𝗜𝗖𝗘 ━━ kei tsukishima

⠀⠀16. descanso

El mismo día de su regreso, mientras Leiko volvía a su casa para descansar un poco, se pasó todo el camino pensando en como podría animar a sus amigos después de conocer el resultado del partido contra Aoba Johsai. Había pensado en varias cosas, pero como estaba tan cansada no veía factible invitarlos a todos a un parque de atracciones ese mismo día. Pensó durante un rato más hasta que tuvo una idea bastante buena.

Llamó a Viktor para confirmar que podría hacer lo que tenía pensado y tras tener la aprobación del hombre, se dispuso a mandar mensajes a todos sus compañeros del club diciéndoles que debían reunirse en la esquina en la que se encontraba la tienda del entrenador Ukai, era el punto que Leiko pensó que a todos les iría mejor para ir al lugar que había pensado.

Descansó unas cuantas horas antes de salir de casa con un poco más de energía. Por el camino encontró a Sugawara, Daichi y Asahi, por lo que decidieron ir juntos al lugar que Leiko les había indicado. Los tres chicos de tercer año intentaban sonsacarle a su amiga la idea que tenía, pero no consiguieron ninguna pista ya que Leiko respondía siempre con un:

—Ya lo veréis, no seáis pesados —rio la chica consiguiendo por fin que sus tres amigos dejaran de insistir.

Al llegar a la esquina de la tienda del entrenador Ukai tal y como Leiko les había dicho, se encontraron con el resto del equipo. Sin decir mucho más, Leiko pidió a todos que empezaran a seguirla y es lo que hicieron. Estuvo gran parte del camino hablando con Kiyoko, ella le explicaba las mejores jugadas que habían hecho los chicos mientras Leiko atendía, le habría encantado verlo por ella misma.

Luego de un rato caminando, Leiko se dio cuenta que no todos estaban muy por la labor de ir al lugar que tenía pensado, por lo que tuvo que animarles.

—¡Vamos chicos! —dijo Leiko casi arrastrando a todo el equipo de voleibol.

El único que no estaba destrozado por completo por la derrota contra Seijoh era Sugawara, así que, junto a Leiko y Kiyoko, ayudó a llevar a todo el equipo al lugar que la patinadora había preparado. Caminaban desganados, sintiendo poco a poco como si sus sueños se estuvieran yendo al garete en ese mismo instante.

—¿Cuánto falta? —preguntó Sugawara mirando a Leiko. Él estaba en el fondo de la fila que se había formado por toda la acera, impidiendo que alguno de los chicos se quedaran atrás.

—¡Ya estamos! —exclamó la chica parándose frente al gimnasio—. Viktor me ha permitido no entrenar hoy, justo acabo de volver de China y estoy agotada. Pero como no he cancelado la reserva de la pista para hoy, tenemos la pista para nosotros.

Los ojos de Hinata y Nishinoya se iluminaron llenos de ilusión por poder probar el patinaje sobre hielo. Todos entraron rápidamente, un poco más animados por poder darse un pequeño descanso después de tantas emociones. Leiko les observó desde la puerta de la entrada, la mayoría estaban corriendo para llegar a la pista de patinaje lo más rápido posible. Una pequeña risa se escapó de los labios de Leiko al ver que su idea estaba funcionando.

—Kei, tu también —dijo Leiko cambiando su expresión a una más seria cuando miró al chico, quien se había quedado quieto y no parecía querer entrar. Ella cruzó sus brazos y una pequeña sonrisa socarrona se dibujó en su rostro antes de volver a hablar—. A ver si presumes tanto de tu altura cuando no puedas ni mantenerte sobre los patines.

Tsukishima chasqueó la lengua y apartó la mirada, odiaba admitirlo pero cuando Leiko se lo proponía, era capaz de intimidarle o de sacar incluso su lado más tímido. Leiko se acercó a él y Tsukishima la miró serio, intentando mantener la compostura y no caer en lo que fuera que Leiko estaba haciendo.

—¿Te puedo preguntar algo? —soltó la chica de repente.

—¿Sí...? —respondió no muy seguro de lo que iba a venir después de esa pregunta de la chica.