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10 de Marzo.


Querida Flor:

No me has contestado, pero ya lo veía venir.

Si no la mencioné antes es porque no se había dado la oportunidad y no quería que supieras todo de golpe. Lo siento si me equivoqué.

Marcela tiene el cabello castaño y unos grandes ojos de color avellana. Le gusta comer pizza conmigo y llevarla como almuerzo en su lonchera de Hello Kitty a la primaria; va en segundo grado. Su sonrisa es enorme y cada mañana me obliga a levantarme temprano para que peine su cabello, soy un desastre para hacer una simple coleta, así que ella termina peinándose. Le gusta el color rosa, así que toda la casa está llena de estampas de esa gata endemoniada vestida de bailarina, incluso ha intentado ponerle moños a Cacahuate.

No soy el mejor padre del mundo, pero la amo con cada centímetro de mi ser. Es lo más hermoso que tengo en la vida y ella es el motivo que me motiva a seguir adelante. Ella fue ese milagro por el cual quise luchar para salir del lodo en el que estaba sumergido. Por ella y por mis abuelos soy lo que soy ahora.

No hay día que no me levante y le agradezca a Dios por haberme mandado a Marcela.

El día que nació, me hizo nacer de nuevo, me dio una nueva esperanza.

Tu jardinero.

Para mi Flor © ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora