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Vienen los militares

"¡Boom!"

Incluso sin necesidad de ser alertados por el profesor de la clase, los que estaban en la oficina se dieron cuenta de la extraña imagen que había fuera de la ventana.

Un dirigible privado se acercaba al colegio. El dirigible era de color negro puro con hermosas líneas suaves. Al acercarse, provocó un espantoso huracán de viento.

Sólo había un puñado de aeronaves privadas en el imperio que tuvieran una aeronave de este tipo. El director había visto muchas cosas y enseguida adivinó de quién se trataba.

Dijo con pánico: "¡Rápido, bajemos deprisa!"

El Capitán Fang también se sorprendió. Aunque también era miembro del ejército, sólo era un oficial de rango medio y estaba a un mundo de distancia de los generales de mayor rango.

Era la primera vez que incluso él había visto una escena así. Era difícil de creer que la gente del ejército ...... estuviera realmente aquí por este niño...

Pensando en esto, no pudo evitar robar una mirada a Bai Yue.

La expresión de la otra parte no parecía muy diferente. Como la ventana estaba abierta, el viento entró en ella, levantando el flequillo gris claro del adolescente y revelando su frente desnuda.

Tal vez al notar la vista, la otra parte le devolvió la mirada y sonrió débilmente.

"!"

El padre de Fang sabía por qué su hijo siempre hablaba del nombre de Bai Yue. Es cierto que era bonito, pero esa sonrisa también era una auténtica monstruosidad.

El profesor de la clase estaba a punto de seguirle cuando recordó que los padres de Fang Zhenren aún estaban presentes y se volvió para decir: "Tos, viene alguien del departamento militar. Discutiré el tema del compañero de Fang Zhenren más tarde".

En ese momento, los rostros del padre y la madre de Fang habían perdido por completo su anterior arrogancia y dominio, y asintieron con la cabeza: "Por supuesto, vosotros ocupáos primero".

El profesor de la clase se volvió entonces hacia Bai Yue y le dijo: "Vuelve primero a la clase, te llamaremos si surge algo".

No se sabía cuál era el motivo por el que alguien del departamento militar se acercaba de repente. Si el propio Bai Yue era realmente un Alfa de rango S+, era probable que estuvieran aquí por él.

Pero aún no era seguro. Los militares podrían surgir más tarde, y no era del todo correcto mantener al estudiante aquí por más tiempo.

Bai Yue asintió y salió del despacho.

A continuación, el profesor de la clase también se marchó. El padre y la madre de Fang se miraron y siguieron juntos.

Este día, para los estudiantes del Colegio Luohua, sería probablemente inolvidable para el resto de sus vidas.

Una vez finalizado el periodo de vigilia, ya no había casi ninguna otra actividad importante para los alumnos de tercer año, sólo esperaban enterrar sus cabezas en la revisión día tras día para los próximos exámenes de ingreso.

Pero todo esto, de nuevo, parecía importarle poco a Li Ren, la escoria académica.

Sigue de pie con su libro frente a su escritorio para bloquear la vista, como siempre hace, con la cabeza enterrada en un vistazo a su teléfono.

Pero estaba un poco distraído. Después de que el profesor de la clase llamara a Bai Yue, no volvió hasta que empezó la clase, y no sabía qué había pasado.