rachel.
—Siempre ha sido una buena persona- intentó no llorar al recordar lo sucedido, Damian podía sentir el dolor que emanaba pero no dijo nada, después de todo y las noches que había pasado con ella, le había pasado ese sentimiento de empátia que en ella era muy fuerte, sintió como su cuerpo se acercaba a donde estaba, odiaba sentir compasión en ese momento pero era inevitable siendo ella quien lo necesitaba, se escuchó la puerta abrirse y recobró su postura.
—¿Donde estaban?- pregunto el esmeralda.
—Wally West fue visto por uno de mis contactos en Los Ángeles - dijo Shiva.
—Entonces vamos por ese imbécil-dijo Damian.
—Podemos ir Slade y yo, mientras, ustedes muévanse para que no los encuentren, es mejor que estemos separados- mencionó Shiva volteándo a ver a Slade.
—¿Estas segura?- dijo Raven.
—Claro que sí pequeña bruja, Slade y yo nos arreglaremos de cómo atraparlo.
—Pero.., el es veloz.
—La Batifamilia no es la única que tiene artimañas- volteó a ver a Damian, Slade.
—Como sea, tomen esto- dijo Damian dándoles una jeringa. -Dura poco, pero es eficaz, una vez lo pobre con Barry.
—Les avisaremos cuando lo atrapemos y puedan dirigirse hacia allá- dijo Lady Shyva alistandosé para pronto desaparecer junto con Slade.

Hubo un silencio incómodo, no podían mirarse a los ojos, pero al mismo tiempo de lanzaban miradas, indudablemente sentían esa atracción de sus cuerpos que era opacada por dolorosos sentimientos.
—Tom es muy inquieto- Rose interrumpió el ambiente tenue que se sentía. Raven sonrió, eran de esos momentos que sentía felicidad de ver a su amiga en su etapa de mamá, aunque le preocupa mucho el bienestar de ambos, lo había pensado mucho, no quería que nuevamente pasará algo malo.
—Rose yo quiero que te quedes aquí, pondré un hechizo de protección para que nadie los toque.
—¿Qué?, no, yo lucharé contigo Raven, haremos justicia juntas- exigió.
—Escucha, yo..., me hará sentir más tranquila si ambos están bien, te prometo que te tendré al tanto, por favor, te lo pido- hizo un gesto que partió a Rose, su amiga ya no tenía el brillo de antes, ni si quiera cuando Wally le había hecho tanto daño se había visto así.
—Bien, pero si las cosas se ponen mal, por favor, llámame. -La tomó de los brazos suavemente, Damian se limitó a mirar en un costado, pero escuchando atentamente, por alguna razón el afecto que sentía Nightwing por él, la relacionó con aquella escena cuando nadie creía en él, trago saliva, no quiso pensar más, ¿porqué cada vez se sentía más culpable?, ese sentimiento lo inundaba cada que sentía a Rachel cerca.

Después de unas horas, Raven decidió que lo preferible era moverse ahora, Damian estuvo de acuerdo, la demonesa aprovechó para tomar un baño, pues no sabían realmente a dónde pararían, Rose se acercó a Damian quien minuciosamente llevaba su Katana a un costado.

—Espero que tus intenciones sean realmente ayudarla, porque si no, yo te mataré.
—Yo solo quiero saber la verdad- dijo sin prestarle atención.
—¿Y luego qué?-se cruzó de brazos.
-Yo sé que Raven es inocente, y cuando quede demostrado, ¿qué se supone que harás?, ¿le pedirás que vuelvan?.
La atención se hizo presente, Damian no dijo nada, eran pocas veces en las que él no sabía que decir, pero algo que no quería pensar, ahora lo estaba carcomiendo.
—Lo suponía, ni siquiera sabes, pero te diré una cosa, si queda o no demostrado que Raven es inocente, yo seguiré  con ella, y si tu tratas de entregarla, no lo permitiré.
Ya le has hecho mucho daño- eso retumbó en Damian. -Yo no pude estar  con ella en los primeros meses cuando sucedió lo de Alfred, ¿al menos puedes imaginarte lo que pasó?- su voz se entrecortó. -Se que estarán juntos por este momento, así que más te vale que la cuides- cargó a su bebé que quería leche materna.
—Lo haré- pronunció retirándose. Rose lo vio con reselo, pero pese a todo sabía que su presencia le había dado un poco de vida a su amiga, quien minutos después la despidió junto con su bebé, vio como Damian y ella se iban, pero tampoco se quedaría sin hacer nada, así tomó su computador para comunicarse con su padre.

....
Las aves arribaron en una montaña, Damian pago una cabaña para que pudieran quedarse, durante varias horas se puso a entrenar para saciar sus pensamientos, Raven descansa y meditaba aunque no sé concentraba en lo absoluto teniendo cerca a la que una vez fue su novio. Llegó la noche, la luna apareció y las estrellas brillaban en todo su esplendor, una hermosa vista que la demonesa lo miró con fervor.
Raven se dirigió hacia la única habitación, no había nadie, volteó la mirada hacia el pequeño sofá donde se encontraba Damian, colgaban sus pies, y su cabeza estaba en una mala posición, se acercó lentamente, tocó su cabeza para posicionarla mejor.
Hizo lo que pudo, pero no pudo alejar los dedos de su piel, pues suavemente rosarón sus labios del ojiverde y los bajo hasta su cuello.
—Damian...-soltó unas lágrimas en silenció, cerró los ojos por un momento, y cuando los abrió unos ojos esmeralda la miraban profundamente.