Capítulo 19

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Después de tantas penurias y falsedades contra ella, podía descansar y dormir sin dolor o pesadillas que la acechaban cada noche, Damian la miraba tiernamente, gesto que solo ella tenía por parte del ojiverde, le acarició el cabello y se acostó junto a ella en la cama donde tiempo atrás habían hecho el amor, cuando todo parecía ir relativamente bien.

Durante el descanso de Raven, él llamó a Alfred para hacerle saber la verdad con algo de dolor y mucho enojó, pero el hombre que para él era como un abuelo le informó que Batman ya lo tenía al tanto de todo, y ahora estaban en busca de Maya, quien se encontraba fugitiva, Damian colgó, no quería otra cosa después de eso, claro que quería venganza, pero ahora su querida Rachel lo necesitaba a su lado, y por supuesto jamás se alejaría de ella desde entonces, el remordimiento y culpa era algo en lo que no quería pensar, pero todo lo que imaginaba de que pudo haber sufrido la demonesa hacia que sus ojos no evitarán lagrimear, el pequeño de los Wayne agachó la cabeza, ¿será que algún día lo perdone Raven?

Una mano cálida paso en su cachete, los ojos violetas estaban clavados en él con un aura de tranquilidad.

—Raven yo...
—No es necesario, sé que era imposible que siguieras conmigo después de lo sucedido, pero ahora, quiero decirte que lucharé por tu amor...-Damian abrió los ojos ante tal confesiones y su corazón latió más de lo normal, tomó sus manos y las beso.
—No es necesario Raven, yo siempre te he amado- la besó.

—Damian se fue con Raven, creo estarán bien- dijo Slade en la radio a Rose -será mejor que regreses la ciudad, tengo un departamento puedes quedarte allí.
—Gracias por todo papá- dijo la hija, tranquila de que ya las cosas estaban arreglandosé. -¿Regresarás hoy?
—No, al parecer Shiva aún tiene planes, y su nombre es Maya.
—No creó que sea mucho eso de tu incumbencia padre.
—...
—No me digas que mi padre se ha enamorado?- dijo burlesca.
—No digas tonterías- contestó irritado Slade, colgando el teléfono.
—Como siempre evitando las cosas Wilson.
—Por fin descansaremos tranquilos hijo- acarició el rostro de su bebé, miró sus ojos azules parecidos a los de su padre.
—Jason...- susurró.
"¿Qué estarás haciendo?

—Esta es la tercera que rompes, ¿qué te sucede Jason?- dijo Dick tratando de tranquilizar a su hermano, él solo seguía golpeándolo el saco de box. No sólo había sido Damian el que sentía culpa, sino, también a él, honestamente ambos eran los más orgullosos de todos los hermanos, y siempre recurrían a la violencia como método de coraje, él había buscado a Rose enojado, pero jamás la encontró, con el tiempo el enojo se apaciguó con preocupación, pero tenía pistas, si Raven se encontraba con Deathstroke había la posibilidad de que estuviera con ellos, pero...¿con qué cara iría a pedirle disculpas?, el sufría internamente.

Se acostó sin poder conciliar el sueño, su teléfono sonó, apretó los ojos y tomó su celular.
—¿Sí?
—Jason.
—¿Damian?- abrió lo ojos.
—¿Raven esta contigo?- preguntó curioso.
—Ya sé lo que quieres saber, ella no está aquí.
—Necesito hablar con Raven- dijo impaciente, era obvio que sabían.
—Ella no quiere hablar contigo, pero..., es necesario que veas a Rose.
—¿Qué?, ¿le paso algo?
—No, apunta la dirección, esta cerca, esto no lo hago por ti Jason, Raven dice que es necesario, al final Rose y tú tienen que hablar.

Jason trago saliva, sé paro sin ver que ya estaba por ser madrugada, salió de prisa en busca de su ex novia nervioso e inquieto subió al coche y se dirigió hacia la dirección.

—¿Aún no duermes cariño?, yo tampoco tengo sueño- dijo la peliblanca, su bebé jaló uno de sus cabellos y jugó con ellos, el timbre sonó, cambió su rostro y arqueo la ceja, pues su padre no llegaría esa noche. Dejó a su bebé en su cuna, y tomó un cuchillo de la cocina. El timbre sonó varias veces más.

—¿Quién es?- preguntó.
—...
—Será mejor que se vay...
—Soy Jason Todd, soy yo Rose.

El cuchillo cayó.

—Mmm...
—¿Raven estás segura de esto?
Dijo Damian encima de ella, los besos habían dado paso para que ambas aves cayeran en la cama y poco a poco y con cada beso las prendas fueran desprendidas quedándose en ropa interior.
Ella lo volvió a besar, rosó sus blancas manos en el torsó de su amado que gimió, sus brazos finalmente abrazaron la amplia espalda del Moreno quién entiendo la señal de proseguir lo que hace minutos deseaban hacer.
Bajo hasta los senos de su amada y los beso y recorrió con su lengua succionandolós -Ahhh- la respiración agitada y quejidos de Raven eran de las cosas que más lo volvían loco.
Siguió su camino por la parte inferior hasta llegar a sus muslos y pasar sus manos por sus piernas, el aroma que desprendía y la humedad en su entrepierna pedían ser saciadas por el miembro ya erecto de él, paso su lengua por las paredes vaginales de Raven, quien arqueó la espalda y tomó por inercia los cabellos del pelinegro.
—Ahhh, Damian...
Jadeo tapándose torpemente con una mano, pero esto hacia que Damian jugará aún más con su lengua llevándola arriba a abajo en la parte más sensible de la mujer, orgulloso por  los fluidos que su chica desprendía tomó el miembro entre sus manos, lo metió lentamente a la cavidad de Raven, ella apretó las sábanas a su alrededor, pues había pasado mucho tiempo desde la última vez, y estaba emocionada por su llegada, Damian la tomó completamente entre sus brazos y la embistió mientras besaba su cuello.

—Aaa, así...- susurró Raven en su oído entre gemidos- las estocadas cada vez fueron más salvajes. -Ahhh- gruñó Damian, mordiendo su hombro, la alzó completamente recargando su rodilla en la esquina de la cama, alzó unos centímetros a Raven y la penetro sintiendo el estremecimiento de la demonesa ante la profundidad, ambos se movían al compás, el viajo a su trasero, y ella besaba su cuello y sus hombros, sus lenguas se encontraban y jugaban excitadas.

—Raven yo...ahhh
Ella enrollo sus piernas, y mordió levemente la oreja de Damian quien se acercaba al orgasmo.
—Ahhh...- las piernas de ambos temblaron cayendo a la cama.
-Ahhg...-Raven sintió el clímax primero y por consiguiente su amado que apretó la cabecera con una última embestida profunda, dejando todo su fluido en su interior. Quedaron juntos así por unos segundos.

—Te amo

Raven sonrió.

"DESCONOCIDOS" DAMIRAEDonde viven las historias. Descúbrelo ahora