16-La Fecha

512 52 17
                                    

No me puedo concentrar en la cocina, salgo al jardín a fumar un cigarrillo, levanto mi vista y veo que aún están cerradas las cortinas de la princesa, debe tener una resaca grandísima anoche estaba muy borracha.

Veo que la cocinera principal me hace una seña para que vaya, me indica que le debo servir de comer a la señora.

-Dasha, podrías ir a ver a mi hija, siempre está temprano aquí pero ya son las diez de la mañana.

-Enseguida.- le doy una cálida sonrisa.

Uf que nervios tener que mirarla a los ojos después de semejante orgasmo que me dio anoche.

Toco su puerta pero nadie abre, me tomo la libertad de girar la perilla, genial está sin seguro, me adentro en la habitación y la veo sentada en la cama con unas ojeras más grandes que ella.

Hago un estornudo falso para llamar su atención, me mira a los ojos y tapa su rostro.

-Dejame dormir.- su voz es de cansancio.

-Su madre me envió princesa.

-No me puede ver así, anoche tomé demasiado vino y champán, ayúdame por favor.

Abro las cortinas dejando que los rayos de sol iluminen su precioso rostro.

-Debe darse una ducha, yo iré por un café bien cargado y algunos jugos de fruta para que se hidrate.

-Oh eres la mejor.- se pone de pie, está con la ropa que llevaba ayer.- Dios ni pijama me puse.

Salgo de la habitación y me voy directo a la cocina dispuesta a hacer jugo, por suerte Juan trajo bastante variedad de frutas frescas.

**

La princesa se repuso bien, al menos ha podido actuar normal frente a su madre y no ha llamado la atención.
Actúa muy bien haciendo como que entre las dos no pasó absolutamente nada, ella me tocó, a pesar de que en ningún momento nos besamos casi pasó de todo entre nosotras.

Esta noche vendrá a cenar la familia Dorneut así que nos tienen vueltos locos con tanto plato, yo me encargo de hacer los vegetarianos, no es tan difícil y debo hacer postres de chocolate.

Aparece el guardia avisando que la familia completa está aquí, me quedo detrás de una estatua observando la llegada triunfal, son todos tan guapos, Adams tiene una sonrisa tan encantadora que enamora con solo mirarlo, me saca muchos suspiros, con Andrea hacen muy buena pareja, me tapo mi rostro, lo ha engañado conmigo, y pensar que yo soy una simple cocinera que solo busca hacer feliz a los demás.

Me fijo en la princesa que baja las escaleras, tiene un vestido amarillo que le llega hasta la rodilla, muero con tanta hermosura.

-Pero si ahí viene la novia.- la abraza la señora Dorneut.- Adams ya nos dio la noticia cariño.

-De que noticia me habla?.- parece no entender.

-Que tú y yo nos casamos el 16 de junio mi querida princesa.- besa su mano.

Oh joder, eso es en un mes y medio.

-Tenemos que hablar, nos disculpan.

Lo lleva de la mano a las afueras de la casa, los sigo sigilosamente hasta esconderme en la oscuridad, se ganan bajo un farol.

Él la besa intensamente hasta que ella lo empuja contra un árbol, puedo notar el enojo en sus ojos.

-Vaya humor que tienes.

-De que mierda estaba hablando tu madre?.

-Tú no me hablas así a mí.- la toma de la muñeca.

-Te hablo como se me de la gana, ahora responde, por qué nos vamos a casar.

-Anoche lo acordamos entre los dos, dijimos que sería justo un mes después de la boda de mi hermano.

-Tu hermano se casa en 15 días más, yo no aceptaría casarme tan pronto.

-Mira.- le enseña un video donde se escucha claramente que ella anuncia la boda.

-Mierda, no recuerdo nada de anoche, estaba demasiado borracha, lo último que se me viene a la cabeza es estar brindando con Chloe, ni siquiera se como llegué a mi cama.

-No sé que pasó en ese viaje pero llegaste como una loca.

-Puede que antes solo fingía ser alguien que le gustaba a todos, pero ahora bombón.- lame sus labios.- Soy la puta princesa y me vas a respetar.

-Pues me gusta más esta chica más decidida, pero tú y yo nos casamos ese día querida.- le pone el anillo en el dedo.

Wow, es un anillo precioso adornado por lo que creo es diamantes, pobre Andrea acaba de condenarse.

Narra Andrea

Juego con mis dedos observando el anillo, 16 de junio por favor no llegues nunca en la vida, como puedo ser tan pendeja para emborracharme y comprometerme a la vez, denme un tiro para que esto acabe luego, no quiero ser la señora de Dorneut quiero seguir siendo la princesa Andrea de Yourk, una mujer soltera que puede tomar sus propias decisiones que se puede cuidar sola y que es capaz de hacer todo por los suyos.

-Hagamos un brindis por mis hijos, estoy muy orgulloso de que ambos se van a casar, uno hizo mejor elección que el otro pero aún así los felicito hijos míos, espero que pronto sea abuelo.- se pone de pie levantando su copa.

-Salud padre.- sonríe mi novio.

-Tú no levantas tu copa querida? o tus padres no te enseñaron a hacer un brindis con clase.- mira a Sofía.

Joder que viejo más insoportable, como puede decirle eso, ella se pone roja como un tomate.

-Mire señor Duque, en mi casa no le va hablar así a nadie, ni mucho menos a la futura madre de sus nietos.- lo desafío con la mirada.

Mi padre abre sus ojos como platos, quieren puro matarme.

-Andrea esto no es contigo, de ti si estoy orgulloso que seas mi nuera.

-Usted no tiene respeto verdad, no entiendo como alguien con tanta clases puede ser así de cabrón.- lanzo mi servilleta enojada y me paro de la mesa.

-Andrea tiene razón padre, Sofía y yo estamos arto de todos los comentarios que haces de ella, si escucho uno más no me vuelves a ver en la vida.

-No te atreverías.

-Si que somos capaces.- apoya la muchacha a su prometido elevando la voz.

-Podemos cenar en paz.- comenta mi padre.

-Se me quitó el hambre, permiso.

Subo a mi cuarto enojada escucho que unos pasos me siguen, me giro y encuentro a mi futuro esposo afirmado en la puerta observandome, levanto mis hombros intentando saber que quiere, cierra la puerta y me toma de la cintura atrayendome a sus labios, muy enojada y todo pero lo deseo, le como la boca mientras enredo mis manos en su cabellera, me sube sobre un mueble que tengo haciendo más intenso el ambiente, le quito la camisa dejándome ver unos abdominales muy bien marcados los acaricio sin despegar nuestras bocas. Aprieta mi trasero haciendo que suelte un gemido, debrocha mi vestido dejándome en ropa interior, muerde su labio quedando muy pegado a mi.
Jamás lo he hecho con un hombre, tengo unos nervios de los cojones pero deseo hacerlo, quiero seguir.

Estamos semidesnudos sobre la cama él está arriba mío besando mi cuello con tanta delicadeza, es bastante tierno.

Aún así no paro de pensar en ella, es mi maldita pesadilla de mi día a día.

_________________________________________

Adams en multimedia

Tenemos casamiento mi gente!!

ENAMORADA DE UNA PRINCESAWhere stories live. Discover now