exile | baekhyun

04 | here i am

"Here I am,
beyond the mirror we're facing."

—

No era justo.

Era la injusticia divina más grande estar tan cerca de Baekhyun, prácticamente sentada sobre él, con su apariencia inmaculada y el olor de su colonia inundando cada agitada respiración que Hyerin podía tomar, mientras ella se encontraba en su absolutamente peor estado. Ni siquiera había podido tomar una ducha antes de salir. El universo se estaba riendo demasiado a sus expensas.

Inmediatamente Hyerin saltó al asiento más alejado que pudo encontrar. No podía ni verlo a la cara en ese momento. Baekhyun no dijo nada al respecto, lo cual ella agradecía infinitamente. Unos minutos después, el manager habló desde el asiento del conductor.

—Cuando lleguemos, baja con nosotros y espera unos minutos adentro del lugar, —dijo sin dejar de ver hacia delante. —Deja la caja donde puedas y trata de salir sin que te vean. Regresa a la camioneta y espérame, te llevaré a donde sea que necesites.

—¿No puedo... esperar aquí mejor?

—No, —respondió tajante el manager. —Te vieron muchas personas cuando entraste al auto. Sería extraño que no salieras.

A Hyerin le parecía una situación muy enredada, pero aceptó la oferta agradecida. Era más de lo que podía haber pedido. Desde el asiento trasero pudo ver a Baekhyun con su cabeza recostada sobre una de sus manos, parecía que sonreía. ¿Se reía de ella?

Continuaron el viaje en un silencio que a Hyerin le parecía sofocante. Podía ver a Baekhyun revisando su celular y no por primera vez sintió la falta de su propio teléfono como si hubiera perdido una extremidad.

Mientras más se acercaban al destino, Hyerin podía ver cada vez más y más personas reunidas. Parecía que todos los fans sabían exactamente el horario de sus ídolos y a donde tenían que ir para intentar captar aunque sea un vistazo rápido de ellos. Nuevamente el corazón de Hyerin volvió a acelerase. ¿Realmente se creerían que ella era una estilista?

El manager estacionó la camioneta a un costado del edificio y salió a ayudar al equipo de seguridad a despejar la puerta por donde saldría Baekhyun. Por donde ella saldría también, supuso. Un segundo antes de que la puerta se abriera, Baekhyun volteó a mirarla una última vez.

—Lamento que nuestra despedida sea tan apresurada. Fue... interesante conocerte, Hyerin.

Las palabras apenas habían llegado a sus oídos y su cerebro aún no las procesaba cuando la puerta se abrió y el mundo se puso de cabeza.

Los gritos eran ensordecedores. De repente ella tenía el sol en los ojos y apenas podía ver por donde caminaba, pero no quería perder de vista a las únicas dos personas que la iban a sacar de aquel pandemomium. Cuando finalmente entró al edificio detrás del manager, sintió que podía respirar otra vez. ¿Cómo podían pasar los idols por eso todos los días y aún así sonreír a los fans como si no fuera nada? 

Rápidamente se dio cuenta que el edificio era de una radiodifusora, así que todo estaba mucho más tranquilo que al otro lado de la puerta. Buscando un poco encontró al grupo de estilistas en un pequeño cuarto de preparación. Habían muchos tocadores colocados uno al lado de otro y algunos ya estaban ocupados.