08 | our souls at night

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"Flying into this dark night
Hope I can become the light in your long night."



Hyerin amaba los días y noches lluviosos. El tiempo parecía detenerse y todo tenía un aire mágico, como si cualquier cosa pudiera suceder.

Ahora mismo, no podría describir la situación de otra forma.

Ambos corrían bajo la lluvia, ella sintiendo que su corazón iba a estallar en su pecho. Incontrolables risas no dejaban de escapar de su garganta y podía ver entre la lluvia que él también sonreía.

La lluvia caía ahora con más fuerza y parecía que no iba a detenerse pronto. Hyerin comenzaba a pisar charcos y cada vez sus pies se sentían más fríos.

Baekhyun los llevó hasta un pequeño edificio alejado de la calle principal pero no muy lejos de la empresa que habían dejado atrás. No se detuvo en la entrada principal sino que lo rodeó hasta que encontraron una puerta más pequeña en un costado. Él tocó tres veces y Hyerin pudo ver por el cristal empañado a alguien acercarse a abrirles.

Baekhyun tiró de su mano para que pudiera entrar primero al edificio, resguardándose de la lluvia. Al cerrarse la puerta detrás de ambos, un chico que parecía trabajar ahí les extendió un par de toallas y les indicó por donde podían pasar. Fue hasta ese momento que a Hyerin le llegó el olor a café caliente y pan recién horneado. Habían entrado a una cafetería. Baekhyun se veía muy cómodo ahí, conversando ligeramente con los empleados que se acercaban a ellos. Ni siquiera traía puesta una mascarilla o se intentaba cubrir el rostro.

Tomaron asiento en una de las mesas más alejadas del local, que de hecho parecía una cabina pequeña, donde el resto de los clientes no podía verlos. Los meseros los trataban como si aquello fuera algo normal. Hyerin debía estar visiblemente confundida, porque cuando volteó a ver a Baekhyun, éste solo se rió por su expresión.

—Venimos seguido, los chicos y yo, —dijo Baekhyun usando la toalla que le habían dado para secarse el cabello. Tenía puesta una chamarra amplia que lo había mantenido más seco de lo que ella podía decir de sí misma—. El dueño tiene tratos con la empresa también, es uno de los pocos lugares donde podemos ir y sabemos que nadie dirá nada.

En ese momento Baekhyun se retiró la amplia chamarra y con un movimiento silencioso se la pasó a Hyerin, quien solo se la quedó mirando.

—Estás toda mojada, lo siento, —dijo él con una sonrisa que parecía decir que en realidad no se arrepentía de nada—. Toma la chamarra para que entres en calor.

¿Y tú? Quería preguntar pero la idea de la chamarra era muy tentadora para dejarla ir, así que la tomó y se la puso sobre sus prendas mojadas.

Baekhyun continuó secando su cabello hasta que éste parecía una maraña empapada pero ya había dejado de escurrirle. Era la primera vez que ella lo veía tan... ordinario. Hyerin apartó la vista sin poder ponerle nombre a lo que acababa de sentir al verlo.

—Así que, ¿otra vez te meterás en problemas por mi culpa? —preguntó la chica apreciando la decoración del lugar por primera vez desde que habían entrado. Como cabría de esperar, era oscura, elegante y estética—. Lo estás haciendo un hábito.

exile | baekhyunWhere stories live. Discover now