Control: un cuerpo, dos almas©️ [Killer #0]

✘C U A T R O✘

"Me volví loco, con largos intervalos de horrible cordura"

Edgar Allan Poe

Admito que Erwan es un chico encantador. Me refiero a esa parte de su personalidad traviesa que te hace querer caer en sus brazos aunque sea por un momento. Además de sus delicados rasgos faciales que nunca había notado hasta ahora que lo tenía tan cerca.

Su atractivo me impresionó en ese momento que lo tuve frente de mí, por eso estaba algo perdida en él.

Pero solo bastó volver a la realidad para chocar su frente con la mía, en un golpe sonoro que lo dejaría lo suficiente desorientado como para que yo estirara la mano y presionara el botón que abría las puertas del auto y poder salir huyendo de ahí.

<Bien hecho>

Cuando estoy frente al auto, me aseguro de que vea como le saco el dedo del medio y me burlo de él. Levanta las cejas, sorprendido, y sin perder la gran sonrisa forjada en sus labios.

Corro en dirección al salón luego de haber revisado mi reloj y percatarme de que llego cinco minutos tarde.

Tengo que sentarme en una de las butacas del final para no llamar demasiado la atención del profesor que está impartiendo la conferencia. Trato de fijarme si Camila me guardó un asiento como le había pedido, pero no hay rastro de ella entre los demás.

Con el ceño fruncido, le envío un mensaje.

"¿Estás enferma? ¿Por qué no viniste a clase?"

No me responde.

Saco mis apuntes mientras me fijo en lo que está escrito en el gran pizarrón detrás del profesor. Desde aquí atrás logro ver poco, pero gracias a la diapositiva que se proyecta a su lado, puedo ver que están hablando del relato "La metamorfosis" de Kafka.

Es uno de los libros que ya he marcado como leídos en mi lista de lecturas para la universidad, así que sonrío por eso. No hay mejor sensación que el que estén hablando de una historia que ya leíste y de la cual puedes opinar sabiendo todo lo que sucede.

Giro la cabeza cuando siento movimiento a mi lado y la regreso al frente luego de ver al cansino que se acaba de sentar a mi lado, rompiendo mi felicidad.

—Rubia. —murmura con el tono meloso con el que dobla su voz.

—Silencio. —mascullo sin mirarle a la cara.

En ese momento siento como me roza un poco la tela de mi pantalón con la que se hace con mi teléfono ágilmente.

—Hey. —intento quitárselo sin alzar mucho la voz, pero el chico estira su brazo hacia arriba, impidiéndome alcanzarlo.

Me pongo de pie para estar a la altura adecuada, pero no sale exactamente como esperaba.

—Señorita Blake. —exclama el profesor.— No pensé que fuera una de las voluntarias.

Frunzo el ceño sin comprender la situación.

—Pero estoy seguro que será un gran trabajo viniendo de usted. —continúa mientras asiente con la cabeza, satisfecho. Miro lo que está en la diapositiva, percatándome de que me acabo de "ofrecer" para un trabajo extra clases. Fulmino a Erwan con la mirada, quién me sonríe desde su posición, encogiéndose de hombros.— Nos falta un segundo voluntario para que apoye a la señorita Blake en la parte escénica.

¡¿Escénica?!

—Yo me ofrezco. —añade el chico a mi lado, poniéndose de pie junto a mí.