Capítulo 9

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Días después.
—¿Entonces irás?, ahí estará Damian- mencionó guiñándole el ojo.
—Rose no voy por él, es para que pueda aprender a pelear y controlar mis poderes- dijo sonrojada, ya no era necesario negarle lo de Damian pues ella se lo había contado la vez que se habían embriagado.
—Como digas, y que bueno que vas, porque la última vez que fui había una chica llamada Maya que se le acercaba mucho a Damian- al instante ella volteo ¿otra mujer?, no se lo había dicho Damian la última vez que se vieron, que por cierto ese día la convenció para que entrenará y disimularan que no se conocían haciendo que sus entrenamientos no fueran sospechosos.
—¿Vive con ellos?- preguntó.
—Desafortunadamente sí, la verdad es que parece ser una buena persona o eso aparenta.
—¿A que te refieres?- preguntó dudosa.
—No losé Rachel, su mirada, su comportamiento, yo conozco a ese tipo de personas, ella trae algo raro.... jaja, de seguro estoy loca, no por nada soy la hija de Slade- rió.
—Bueno, no puedo decir nada hasta que la conozca- dijo, ambas chicas se levantaron y fueron directo hacia la mansión donde seria el entrenamiento.
Las chicas fueron recibidas con brazos abiertos por parte de Alfred y después las llevo a la sala de entrenamiento donde se encontraban todos.
Rachel no se explicó el porque sus manos sudaban tanto, sentía arder su cuerpo, ¿será por aquella mujer?, ¿porqué Damian no me lo dijo?, "Demonios, Porqué estoy tan enojada" cuando entraron vieron a dos personas peleando, Tim y Maya, la chica se movía ágilmente, era morena, alta, con cabello largo y castaño, era sin lugar a dudas muy hermosa, Rachel buscó a Damian con la mirada pero este ya la tenía en ella mirándola fijamente con tanto deseo en su interior, pero ella volteo indiferente a lo que el le inquieto su comportamiento.
Los contrincantes pararon al ver a las dos chicas, Rose había ido con Jason dejando a Rachel en la puerta, la mujer se acercó a ella, "Tu debes ser Raven, ¿cierto?, que hermosa eres" dijo estrechándole la mano, ella aceptó y con el contacto de ambas pieles sintió una energía extraña en ella, pero decidió no hacerle caso, y sonreírle.
—Que bueno que te unes Raven, ¿quieres pelear? - dijo Tim.
—No, primero tiene que controlar sus poderes- expresó Damian, Rachel seguía igual de indiferente, el lo notó al instante.
—Si, sera mejor que primero los vea y luego me una- dijo.
—Esta bien- dijo Tim- Maya ¿ahora con quien quieres entrenar?
—Por supuesto que con Dami- se acercó a él. —No, se supone estábamos en parejas para esto, ¿no?
—Si, pero Jason ya es con Rose.
—Pues queda Rachel, no importa si no entrena puedo hacerlo sólo- dijo apartándose de ella causándole enojo.
Rachel siguió parada allí intentando no observar como Maya coqueteaba con él, así que les dijo a sus compañeros que saldría al jardín para meditar, salió para buscar un lugar tranquilo, en la ventana yacía un enorme árbol, le pareció perfecto y fue allí para comenzar su meditación.
Pero antes que pudiera sentarse unos brazos la atraparon por la cintura haciendo que ella volteara al instante, no pudo articular palabra pues sus labios habían sido atrapados por otros, en un beso que hizo que jadeara, -Damian, ya basta- dijo apartandolo.
—Aqui nadie nos verá, ni las cámaras- dijo.
—Eso no me importa, no hagas eso, alguien puede venir- dijo isterica. -¿Qué quieres?- dijo volteando hacía el árbol, el notó un poco de enojo en su voz, al principio pensó que era porque estaban con los demás, pero en ese momento estaban solos.
—¿Ocurre algo?- dijo.
