Hola, les advierto que esto está 🔥
Gracias por su atención.
Era una tranquila noche de sábado cómo cualquier otra, cómo cada vez que estos dos se necesitaban se reunían en el penthouse de un lujoso hotel para cumplir todos sus deseos, hasta ese momento no era nada más que sexo, eran adultos y sabían perfectamente a lo que estaban jugando pero eso no evitaba que sus sentimientos buscaran pasarles la factura, aquellos encuentros eran algo que por más que habían intentado reprimir no habían podido hacerlo, era como si sus cuerpos se pertenecieran, como si dos imanes los conectaran y sintieran la necesidad de estar juntos de vez en cuando, en el fondo ambos sabían la respuesta, pero eran muy competitivos como para aceptarlo así nada más.
Manuel: Hola Maytis -Saludó desde la terraza en la que estaba sentando disfrutando de una buena copa de whisky.
Mayte: Buenas noches Manuel -Saludó desde la puerta.
Manuel la observó cerrar la puerta del pent house y dejar su bolsa a un lado.
Manuel: Que es ese saludo? -Preguntó mientras se levantaba de donde estaba y se acercaba a ella. A mí salúdame bien -Dijo seriamente.
Mayte: Es que contigo ya no sé en qué modo llegar -Dijo mientras se cruzaba de brazos.
Manuel: Pues en el que quieras -Dijo mientras dejaba su copa en una pequeña mesa. Entre tú y yo jamás hay límites -La tomó de la cintura y la acercó a su cuerpo.
Mayte: Cuando estás de humor -Suspiró mientras cedía y dejaba descansar sus manos en su pecho.
Manuel: Sabes que no es así -Negó mientras bajaba sus manos a sus caderas. Solo que a veces soy muy yo, lo siento -Se disculpó mientras se acercaba peligrosamente a sus labios.
Mayte: No tienes que disculparte por ser quien eres -Acarició su mejilla. Me gusta como eres -Le confesó. Pero a veces te pasas -Susurró muy cerca de sus labios.
Manuel: Mmm... Prometo cambiar eso -Dijo mientras subía sus manos por su espalda. No quiero hacerte sentir que no me importas -Dijo sinceramente.
Mayte: Y si te importo? -Sonrió mientras subía sus manos para rodear su cuello.
Manuel: Si -Asintió seriamente. Mucho más de lo que tú crees y mucho más de lo que yo lo admito -Bajó sus manos a su cintura y las dejó descansar ahí.
Mayte: ¡Wow! -Dijo mientras le acariciaba el cabello.
Manuel sonrió y al fin rompió el espacio que los separaba, se apoderó de sus labios y la besó con todas sus ganas, Mayte abrió su boca dándole paso a su lengua y siguió el ritmo de sus labios, se besaron con ansias, hace varias semanas que no se veían y vaya que se habían extrañado.
Manuel: Me encanta el sabor de tus labios -Dijo mientras mordía su labio inferior. Extrañaba tenerte así -Dijo mientras acariciaba su piel por debajo de su blusa.
Mayte: Ah -Gimió. Yo también extrañaba estar contigo, pero tenía que hacerte sufrir un poquito -Sonrió una vez que sus labios se separaron. Traes ganas? -Dijo mientras delineaba sus labios con su dedo.
Manuel: Muchas -Asintió mientras bajaba sus manos a sus caderas nuevamente. Estuvo fuerte el castigo, cariño -Sonrió mientras volvía a besar sus labios. Por eso esta noche te voy a castigar yo -Dijo entre el beso.
Mayte: Es que la última vez que nos vimos te pusiste muy payasito -Dijo imitando su acción de morderle el labio.
Manuel: Te lo voy a compensar -Prometió.
Mayte: Y se puede saber como? -Sonrió coqueta.
Manuel: No, pero ya lo verás y estoy seguro que te va a encantar -La miró seductoramente.
