Capítulo 2

1.1K 66 9
                                    

Capítulo 2

Mientras veía las fotos que había tomado comencé a recordar sucesos del pasado, y de un momento a otro me sentí débil- es hora de superarlo Emilia- esas eran las palabras que me repetía una y otra vez dentro y fuera de mi cabeza, al parecer el pasado me perseguía y con él, el mal sabor de una traición.

-Te amo lía - exclamo jake mientras me abrazaba.

-Y yo a ti- sus brazos, eran lo más cálido que había conocido jamás, me sentía segura en ellos.

Ahora comprendo el dicho, que no se puede confiar ni en tu sombra- pensé mientras me ponía boca abajo en mi cama, para más tarde quedarme profundamente dormida.

***

Unos pequeños golpes en la ventana me despertaron poco a poco. No tenía idea de la hora, ni mucho menos que serían esos misteriosos golpes. Me acerque mientras frotaba mis ojos, y vi una pequeña piedra golpear la ventana.

Solté un pequeño grito al verla, y mire más allá- es Sebastián- abrí la ventana con cuidado y saque mi cabeza para poder verlo mejor.

-Levántate dormilona, no hay tiempo que perder- gritó.

-¿Tiempo para qué?- le devolví desconcertada.

-Solamente quiero que te peines, porque, pareces la selva amazónica, y luego sales. Vamos a dar una vuelta.

Solté una sonora carcajada mientras cerraba la ventana, con los ojos en blanco- este chico definitivamente era un demente. Quien sabe qué clase de plan loco se le habrá ocurrido esta vez.

Me puse una sudadera, y un suéter holgado, hacia bastante frío así que también me puse un gorro de lana y una bufanda, y Salí a encontrarme con Sebastian.

-Te dije que te peinaras- exclamo Sebastian al verme, moviendo las manos como un tonto.

-Nadie me dice que hacer- le dije mientras lo empujaba suavemente y nos poníamos en marcha a donde fuera que íbamos.- ¿se puede saber a dónde vamos?- insistí.

-NO.- me corto de repente- es una sorpresa deja de ser tan curiosa.

-No puedo dejar de serlo, esa es mi esencia- me reí, y continúe caminando.

Después de mucho caminar, mis pies no daban más. Nos metimos por un pequeño bosque, y evitamos los diferentes matorrales altos que se interponían en nuestro camino. Sebastián llevaba la delantera, así que me avisaba cuando había alguna clase de roca resbaladiza o una planta con espinas.

Comencé a recordar todo lo sucedido luego de mi ruptura con jake, en ese tiempo solo me dedicaba a llorar, él había sido mi primera ilusión, y mi primera decepción. Cuando llego el momento de mi viaje, Sebastián y yo metimos nuestras maletas al carro que las llevaría al aeropuerto, empezaríamos una nueva vida, lejos de tanta mierda.

Sebastián, había tenido una vida difícil, y aunque no me alegro de su mala fortuna, gracias a eso pudimos conocernos y ahora ser tan unidos. Su madre murió cuando era aún muy pequeño, y su padre se casó poco después, al parecer ya tenía a su amante antes de la pérdida. Recuerdo que cuando lo conocí, él se encontraba sentado al borde de una fuente, tenía una cara de mucha tristeza, pero aun así no me atreví a preguntarle qué le sucedía. En ese momento llego un vendedor ambulante, y sin querer empujo sus piernas provocando que se fuera de espalda directo al agua. Fue uno de los días más graciosos de mi vida. Corrí a ayudarlo mientras mi estómago estallaba en risas, el me miraba furioso, Así fue como nuestra amistad comenzó. El me comento todo acerca de su familia, entre lo que ya mencione, estaba que su padre era multimillonario y que no la pasaba muy bien con él, ya que era de carácter demasiado fuerte, no apoyaba ni aceptaba sus aspiraciones ni sueños y eso lo mantenía en constante frustración, chocaban constantemente en fuertes peleas, y lo amenazaba con dejarlo en la calle sin un solo centavo, hasta quería obligarlo a que se casara con una niña rica para formar una gran alianza de poder con su familia, a lo que Sebastián obviamente se negó. Me recito una muy graciosa anécdota de cuando tuvo que ir a conocer a aquella chica, era una arrogante y antipática según él. Siempre lo apoye en todo mientras me mantuve en los ángeles, y el como buen amigo me correspondía, no había secretos entre nosotros y éramos incondicionales.

puntos suspensivos  #Wattys2016Where stories live. Discover now