—No- contesto rápido- ¿No deberías estar entrenando?- mencionó sentándose.
—Tu eres mi compañera Rachel, deberíamos de entrenar juntos,
—No gracias, ya se los había dicho, primero controlare mis poderes a base de la meditación, aparte Maya ya te había dicho ¿No?, deberías ir con ella- dijo sin percatarse del gesto que había puesto al decir lo último.
—¿Acaso estás celosa?- dijo riendo.
—!¿Qué?!, Claro que no, de todas formas tu y yo no somos nada- dijo ya avergonzada.
—Aún- susurro el acercándose.
—Damian porfavor- dijo en voz baja.
—Rachel sabes que tú eres la única mujer que quiero- mencionó muy cerca de sus labios, la tomó por la mandíbula y la beso suavemente.
—¿Porqué no me contaste de ella?- el se acomodó para sentarse y quedar en frente de ella.
—Honestamente no le tome importancia, no pensé que fuera necesario, pero bueno, la conocí cuando estaba en Nanda Parbat pero por muy poco tiempo ya que llegué aquí, y bueno después mi padre la trajo a la mansión- dijo comprendiendo el enojo de Rachel.
—No era necesario que me dijeras- susurro intentando meditar, pero el interrumpió tocándole las manos.
—La única que deseo es a ti- susurro en sus labios.
—Damian nos pueden ver- dijo sin despegarse de él.
—No me importa, si alguno ve, tendré que amenazarlo- mencionó tranquilo, ella no dijo nada, pues el chico era bastante necio como para seguirle, "¿No te a buscado el idiota de Wally?" dijo, "Hace unos días fue al departamento de Rose, se puso como loco, o eso me dijeron, desde entonces no le permiten la entrada" dijo algo asustada, y es que la verdad desde es día sentía un mal presentimiento, pero no quiso decirle al joven maravilla
—¿Quieres meditar conmigo?- dijo cambiando de tema. -No es mi estilo, prefiero observar.
—Sabes que no podré concentrarme, teniendote aquí.
—Esta bien, ¿que tengo que hacer?- preguntó.
—Solo cierra tus ojos y ponte en una posición cómoda- mencionó Rachel viendo como esté le hacía caso, "De verdad no sé irá" pensó, aunque honestamente su compañía no le desagradaba en lo absoluto, pasaron varios minutos, el chico logró relajarse por ese momento impresionadose porque jamás pensó que la meditación provocará algo así, incluso no le importo el tiempo que estuvieran así, sintió sus músculos relajarse, y su cuerpo en estado de equilibrio, pero la adrenalina subió cuando sintió dos manos en su rostro, y después unos suaves labios besándolo, el los abrió para admirar la belleza de su compañera quien se movía suavemente de un lado a otro, el llevo sus manos a su cintura y la atrajo hacia él cayendo ambos en el pasto. El aumento la intensidad del beso, "Espera no querrás que hagamos algo más aquí- dijo Rachel. —Pero si tú me besaste.
—¿Eh?, Eso no significa que nos vayamos a hacer algo en tu jardín- mencionó avergonzada.
—La verdad no había pensado en eso- dijo burlón sentándose sin soltarla.
—Pensé que solo te estabas haciendo al meditar.
—La verdad es que funciona- dijo, ambos nuevamente se miraron, conocían tan bien sus gestos que adivinaban el deseo del otro, la atracción, y el amor que iba creciendo cada día en su corazón, desafortunadamente la única manera de demostrarlo en ese momento era a escondidas, pero el deseaba declararla suya frente a su familia, y ella con miedo aún, se preguntaba cómo sería una vida a lado de Damian Wayne, sus pensamientos se cortaron cuando nuevamente sus labios se juntaron y saciar un poco del sentir del otro, mientras eran observados por una morena de cabello negro quién hizo un gesto de malicia.

"DESCONOCIDOS" DAMIRAEWhere stories live. Discover now