ENAMORADA DE UNA PRINCESA

1-Viaje

Narra Andrea

Desenrredo mi cabello amarillo observandome en el espejo, ¿quién demonios quiero ser?. Es una respuesta que algunos se la saben de memoria, mientras que yo sólo pienso que algún día espero tener un escape de todo y poder decir que quiero ser una mujer fuerte, que no le tiene miedo a las adversidades de la vida, luchar contra los fracasos, disfrutar de los buenos momentos, correr de felicidad, gritar de mucha alegría, enamorarme mucho y perder la cabeza por alguien.

A quién engaño, son solos sueños locos en mi cabeza, cierro mis ojos suspirando cansada.

-Lista señorita Andrea.- sonríe la chica encargada de vestirme y maquillarme.

-Así es Cat, vamos allá.- me ayuda a bajar las escaleras.

Llevo un enterito color rojo, tacones negros de almenos 10 centímetros y un abrigo plomo sobre este. Es algo casual adornado por joyas simples pero que valen mucho dinero.

Suspiro al ver que voy acompañada por el hijo del Duque de Dorneut, es guapo, tiene una mirada cautivadora y es muy caballeroso, se ve que lo educaron genial, pero no me siento atraída sentimentalmente por él. Es egocéntrico, muy apegado a las tradiciones y le gusta ser el centro de atención, mientras que a mi me encanta pasar desapercibida.

Tomo su brazo para entrar al gran salón, hay pero mucho glamour. Aquí básicamente es, tengo mejor gusto que tu, me queda mejor que a ti, mis joyas son más caras que las tuyas, yo brillo más que tu, es un maldito juego.

-Está bonito el infierno.- se acerca a saludarme riendo.

-Princesita Chloe.- levanto mis cejas.

-Menos mal que viniste, me hubiese vuelto loca.

Chloe de Saintius, un apellido raro igual que el de todos nosotros, es parte de la realeza, nos llevamos bastante bien, odia estos eventos tanto como yo.

-Salgamos al patio.- tomo dos copas de champán.

Nos sentamos en una banca bajo un hermoso cerezo, le paso la copa.

-Por qué hacemos salud?.- muerde su labio.

-Por la divertida noche.

-Mejor por lo guapo que se ve tu galán hoy, no te pongas celosa pero ese rostro que tiene es perfecto y esa barba que se deja.

-Si es muy guapo pero.

-Pero que joder.- me interrumpe.- Es el indicado, quédate con Adams, quizás algún día le agarres cariño y van a ser felices.

-Suena tan fácil decirlo, además que hay de ti?.- termino mi copa.

-Me sigo acostando con el hijo del mayordomo follamos genial.

-Calla.- río a carcajadas.

-Es verdad, es sexo sin amor, así que mi consejo querida Andrea es que aprendas a buscar el placer, besa a Adams y ve lo que ocurre.- da una palmada en mi hombro.- Vamos dentro que de seguro están echando de menos a las chicas más guapas de la corona.

Adams me sonríe al verme entrar, se acerca a mi tomándome de la mano, acaricia mi mejilla en forma tierna.
Lo llevo hasta la pista de baile, sale una canción romántica, bailamos pegados por un buen momento, sus manos pasean por mi cintura.

**

Abre la puerta del coche con una sonrisa plasmada en su rostro, caminamos hasta el salón de mi casa, cierro mis ojos y pienso en lo que me dijo Chloe. Lo acerco a mi hasta que nuestras narices chocan, pongo mis manos en su cuello atrayendolo más aún, de pronto sus labios hacen presión con lo míos, me dejo llevar intentando sentir algo más pero es solo un beso, profundiza introduciendo su lengua, lo alejo suavemente.

-Estoy muy cansada.- entrecierro mis ojos.

Me abraza acariciando mi espalda.

-Me gustas mucho Andrea, gracias por ese beso.

-Adios.- le depósito un casto beso y subo las escaleras.

Me lanzo sobre mi cama observando el techo, que es lo que ocurre en mi, por qué es que no lo deseo como hombre, creo que no necesito del sexo para estar bien y contenta, es solo una idiotez de adolescentes, a mis 23 años aún sigo siendo virgen y estoy de lo mejor.
En mi vida solo he besado a tres hombres, debería haber sido monja, es raro el chico que realmente me atrae, tiene que ser alguien lindo pero por dentro, que sea de buen corazón.

Escucho el sonido de mi puerta, me levanto y veo a papá, es un milagro que esté aquí en casa a estas horas, siempre está ocupado en palacio haciendo trámites con los demás.

-Andrea que bueno que estén muy bien con Adams, eso me pone muy contento y habla bien de la familia.

-Si es un chico lindo que tiene su encanto, me gusta.- hablo segura de mi misma, aunque en el fondo se que no es verdad.

-Es importante que sigan así, ya quiero tener nietos.- da una gran sonrisa.

-Papá estoy arta de oír eso, hace tiempo que te quería decir que necesito unas vacaciones, pero quiero ir yo sola, quiero ser alguien normal por un mes al menos.

-Hija no puedes hacer eso, yo me muero si algo malo te pasa.

-Casi nadie me conoce en otro país, por lo que más quieras dejame ir a otro lugar, es solo un mes.

-Puedes ir a España, Italia, Francia y Portugal, a ningún otro país, irás acompañada con guardaespaldas.

-Así van a saber quién soy, voy a ir sola siendo una chica normal.

-Debes ir con alguien Andrea.- me ordena elevando la voz.

-Bien padre, será con Catalina.- sonrío de lado, es un chica normal que siento que me va a enseñar mucho de la vida cotidiana.

-La maquilladora?.

-Si y mañana mismo me voy, te quiero papá.- beso su mejilla y cierro la puerta.

Empiezo a saltar de alegría, mi padre me acaba de autorizar para salir del país, creo que estoy alucinando y no recuerdo haber ingerido ninguna droga tampoco, sin duda es lo mejor que me ha pasado en años.

Eh dicho que viajo mañana?, joder tengo que empezar a empacar pero ahora mismo, estamos en pleno verano así que echo muchas blusas, poleras, jeans pitillos, traje de baño, short y dos chaquetas de cuero que me encantan para andar en la noche.

Mi querida España voy por ti.

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Andrea en multimedia

El primer capítulo siempre es algo aburrido pero ahora se viene lo más bueno e interesante.