CAPITULO SETENTA Y UNO

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La Espada Legendaria







Sabiendo que estaba en la lista de blancos de Zhao Huangzhi, Wen Qinxi no pudo evitar sentirse un poco conmocionado. Sabía que era solo un juego, pero temía la idea de empezar de nuevo y su miedo al dolor intensificaba su deseo de vivir. Aunque el índice de dolor estaba en su nivel más bajo, Wen Qinxi no se tranquilizó en lo más mínimo. Tuvo que idear un plan para quitarse de encima a esa chica loca, de lo contrario tendría que soportar las consecuencias.

Lee Jienjie observó cómo la expresión de Lin Jingxie cambiaba varias veces y se dio cuenta de inmediato de lo que le molestaba. "Jin-ge, tu relación con Qie Ranzhe es ...", dijo extendiendo la mano para tocarle la mano que colgaba del costado de su muslo.

Wen Qinxi, que había estado desatento, estaba ocupado reflexionando sobre lo que decía el sistema, por lo que desconocía por completo las acciones de Lee Jienjie. Levantó la cabeza con una expresión ausente diciendo: "¿Eh?" Lee Jienjie estaba a punto de repetirse cuando Shuen, de la nada, se interpuso entre ellos obligando a Lee Jienjie a soltar la mano de Lin Jingxie.

"Disculpe", dijo pavoneándose entre ellos a pesar de que había tanta mucho espacio para que él simplemente camine alrededor de ellos. Lee Jienjie estaba extremadamente irritado al ver la figura desaparecida de un mocoso tan irrespetuoso.

"Lee Jienjie, ¿estabas diciendo?" preguntó trayéndola de vuelta a la realidad.

"Oh, estaba preguntando acerca de tu relación con Qie Ranzhe", dijo con la voz que se calmaba con cada palabra que pronunciaba. Wen Qinxi la miró con una mirada confusa que parecía preguntar '¿qué pasa con eso?'. A juzgar por su expresión, continuó diciendo: "Sé que son amigos cercanos, pero Zhao Huangzhi no estará feliz hasta que monopolice a Qie Ranzhe, por eso corrí aquí para tratar de pacificarla".

Wen Qinxi La expresión se suavizó sintiéndose extremadamente agradecida con ella. Realmente sentía que esos dos lo destrozarían si se quedaba entre ellos por más tiempo. Wen Qinxi dejó escapar una risa suave y dijo: "Gracias por eso, realmente me salvaste aunque ella no descansará hasta que yo muera", mientras frotaba nerviosamente la parte posterior de su cuello.

Esa hermosa risa hizo que Lee Jienjie se sintiera tímido con las mejillas enrojecidas. Ella realmente amaba a Lin Jingxie y realmente quería ayudarlo. A diferencia de Zhao Huangzhi, ella sabía que el amor no podía ser forzado, pero eso no le impidió soñar que su relación podría ser un poco más que esto. Esperaba que, al ayudar a Lin Jingxie, él cambiara su percepción de ella, de un pequeño meimei a una chica con la que podría pasar el resto de su vida.

"Por eso estoy aquí. Se me ocurrió una solución que puede aliviar la tensión. Sé que Qie Ranzhe es importante para ti y no puedo dejar de ser su amigo, así que se me ocurrió un plan para quitarte de encima a Zhao Huangzhi ", dijo con una mirada emocionada en su bonita cara.

Wen Qinxi inconscientemente arqueó una ceja mirándola con una mirada escéptica. ¿Qué plan podría idear para ayudarlo a sobrevivir en este mundo y, en última instancia, salvarlo de una muerte prematura? Lee Jienjie miró a su alrededor y vio algunos ojos curiosos que miraban en su dirección, lo que la hizo elegir susurrar su plan en su lugar.

Al estar tan cerca de una dama tan hermosa que emite el dulce aroma de la primavera, Wen Qinxi se tensó esperando algún tipo de estimulación como la naturaleza pretendía, pero cuando su cálido aliento rozó su oído, no sucedió nada memorable. No estaba ni una décima parte de lo molesto que estaba cuando Qie Ranzhe susurró en el suyo, lo que sucedía con demasiada frecuencia. Hubo una sensación de hormigueo al principio, pero como un fósforo golpeado, se apagó en un instante. "Eso es extraño", pensó cuando ella terminó de hablar.

Lee Jienjie se demoró un poco más después de que terminó de susurrar su plan mirando la mandíbula cincelada y la piel suave de Lin Jingxie. En secreto esperaba rozar accidentalmente su mejilla con sus labios, pero su plan fue instantáneamente empapado con agua fría. Shuen había hecho su camino de regreso obligándolos a separarse con otro descarado, "Disculpe".

