꧁Capítulo 11꧂

181 107 23
                                    

"Él es perfecto"

Alice

Estaba en mi propio mundo, en mi esfera de felicidad. Puedo decir que no había sentido esas sensaciones tan lindas que me hizo sentir Vidal. Mi corazón ya no latía y mis manos estaban muy sudorosas, mi estómago era un zoológico y hasta se me había olvidado como respirar.

¿Quién olvida eso? en fin.

Íbamos en el auto de Dylan, para ir al centro comercial, mientras yo voy pensando y procesando lo que acaba de pasar con Vidal, ya sé que solo fueron besos en la mejilla.

¡Pero Dios! realmente me sentí en el cielo, fue único y mágico.

Jamás he sentido esto con Dylan, no sé por qué, antes de ser novios yo lo miraba como mi hermano, mi mejor amigo. Creo que eso ha sido siempre y es la razón por la que no había experimentado estas sensaciones, lo que siento con él es amor fraternal y no me había dado cuenta hasta ahora.

Dylan fue mi primer novio, no me di el tiempo de conocer a más chicos que me gustaran, por eso siempre ha sido solo él.

Cuando llegó Vidal presentía que las cosas iban a cambiar, pero nunca pensé que de esta manera y diría que con Vidal sentí cosas muy diferentes. Siempre siento intensa felicidad al verlo, al ver su rostro, esos ojos tan brillantes como el cielo, su voz tan angelical y está de más decir que me trae loca con su perfecto aroma. Él es perfecto.

¡Joder es tan perfecto!

Vidal Stone eres tan perfecto para mí...

—¡Alice! —gritaron y reaccione.

—¡Diablos Dylan me asústate! —tenía la mano derecha en mi pecho y mi respiración se aceleró, iba muy concentrada en mis pensamientos.

—Ya llegamos desde hace un rato, pero no me hacías caso, te mirabas como si estuvieras en otro mundo —eso era verdad.

—Lo siento estaba...

«Pensando en tu perfecto primo, excelente Alicia»

Conciencia no me ayudas, ¡Silencio!

—¿Estabas? —Dylan levantó sus cejas.

—Solo pensaba, eso es todo, ¿Vamos? —nervios por favor cálmense.

—Si vamos.

Bajamos del auto de Dylan y entramos al centro comercial. No sabía a qué veníamos, si a comer o simplemente a comprar algo.

—¿Qué haremos? —pregunté, mi mano iba entrelazada con la de Dylan.

—Pensé en ir a ver una película —hizo una sonrisa mostrando sus dientes.

—¿Al cine? —por eso no quería que viniera Vidal.

—Sí, ¿Quieres?

—Claro vamos —caminamos al cine, para comprar entradas y ver la película que se estaba estrenando.

Compramos palomitas con soda y nachos con queso. Teníamos tiempo de no salir solos y hacer esto, era un poco raro.

—Bien entremos —caminamos a la entrada de la sala y dimos los boletos.

Nos sentamos en la parte de hasta arriba, ya saben dónde se sientan las parejas románticas y se besan hasta ya no poder, pero nada de eso pasó con nosotros, la verdad ni le prestaba atención a la película, solo pensaba...

Si era verdad lo que sentía, ¿Qué haría?

Me refiero a lo que siento cuando estoy con Vidal, eso es mucho más fuerte de lo que siento con Dylan.

Amor Surgente © ✔️Where stories live. Discover now