✘D O C E✘

7.5K 1.2K 591
                                    

"Y todo lo que amaba, lo amaba solo."

Edgar Allan Poe

Max me saluda con un beso en los labios en cuanto se acerca a nosotras, dejando la caja de cervezas en la alacena. Mis dedos comienzan a jugar con sus risos cuando me toma de la cintura y me tiende una cerveza con la otra mano.

Si mantengo la vista en Max, e ignoro a los otros dos, quizás no tenga que hablar con ellos en toda la noche. ¿Cierto?

—Hola, rubia. —mierda. Palidezco de todas las formas posibles al escuchar la voz de Erwan a mis espaldas. Max me mira con el ceño ligeramente fruncido, y suelto un suspiro profundo antes de hablar.

—¿Cuántas veces te he dicho que no me digas...? —intento parecer enojada e imponerme frente al pelirrojo, pero cuando me giro, me veo obligada a morder mi labio inferior para detener mis palabras.

Erwan no hablaba conmigo, sino con Camila.

Casi puedo verlo sonreír detrás de esa expresión de inocencia que muestra a los demás. Lo peor de todo es que estoy más molesta por no ser la única a la que llama "rubia", que por cualquier otra cosa.

Pero bueno, él está en todo su derecho de hacerlo.

—¿...el final de las películas, Alexa? —ladeo la expresión hacia dónde se encuentra mi amiga bebiendo de un vaso rojo. Ella parece confundida, pero en cuanto percibe la tensión en el ambiente, se da cuenta de que tiene que intervenir.

—Ya pasaron días. Creo que es hora de que lo superes, Leah. —inquiere con una sonrisa algo fingida.

—¿Qué película? —pregunta Max, tras de mí y mi cerebro comienza a maquinar a toda velocidad.

—La sirenita. —exclamo yo.

—Buscando a Nemo. —inquiere Alexa, al mismo tiempo.

Cierro los ojos, mordiéndome el labio inferior mientras que Alexa suelta una risa baja, juntando el entrecejo. Erwan parece muy atento a nuestra conversación, evaluándome con una ceja enarcada.

—A ver, —intento explicarme— Fueron ambas. Cuando estaba viendo "La sirenita", me dijo que Ariel se convertía en espuma de mar porque el príncipe no la quería. Pasaron semanas hasta que pude terminarla, para al final descubrir que había sido mentira.

—Y la de Nemo, fue hace unos días, que le dije que el pobre pez moría ahogado. —inquiere Alexa— Los cual es una mentira más grande que mi cabeza porque los peces no se ahogan, pero la idiota me creyó hasta que la vio con sus propios ojos.

Si no estuviéramos inventando todo esto, estaría muy molesta por haber expuesto eso. Pero como sé que lo más importante es que nos crean, pues me aguanto.

—La pregunta es... —comienza a decir Erwan con un tono sarcástico en su voz— ¿no estás muy mayorcita para ver esas películas por primera vez? ¿Acaso no tuviste infancia?

—Nunca es tarde para ver dibujos animados. —responde Alexa por mí.

—Hola, estudiantes. —todos nos giramos hacia la potente voz de nuestro profesor que se acaba de acercar a nosotros.

—¡Hola, profesor Peterson! —Alexa es la primera que le devuelve el saludo con entusiasmo.— No pensé que fuera a aceptar la invitación.

—Fui estudiante como ustedes, señorita. Me gustan este tipo de fiestas. Aunque últimamente no acostumbro mucho a ir.

—¿Qué edad tiene, profesor? —inquiero. No creo que él lo haya dicho nunca. Parece muy joven para ser profesor, la verdad, solo que nunca lo había notado hasta ahora que lo veo fuera de la universidad.

Control: un cuerpo, dos almas©️ [Killer #0]Where stories live. Discover now