Ella finalmente lo perdió gritándole, "¡Estúpido mocoso! Será mejor que aprendas algunos modales pronto, de lo contrario yo personalmente vendré. allí y darte unos buenos modales ". mientras señala con enojo a Shuen. Shuen, que había sido regañado por Lee Jienjie, no parecía arrepentido de haber elegido sacarle la lengua de manera grosera.

Enfurecida por su comportamiento infantil, se lanzó hacia adelante para darle una paliza, pero Wen Qinxi, que había estado reflexionando sobre su plan, agarró el brazo de Lee Jienjie y la apartó con la mente perdida en sus pensamientos. Sin querer, llevó a un Lee Jienjie enojado de regreso al comedor solo para presenciar un evento alucinante.

***

Con Lin Jingxie desaparecido, la atmósfera se volvió helada en un santiamén. a pesar de que era la mitad de la primavera. Qie Ranzhe no quería dejar a Lin Jingxie solo con Lee Jienjie por mucho tiempo. Quién sabía qué tipo de lavado de cerebro le haría esa seductora a Lin Jingxie. No quería estar aquí más tiempo del necesario, así que dijo "Habla" en tono impaciente.

Zhao Huangzhi estaba inicialmente complacida de finalmente tener a Qie Ranzhe para ella sola, pero al verlo con un pie en la puerta, su corazón se hundió y no pudo evitar expresar sus quejas. "Ran-ge pl-", dijo, pero rápidamente cerró la boca cuando él le lanzó una mirada feroz que envió escalofríos por su espalda. ¿Por qué amaba a un hombre que no le daba ni un segundo pensamiento? Ni siquiera ella pudo responder a esa pregunta. Todo lo que sabía era que Qie Ranzhe era su propio aliento y sin él, no tenía sentido vivir.

"Qie Ranzhe", se corrigió antes de decir, "mi padre arregló que regresara a la capital, así que me voy mañana. Vine a despedirme". Tenía una expresión triste acercándose poco a poco a Qie Ranzhe mientras se frotaba nerviosamente sus uñas perfectamente cuidadas.

Qie Ranzhe no dijo nada, solo se puso de pie para irse, pero Zhao Huangzhi rápidamente lo agarró del brazo suplicándole: "Sé que no te agrado especialmente en este momento, pero me gustas y quería dejarte algo que sé que realmente te encantará", mientras el sirviente colocó la caja de madera frente a Qie Ranzhe.

Zhao Huangzhi abrió la caja con entusiasmo para él mostrando la legendaria espada Hei An Zhi, el orgullo y la alegría de la familia Zhao. Aunque se desconocía el origen de la espada, el propietario inicial era el general Zhao, el tatarabuelo de Zhao Huangzhi apodó el Vencedor cuando conquistó reinos hasta que no quedó nada, ni siquiera ganado.

Él solo expandió el territorio de la nación conquistando a todos sus enemigos, pero incluso después de todo eso, su sed de sangre no fue apagada. Cuenta la leyenda que se convirtió en un maníaco enloquecido y sediento de sangre que perseguía a los aliados de su nación en contra de los deseos del emperador. Esto llevó a un emperador desesperado a orquestar el asesinato de su general más poderoso al hacer que el general Zhao '

La noche en que fue envenenado, se dijo que el General sintió que su muerte se acercaba y decidió llevar el Hei An Zhi a su corazón susurrándole algo. Se rumorea que la espada estuvo alojada en su cuerpo durante dos días seguidos ya que todos no pudieron sacarla hasta que de repente cayó por sí sola. Se creía entre la gente común que quienquiera que empuñara esta espada se volvería lo suficientemente poderoso como para derrocar naciones.

Esta magnífica espada fue la reliquia de la familia Zhao transmitida de generación en generación, pero debido a que la familia Zhao temía su formidable poder, se redujo a una exhibición de museo invaluable que se exhibe a los invitados cuando se organizan cenas. Ahora Zhao Huangzhi había tomado esa misma espada sin permiso y se la entregó a Qie Ranzhe, todo en nombre del amor. Qie Ranzhe era plenamente consciente de la identidad completa de la espada y, efectivamente, estaba interesado. Zhao Huangzhi vio un destello de emoción en esos ojos oscuros escalofriantes que hicieron que su corazón palpitara. Deseaba tener más armas legendarias para regalarle y ganar su amor.

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(Capitulo setenta y uno ^^ si hay algún error favor de avisarme)

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