Historias de Mamá Stiles

XXI: aprender a perdonar.

antes que nada quiero decirles que lean el capítulo completo, no insulten a ningún personaje por sus palabras o acciones, aunque lo merezcan.

fecha de publicación: 16/07

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Eran las ocho de la mañana cuando Stiles ya se encontraba despierto y asimilando todo lo que había pasado el día anterior. Le costaba asimilar el hecho de que era el compañero de Derek, bien, se imaginaba algo así cuando Deaton le mencionó eso, pero no quería investigar por su cuenta, él quería, necesitaba, que el alfa le contara.

Sonríe inconscientemente cuando siente unos piecitos en su espalda, gira su cabeza un poco y logra ver una de las escenas más tierna de su vida, Derek abrazado a un pequeño Liam que descansaba en su pecho mientras que Isaac dormía de manera horizontal en medio de ambos, empujando al adolescente sin darse cuenta. Su sonrisa se borró al darse cuenta que dos de sus cachorros no se encontraban en la habitación.

Se levantó de la cama con cuidado e intentó salir sin hacer mucho ruido, a veces odiaba la audición desarrollada de los lobos, más ahora que todos estaban alerta. Durante el entrenamiento del día anterior fueron todos alertados por Brett, quien había dicho que su hermana se enfrentó con una bruja por descubrirla espiando a Mason y Corey, así que ahora todos se encontraban al pendiente de cualquier cosa extraña que sucediera a su alrededor. Todos tenían la idea de atraparla para volver a sus amigos a la normalidad, o al menos eso creía, nadie se opuso a la idea de Lydia sobre que necesitaban volver ya antes de que empezaran a sospechar, incluso Peter accedió a merodear por el bosque para buscar pistas.

A Stiles le costaba un poco pensar en Peter renunciando a que los chicos se quedaran así, más porque se daba cuenta de la fuerte emoción que sentía al estar con ellos, Derek le dijo que era por haber perdido a sus sobrinos, pero él sabía que era porque se sentía arrepentido de todo el tiempo perdido con Malia, tiempo que no podrían recuperar hasta que la coyote lo acepte por completo como a un padre.

Solo esperaba tener el tiempo suficiente para poder festejar el cumpleaños del mayor de los Hale junto a los pequeños. Peter se lo merecía.

El adolescente dejó todos sus pensamientos de lado al entrar a la habitación de los cachorros y notar que estos no estaban en sus respectivas camas.

- Oh no, no, no, no - murmura antes de salir corriendo hacia el piso inferior, donde se topa con los dos niños viendo televisión junto a Malia. Suelta un suspiro aliviado para luego cruzarse de brazos y mirarlos a los tres con el ceño fruncido - ¿Por qué están aquí y no en la habitación? ¿por qué están despiertos a esta hora? y, una pregunta mejor, ¿por qué Malia está aquí y no en su curso?

- Estamos viendo tele, pops, no nos molestes - Malia suelta un sonido afirmativo ante lo dicho por el pequeño Whittemore.

- La señorita Erica nos trajo - contesta Theo, sin despegar la vista de la pantalla.

- Bien, ¿y por qué los trajo? - se posiciona al frente de la tele para que le prestaran atención, Malia le tira un cojín que logra evitar a tiempo - Malia Tate - dice en advertencia.

- Soy Hale, no Tate - lo corrige con el ceño fruncido.

- ¿Por qué siento que me estoy perdiendo de algo? - murmura sin creerse lo que acababa de escuchar.

- Porque te estás perdiendo de algo - escucha a sus espaldas - ¿No piensas venir a saludarme? - el castaño sonríe al darse vuelta y ver a la dueña de aquella voz que conoce tan bien.

- ¡Cora! - exclama - ¿Qué haces aquí? ¿cuándo llegaste? ¿por qué no avisaste que vendrías? te hubiera preparado algo.

- Lydia me llamó hace unos días, me contó todo lo que esta pasando y decidí venir. Mi vuelo aterrizó hace unas horas, tuve que tomar un taxi para venir porque no quería molestarlos, pensé que estarían ocupados buscando a la culpable de esto, pero veo que no... - Stiles sonríe avergonzado por la respuesta de la chica, ellos tendrían que buscar a la bruja en vez de estar ahí viviendo su vida tranquilamente.