꧁Capítulo 5꧂

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"Viviré una vida por los tres"

Alice

A la mañana siguiente simplemente escuche la alarma de mi teléfono indicando que tenía que ir al colegio, me levante, fui al baño a darme una ducha, y ya lista baje a la cocina, sabía que mi madre estaba ahí.

—Hola mamá —la salude con un beso en la coronilla de la cabeza, ya estaba comiendo su desayuno.

—Buenos días cariño —se limpió la boca con una servilleta y se paró —Siéntate ya te sirvo el desayuno.

—Gracias —ese día si me levante temprano para comer los alimentos primordiales del día, ya que siempre me levantaba tarde, no sé porque hoy estaba emocionada.

—Aquí tienes cariño —mi madre puso enfrente de mi un plato con huevos revueltos, pan tostado y jugo de naranja, lo típico de los desayunos y si los hace tu mamá mejor.

Terminamos el desayuno en silencio, recogí los platos y los lavé, solo somos dos así que no es la gran cosa, fui a lavarme los dientes, Dylan estaba por llegar, bajé y la bocina del auto se hizo sonar.

—Mamá ya me voy —le di un beso en la mejilla, ella estaba sentada en la mesa todavía, viendo su teléfono.

—Con cuidado hija.

Salí y ahí estaba el auto de mi novio, me dirigí a él y entre, en mi nariz se impregno esa fragancia que ya conocía perfectamente, era inigualable.

—¡Hey Bella! —me dio un beso en los labios.

—¿Cómo va todo?

—Por el momento no tan bien —empezó a conducir —Mis padres aun no superan el accidente y yo menos.

—Es algo muy duro, pero verás que todo estará bien —agarre su mano que iba en la palanca de cambios y la acaricie con mi pulgar.

—Eso espero —volteo a verme con una media sonrisa en su rostro.

—Mi mamá dijo que cualquier cosa que necesitaran no dudaran en pedirlo.

—Es bueno saberlo, gracias bella.

A los minutos entramos al estacionamiento del colegio, aún no habían tocado el timbre de entrada, vimos a lo lejos a Emma que estaba sentada en una de las mesas que hay afuera y fuimos con ella.

—Emma —ella estaba leyendo un libro con una manzana en la mano, al oír mi voz levanto la cabeza.

—Hermosa —se paró y me dio un beso, volteo a ver a Dylan —Que bueno que ya estés con nosotras, se te ha extrañado.

—Sí, bueno no es que quisiera faltar —dijo rascándose la nuca.

—Siento mucho lo de tus tíos —se acercó a él para darle un abrazo y Dylan soltó unas lágrimas que se las seco al instante y se separaron.

—Ya me siento mejor, no te preocupes —suspiro.

—Bueno, entonces tú me dices cuando te paso los apuntes y tareas de las clases —Emma se acomodó la mochila en su hombro.

—Si me podrías dar tus cuadernos —contestó Dylan.

—Claro, te los iré dando —sonó el timbre para entrar a clases y empezamos a caminar.

—¿Y tú primo vendrá a estudiar aquí? —pregunto Emma por mí, la verdad también quería saber.

—Sí, creo que vendrá con mi mamá más tarde para ver lo de la inscripción y todo eso —al decir eso se vio un brillo en los ojos de Dylan, se nota que lo quiere.

Amor Surgente © ✔️Where stories live. Discover now