40. Encuentro

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- ¡Voy a matar a Luffy! ¡Nitoryuu!

- ¡Te cubro, hermano Zoro! ¡Asegúrala primero!

- ¡Gracias Franky!

El peliverde se lanzó a la marcha con su hija en brazos, mientras buscaba a Inti entre todo los - según él - laberintos de la ciudad; aunque en todo este tiempo había afinado su orientación debido a su hija, no era como que aún no le costará atinar a la primera.

Quilla se veía estresada por todo el ruido que se escuchaba a su alrededor, Zoro al ver como su hija de un año empezaba a aguar sus ojos, la abrazó más y corrió con prisa para tratar de buscar al tigre.

Tras unos minutos, escuchó y sintió el rugido del animal cerca a donde estaban, por lo que cogió toda su capacidad mental para guiarse a esa dirección; cuando llegó, vio como el animal se limpiaba la sangre del hocico y de sus patas. Era impresionante para otras personas que habían conocido el lado aterrador del animal, saber que le confiaría a ese gato la vida de su hija pequeña.

- ¿Ya terminaste? - lo picó Zoro, a lo que el animal le gruñó, pero bajó la intensidad de su agresividad al espadachín al ver a la pequeña peliverde llorar - Ya sabes que hacer.

Inti solo asintió y recibió en su lomo a la pequeña que estaba en un canguro adaptable, ella al sentirse en el cuerpo del animal, calmó su llanto y empezó a acariciar con su mano pequeña el pelaje del tigre, haciendo que este ronroneara.

- Eres un manso - dijo besando la frente de su hija - ve, yo llevaré a los marines al otro lado del Sunny.

El tigre volvió a asentir para iniciar su marcha entre el bosque, donde era su mayor ventaja.

Zoro concentró sus sentidos para enfocarse en la batalla, y saber por cuál dirección habían ido para despejar esa zona. Lamentablemente, no tardó mucho en encontrar soldados, por lo que su lucha inició inmediatamente.

No era que le tomara mucho matar marines, sino que particularmente estos eran resultados de los experimentos que el gobierno había desplegado tras la investigación sobre posibles segundos usuarios de akumas no mi; al parecer Doflamingo había tenido tiempo de mandar un informe sobre la aparición de una segunda usuaria de la mera mera no mi, lo que desató una serie de estudios por parte de Vegapunk para replicar el éxito que habían tenido con (Tn)_______.

Los mugiwaras habían caído en una de las islas donde se encontraba una de las tantas instalaciones de las marinas donde se realizaba estos experimentos de manera "ilegal". No habían querido intervenir, de no ser porque, en los pueblos aledaños, habían visto que varias personas eran desaparecidas, incluso familias enteras.

Un chico que habían conocido en el pueblo, había sido víctima de la desaparición de su familia entera, él se había salvado debido a que el día que había sido el día del secuestro, él se molestó con sus padres por una tontería que ya ni él recordaba.

Este, junto a otro joven que había escapado de las instalaciones, habían estado averiguando a profundidad sobre las atrocidades que estaba cometiendo, pero nadie les creía. Por lo que cuando los mugiwaras escucharon sus historias, no pudieron evitar sentir empatía por los dos.

El gobierno mundial había logrado que los soldados más fuertes de la marina, incluso los que iban a ascender a vicealmirante, tuvieran ciertas habilidades de algunos akuma no mis de paramecia; sin embargo, estos sujetos pruebas presentaban deficiencias que se podían ver a simple vista. Sus cuerpos habían sido deformados al adquirir esta habilidad; como por ejemplo, uno de los que le estaban dando batalla a Zoro en esos momentos.

El marine al parecer dominaba algo relacionado con la habilidad sobre multiplicar su persona, pero al querer volver a la normalidad, la fusión no era completa no perfecta; partes de sus demás clones se pegaban a su cuerpo quedando de manera permanente,  por lo que el hombre tenía como ocho brazos y su cabeza, más de un elemento.

Lost (Zororo Roronoa x Reader)Where stories live. Discover now