IV: compras y problemas

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Fecha de publicación: 28/04

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Derek ingresó a la mansión junto a Peter y Scott, los tres lobos venían con la cabeza gacha y una mirada completamente perdida. Jackson fue el primero en sentirlos y oler la tristeza que desprendían.

— ¡Scotty! — grita Theo antes de correr al lobo — ¡Stiles nos contó una historia y... ¿qué te pasa? — pregunta

— Nada pequeño, solo son problemas de adultos — intenta darle una sonrisa — ¿Qué historia les contó Stiles?

— Eso no importa ahora Scott, estás triste — forma un puchero — No quiero que estés triste.

— ¿Qué tal si me das un abrazo de oso? — el niño asiente y Scott lo alza para poder abrazarlo, Stiles lo observó desde el umbral de la puerta que daba a la sala — Lo siento Stiles, no hemos encontrado nada — esconde la cabeza en el hombro de Theo

— Buscamos por todos lados, pero nada, incluso interrogamos a otras manadas — dice Peter, Liam estira sus bracitos a él y Stiles se lo pasa

— Tranquilos lobos tontos, no estoy enojado — les sonríe — Lamento lo que dije hoy Scott, realmente admiro tu bondad hacia las otras personas.

— ¿Y si mejor vamos a comer algo?, Liam tiene hambre — dice Isaac y Stiles lo ve divertido — Hablo idioma bebé.

— Si, y yo hablo chino mandarín — rueda los ojos Jackson

— Isaac, Jackson, lleven a Scott y Peter a la cocina, yo hablaré con Derek — les pide Stiles, los niños asienten y agarran la mano de los mayores para salir de ahí

Derek no es capaz de levantar la cabeza para mirar a Stiles, se siente avergonzado por no haber descubierto nada. Él le había prometido que todo volvería a la normalidad y falló en el primer intento. Frunció el ceño y apretó los puños, quería golpear algo, pero con los niños cerca no lo haría, no quería asustarlos.

Stiles sonríe enternecido ante la imagen de Derek así, nunca lo había visto tan... ¿vulnerable? ¿apenado? no encontraba una palabra adecuada para describir lo que el lobo sentía en esos momentos, pero de todas maneras le causaba ternura, y gracia.

— Sabes DerDer, no siempre tienes que ser un héroe, esta bien que no hayas conseguido pistas hoy — dice

— Pero te prometí...— es interrumpido

— Yo le prometí a mi papá no meterme en problemas cuando tenía nueve y colgué la mochila de Scott en el poste de la bandera porque me había enojado  — de la cocina se escucha un "¿qué?" del nombrado. Stiles ríe y continúa hablando. —, y sabes qué? al siguiente día me volví a meter en problemas por defender a un compañero de unos bravucones, mi papá me sacó todas mis pistolitas de agua, pero no me importó porque hice algo bueno — Derek lo mira por primera vez desde que llego, Stiles jura que las cejas del hombre lobo tenían un lenguaje propio, pero lo diría en otro momento. Con una sonrisa, toma las manos del otro y dice: — A lo que voy DerDer, es que no siempre cumplimos nuestras promesas y, que yo recuerde, tu me prometiste encontrar a la bruja, nunca me dijiste cuando lo harías.

— Pero si me tardo más los chicos quedaran así — dice

— Ellos están bien, lo estarán con nosotros, aún hay tiempo para encontrar a la culpable — dice y le suelta las manos para poder darse vuelta — Ahora ven a comer, no quiero un lobo hambriento a las tres de la tarde.

Historias de Mamá StilesWhere stories live. Discover now