Cuando Nadie Ve

Capítulo 60: Yo Solo Te Hice Caso

Pov lauren.

Suerte. Keana dio palmaditas a mi espalda cuando estaba por salir.

Gracias. Le sonreí antes de dejar un beso en su mejilla; tenía la cafeteria a menos de una cuadra cuando escuché una voz.

Laur! Volteé con los ojos cerrados ¿por que me pasan estas cosas a mi? Lucy se acercó a mi sonriendo.

Hola..

Fui a verte y keana me dijo que ya te habías ido mi instinto me dijo que venga por esta calle. Jugó con su cabello, me sentí débil.

Ahh si..

¿A dónde vas? ¿Podemos hacer algo? Preguntó mientras caminábamos.

Voy a trabajar.

¿Conseguiste otro mas? Pregunto preocupado. ¿Todo va bien? ¿Necesitas dinero? Sabes que yo puedo darte si...

No, solo quería algo extra. Entramos a la cafetería, ahí estaba la chica del primer turno y mi nuevo jefe.

Adiós. Se despidió la joven.

Buenas tardes señor

Buenas. Contestó, Lucy se quedó a unos metros de distancia. Bien los precios estan en la carta. Me entregó una libreta. No olvides registrar todo lo que compraron, si algo falta irá a tu cuenta, yo vendré a las nueve ¿bien? Asentí. Ah y por favor. Volvió a hablar mientras miraba a lucy y a mi. Nada de compañía no necesitamos distracciones. Salió del lugar.

Wow eso fue muy intenso. La modelo expresó su estado en los ojos mientras se acercaba a mi.

Ya oíste no puedes estar acá. Le comenté antes de limpiar el mostrador. Solo clientes. Ella caminó hacia el estante de galletas y tomó una caja, luego me miró.

Sabes que puedo comprarte toda la tienda si deseas yo quiero pasar tiempo contigo. Hizo un puchero. Suspiré al hacer mi primera venta.

Lucy me ahogas. Hablé sin mirarla a los ojos. Desde que llegaste no puedo hacer nada en lo que no estés involucrada, te entiendo yo también te extraño pero no es necesario estar siempre juntas, yo tengo una vida hecha acá, tengo cosas que hacer, no te lo dije antes porque no quería ser tan dura pero. Titubié, sentía como esa pequeña parte de mi corazón se rompía. En serio me tienes harta. Se veía herida, mordió su labio y su mirada viajó por todos lados, le entregué el producto y ella lo tomó rápido.

Yo lo siento no quería molestarte solo en serio te extrañaba, te daré tu espacio. Suspiró yo no quise verla, confirmé que se había ido porque la campanilla en la puerta sonó, luego de eso mis ojos se llenaron de lágrimas sin control, me estaba haciendo daño pero si era por camila lo valía, lo bueno es que a esta hora casi nadie compra nada relacionado a postres, me pasé un largo rato pensando en lo que había hecho, quería convencerme de que esto era lo correcto pero una parte de mi quería ir por lucy y pedirle perdón; al caer el sol el lugar se llenó, fue un poco agotador pero aunque sea por un momento olvidé ese dolor en el pecho, no sabría decir si la tarde había sido lenta o rápida, solo sabía que había sobrevivido a ella y eso era lo importante ¿no?

Perfecto, te puedes ir. Me sonrió el señor con canas. Tu pago será semanal ¿estas bien con eso? Asentí. Te veo mañana entonces.

Hasta mañana. Le di una corta sonrisa y salí del lugar, no planeaba tomar taxi, caminar me haría bien, mientras cruzaba la calle sonó mi móvil

Mi amor. Escuché la voz de camila, podría jurar que hizo un puchero.

Hola amor ¿que pasa?