Hermosa Catástrofe

28

-Lou-

-Hm-

Harry y Louis andaban por las oscuras calles, dirección a la mansión.

-No encuentro mi gorro gris-

Louis miro a Harry de reojo, era obvio que Louis robaba todos los gorros de Harry, cuando esté venia.

-No se-

-Espero encontrarlo- El castaño rio, sabiendo que el poseía el objeto que Harry buscaba.

Mientras el silencio reinaba entre los dos chicos, las yemas de Harry rozaron los dedos de Louis, nunca se habían cogido de la mano, con algo de temor, Harry alzo la mirada a Louis quien miraba sus manos fijamente.

Los dos notaron como la calor de sus manos se traspasaban entre ellos.

Harry decidió, acercó más su mano hasta poder entrelazarla con la del mayor.
Y se sonrojó cuando Louis rio ante el tacto de este.
Sus manos encajaban a la perfección, como un puzzle.

Al llegar cogidos de la mano, subieron por la ventana y fueron hacia el cuarto de Louis, cerraron con pestillo.

-Me pondré el pijama- Dijo el ojiazul mientras el otro se sentaba en la cama y este le daba la espalda a Harry, mientras levantaba su camiseta, así retirándosela.

Harry miro deseoso al castaño.

-La primera vez que te vi casi desnudó fue el primer día que nos conocimos- Se levantó de la cama, y se acercó lentamente a Louis, posicionó sus gruesas manos sobre la delgada figura de este, y pegó su torso a la espalda del castaño.

Los dos cruzaron miradas en el espejo que se situaba justo enfrente.

Harry apoyo la cabeza en el hombro de Louis, mientras dejaba delicados y húmedos besos entre el cuello y el hombro de su chico.

Louis sentía debilitarse ante el tacto del rizado.

-Estabas jodidamente sexy- Depósito las yemas de sus dedos en el finito brazo del chico, y masajeo desde el hombro hasta la mano, haciendo que la piel del ojiazul se pusiera de punta.

-Maldita sea, estabas tan follable- Susurró en el oído de Louis, mientras que este lo miraba mediante el espejo, con los ojos muy abiertos.

Harry paso su lengua por la oreja de Louis, lamiendo su lóbulo.

-Y te pegaste a mi- Llevo sus dedos a su boca y los remojo con su propia saliva, luego los paso por el cuello de este, haciendo que el otro chico sintiera la humedad de la saliva de Harry.

-Pusiste tú maldito culo, en mi polla- Al terminar con la sesión de salvia, pasó sus manos, acariciando la espalda de este, obligando a Louis estremecerse.

-Maldita sea- Bajo su mano hasta el borde del pantalón del contrario. La respiración de Louis empezó a soñar algo apresurada.

-Quiero lamerte entero, niño- Comenzó a lamer el cuello de Louis, dejando leves marcas, besando y succionando su cuello.

Louis respiraba apresurado casi jadeando.

-Dios Louis, si supieras las ganas que tengo de follarte-Lo empujó contra la mesa de manera, apretando el cuerpo de Louis.

Louis gimió bajito ante aquella acción del chico alto.

-Voltéate- Louis obedeció a Harry, volteándose hacia Harry, teniéndose así cara a cara.

Harry se lanzó a los labios de Louis, que comenzó a besarlos como una bestia, mordiendo, haciéndolos inflamarse y ponerlos de un color rojizo.

Paro de besar al chico. A Louis no le gusto aquello, quería seguir besando al rizado, así que se acercó a los labios de este para besarlo pero Harry se lo prohibió, Harry disfrutaba con la desesperación de Louis por besar al menor. Esté intentando acercarse el menor para besarlo pero este siempre se echaba un poco para atrás con un leve movimiento, lo suficiente para no dejar definitivamente juntar ambos labios.

Harry sonrío, llevando sus manos a los regordetes muslos de Louis y alzándolos al aire para subirlo encima de la mesa.

Louis intento besar de nuevo a Harry pero este se lo prohibió.

-B-Beso- Pidió desesperado.

-No te entendí-Deseaba volver a escuchar a Louis pedir ansiosamente un beso.

-Dame un beso- Dijo casi rogando.

Harry sonrío satisfecho y se lanzó a los labios de Louis, devorándolos descontroladamente.

Comenzó a dejar húmedos besos por alrededor de los labios del ojiazul, bajando por el cuello, el pecho, su abdomen, y hasta agacharse hacia la cerradura de su pantalón.

Harry miro a Louis.

El ojiverde comenzaba a sentir calor así que se deshizo de su camiseta con ansias.

Después bajo de nuevo a la cerradura del pantalón de Louis, elevó su vista hacia los ojos del chico, buscando aprobación, cuando la encontró comenzó a quitar los pantalones de este.

Harry hizo lo mismo, se deshizo de sus pantalones, quedando ambos en bóxers.

Louis observo el torso de Harry, todo aquel hermoso cuerpo, era un maldito dios griego.

Los dedos de Harry masajeaban el entremuslo de Louis, hasta que de la nada llevo su boca a los bóxers del chico y comenzó a quitárselos con la boca mientras se miraban a los ojos.

Cuando la erreccion de Louis quedo descubierta, de inmediato el ojiazul tapo su cara avergonzado, de su cuerpo.

A Harry no le agrado eso y subió al rostro de su chico.

-Hey- Acarició el cabello del chico, apartando sus manos y sujetándoselas para que no volviera a taparse el rostro.

-Amor, ¿que sucede?-

-Soy horrendo, Harry-

-No lo eres- Aquellas palabras dolieron en el corazón de Harry.

-Tu estas tan bien ejercitado, músculos, hermoso y yo soy una gelatina, delgado, paliducho-

-Lou, eres hermoso, tienes un cuerpo envidiable, la gente mataría por el cuerpo que tu posees, no debes de sentirte avergonzado de como eres, por que eres jodidamente perfecto, no veo ningún fallo ni en ti ni en tu cuerpo, te ves precioso, ¿si?-

Louis asintió con lágrimas en los ojos, poco convencido.

-Si quieres podemos parar, seguiremos otro día-

-No, da igual-

Louis no quería parar, de verdad le estaba gustando todo esto, se sentía tan bien, pero su cuerpo le avergonzaba tanto.

-¿Seguro?Yo solo quiero que te sientas cómodo y seguro-

-Si, Lo se-

-Bien, no te preocupes amor, seguiremos otro día-

Harry se agacho para tomar los bóxers de Louis y ponérselos de nuevo, para que esté no se sintiera incómodo, luego agarro su propia sudadera y se la puso a este.

-Lo siento- Se sentía fatal por haber arruinado un momento tan especial.

-No lo sientas, si no estás preparado aún, no lo estás, yo nunca te voy a forzar ha hacer algo que no deseas-

-Es que estropee este momento-

Harry negó con su cabeza moviéndola de una lado a otro, y calló a Louis con un beso.

-No has arruinado nada. Ahora no me rechistes más y vamos a dormir- Dio un pico dulce a su chico y lo bajo de la mesa, llevándolo de la mano hasta la cama, donde lo acostó y luego se acostó a su lado, tapando ambos cuerpos con la sábana calentita.

-Buenos noches, dulcecito- Hablo Harry depositando un beso en la mejilla de su chico, mientras que lo abrazaba por la espalda.

Louis sonrío ante su nuevo apodo.

-Buenos noches, Hazzie-

Harry sonrío ante su nuevo y adorable apodo.

Y los dos se quedaron dormido haciendo cucharita, siempre durmiendo pegados el uno con el otro.