Hermosa Catástrofe

68

No sabía nada de Harry, le extrañaba mucho.
Eran las cuatro de la madrugada y dormía junto al muermo de la nieve. Me tenía abrazado por la espalda haciendo cuchara, solo quería salir de ahí, era tan incomodo.

Me moví cuidadosamente de no despertarlo, iría a visitar a Harry, un día entero sin el se siente como el infierno.
El problema es que le haría creer a Harry que si estoy enamorado del muermo. Por el hecho de que cuanta menos gente sepa mi plan mejor, no me arriesgo de que nos escuchen.

Me aleje de él, pero se despertó, perfecto.

-¿Donde vas Lousito?- ¿¡LOUISITO!? ¿Pero quien te crees tu langosta frita?

-A dar un paseo mi amor, tengo mucha calor, pero volveré antes de que te des cuenta, quiero volver y verte en la cama para dormir junto a ti- Bese su frente y quería vomitar. El sonrió y me cogió de la cintura me atrajo hasta el y me subió encima suya. Me beso. Que asco, quiero vomitar, fue el beso más con sabor a moco que he dado en toda mi vida, besar el suelo es mejor.

Estaba cansado. Derrepente me canse. ¿Que había pasado?

Tengo que hablar con la luna al igual que Harry hablo con el sol.

Antes de ir a ver a Harry iré a ver a la luna.

Salí por la puerta pero no sin antes coger algo para resguardarme del frío, caminé hacia la mansión de Dark, cuando los dos mundos se fusionaron, es decir la luna y el sol, los dos reinados quedaron más cerca y ahora podemos ir andando o en coche.

Cuando llegue a Dark fui al jardín y me senté en el banco en el que solía jugar cuando era pequeño, millones de recuerdos recorrieron mi mente, cuando jugaba con Zayn, cuando me caí y se me cayó un diente pero por suerte era de leche, cuando lo pinté de azul si querer. Sonreí y la luna apareció.

-Louis- Vestida de blanco, la tela tan suave de seda.

-Luna, ¿puedes ayudarme?-

-Cuéntame cielo-

Mi cuerpo cada vez dolía más, estaba muy cansado. Era tan extraño.

-¿Tienes respuesta a mi cansancio tan repentino?-

-Estoy viendo todo lo que está pasando estos días, ¿quieres saberlo?-

-Si-

-Tu mente y corazón está luchando contra la maldición, bien si, nunca había visto un amor tan fuerte y puro como el tuyo y como está combatiendo contra la maldición más fuerte hecha, tú cuerpo entero está luchando por no caer, por eso cuando te tocó Thorri no notaste nada, si sigues así puedes aguantar dos semanas, pero cada día estarás más cansado y peor, incluso, puede llegar a la muerte, por que dejarás de comer, beber, de andar, todo, solo puedo decirte que seas fuerte pero eso se que ya lo eres- Y desapareció junto con su vestido de seda.

Estaba tan cansado, me acosté en el banco, puse mis pies encima, deseando dormir, y despejarme de todo pero escuché una voz, una voz tan familiar.

-¿Louis? ¿Que haces aquí? Te ves horrible- Su voz, su maldita voz.

¿Que hacia el allí?

-¿Que haces tú aquí?-

-Iba a ir a tu cuarto, a oler tu ropa, las sábanas, ya que tenemos millones de recuerdos allí, te extrañé ayer- Dijo y sentí mi corazón quebrarse por que no podía mentirle y decir que estoy enamorado de otro y que de él ya no, por que no es así, pero es lo mejor para mi y para todos.

-Olvídate de todos esos recuerdos, nunca más sucederán- Me dolió pero me dolió más ver con que rapidez se aguaron los ojos de Harry. Inundando su color esmeralda.

-Al fin y al cabo sabía que esto pasaría, es imposible no caer en la maldición- Se levantó y quería pararle, besarle, abrazarle, decirle que lo estaba haciendo por su protección, por la nuestra. Pero no podía, tenia que fingir, por que de eso se trata la vida, de fingir.

Cerré mis ojos para dormir y olvidar todo, pensé que el se había ido, pero mientras que tenía los ojos cerrados, noté como unos pasos venían a mi, eran sus pasos. No abrí mis ojos, quería saber que hacía de nuevo allí.

-Igualmente yo siempre te voy amar, siempre serás el amor de mi vida y siempre te veré como el hombre más fuerte de este planeta- Beso con delicadeza mi frente apartando mi pelo-No voy a rendirme, por ti nunca me rendiría, mañana a primera hora estaré de rodillas en la puerta con tus flores favoritas, los tulipanes rojos, nunca voy a cansarme de cortejarte- Beso la punta de mi nariz y millones de recuerdos recorriendo todo mi alma. Quería llorar pero ahí me quede, escuchando como el amor de mi vida se alejaba de mi.

3ºdia
El segundo día me la pase en la cama todo el día, dijeron que me veía cansado y que debía descansar. La verdad es que Thorri no era mal hombre pero no era mi tipo de hombre, el se preocupaba bastante por mi y me dejaba quedarme en la cama todo el día, me traía la comida y me daba besos en la frente. Aún su aliento huele a viejo. No es mal hombre pero me cae mal. Simple. Ese tiempo con él, podría invertirlo en estar con mi amado que seguro ahora está en casa llorando al pensar que estoy enamorado del mono de feria.

Aparte de no hablar que este señor está más frío que un hielo y tiene sentido por que es el dios de la nieve, pero es que harry desprende una calor corporal que me quedaría acurrucado en el toda mi vida.
Es obvio es el dios del sol. Muy listo de tu parte, Louis.

El tercer día hacia un sol tremendo, estábamos como en pleno invierno y hacia demasiada calor. La nieve y el hielo del reinado se estaba descongelando y todo era un follón.

Estábamos en la sala de reuniones hablando con cinco agentes más sobre la temperatura.

-Harry, Harry Styles, el está provocando esto- Dijo uno de ellos y mi vista paso a su cara y mi mente perdida por el cuarto paso a ser todo oídos. Estaba con los pies puestos en la silla, a nadie le parecía bien pero Thorri me defendió y me dijo que me dejaba ponerme así, pero yo no necesito que me defienda me hubiera puesto igual así, quiera o no.

-¿Alguien lo ha visto?-Hablo el muermo de la nieve.

-No, aún no, pero al parecer dicen que ha vuelto, y por eso estas temperaturas- Puto guardia cállate viejo.

-Pero según el libro de la No tierra deja claro que todo suceso que tenga que ver con la temperatura no es adrede, es decir si hace calor es que algo le está pasando o si por ejemplo hay tormenta es por esta Louis enfadado-Dijo el muermo mirándome.

-¿Acaso no saben que nuestros sentimientos se reflejan en el cielo y en la temperatura?- Hable muy borde y Thorri me miro con cara de querer matarme.

-El caso, es que sabemos que Harry está aquí y que algo le pasa, así que es el momento ideal para pillarlo de imprevisto y exterminarlo- Me atragante con mi propia saliva cuando el muermo terminó su frase.

-¿Como?- Trague salvia muy preocupado.

-Y Louis será el encargado de exterminar el poder del sol- Me cague de miedo en los pantalones.

-Voy al baño- Un ataque de ansiedad estaba apareciendo. Corrí al baño y cerré con pestillo, me saque la camiseta y me mire al espejo. Mi torso tatuado subía y bajaba junto a mi agetreada respiración. Esto era un infierno, junto que estaba súper cansado, no podía más, en cualquier momento me desmayaría.

Un mensaje llego a mi móvil. Número desconocido.

"MA HA QE AR, CO DE FL, T AO"

"Misma hora que ayer, campo de fútbol, te amo"
Harry. Harry. Harry.

Nuestro código de poner la primera y última letra, pensé que lo olvidaría pero no, cuando no podíamos estar juntos y teníamos nuestros teléfonos y queríamos decirnos cosas bonitas nos escribíamos así.

No sabia si ir, por que no estaría fingiendo muy bien y podrían pillarme, pero era de madrugada y el dijo que me iba a cortejar. Además verlo ayudaría a mi cansancio y a luchar contra esta mierda.
Mi ansiedad bajo, necesito hablar con Zayn. A él si le puedo contar todo.