25

1.4K 124 20
                                    

-Habla de una vez Andrea, por qué dices que me mentiste-insistió Daniela.

-Alejandra ya no está casada enviudó hace más de un año-abrió su boca por la sorpresa.

-¿Cómo? Pero qué pasó, por qué me lo ocultaste.
Mi papá nunca me dijo nada-mencionó.

-No lo sé, pensé que tal vez todavía tenías interés en ella y si sabías intentarías hacer algo-confesé.

-Es absurdo, te dije que lo nuestro es pasado, de verdad no te entiendo, ese amor enfermizo que tienes por ella no te hace bien.
Y ahora dime en ¿qué le mentiste a ella?-quiso saber.

No tenía remedio que siguiera mintiendo.

-Me preguntó algunas veces si tenía contacto contigo y siempre le dije que no, que no sabía nada de ti. Escuchaste lo que ella dijo.

-No puede ser, estás mal, Andrea muy mal, cómo le mientes a la mujer que dices amar, ahora entiendo su reacción. Ahora ella debe estar pensando que me burlé cuando mencioné que estaba felizmente casada. ¡Diablos! debo disculparme con ella.

-No es necesario, no te acerques a Alejandra.

-No estás en condiciones de prohibirme nada, es justo que me disculpe, además, tenemos una conversación pendiente- Y tenía razón no era nadie para decirle que debía hacer.

-Lo siento, no sé qué me pasa, siento que todo esto me rebasa-llevé mis manos a la cabeza, me sentía verdaderamente frustrada.

-Ya tranquila, lo que hiciste estuvo mal y lo sabes, pero tampoco soy una santa, he hecho cosas peores-admitió.

-Yo solo quería protegerla, estoy enamorada de ella-es lo que sentía.

-No sé si es amor u obsesión lo que tienes a estas alturas.

-Es amor-aclaré. Debe ser amor.

-Y ¿Marcela? -preguntó cambiando de tema.

-Qué tiene Marcela, no entiendo-Y no quería entender.

-No te gusta, o sea viven juntas y déjame decirte que si fuese tú hace tiempo hubiera pasado algo entre nosotras.

-Yo no soy como tú, yo la respeto y ya te dije que ella necesita a alguien mejor.

-No quiero volver al mismo tema, ya salí con ella, es mucho más agradable de lo que imaginaba y pienso seguir conociéndola-Ya había tenido una discusión por eso.

Flashback

-Vaya te ves hermosa-admiré su presencia cuando la vi salir de su habitación.

-Gracias-sonrió tímidamente.

-Piensas salir con alguna amiga-pregunté.

-Sí, bueno no es mi amiga es tu amiga, Daniela. Te acuerdas que te conté-se me borró la sonrisa, maldita sea le había dicho que se alejara de ella.

-Y te dije lo que pensaba-hablé tratando de estar calmada.

-No pienso volver a discutir lo mismo. Bueno me voy porque se me hace tarde, adiós Andrea-me dio un rápido beso en la mejilla y desapareció.

Toqué donde había dejado su beso y no pude evitar sonreír, no obstante, recordé con quien estaría y nuevamente me enojé.

Me recosté en la cama tratando de no pensar qué estaría haciendo ese par, dónde la llevaría Daniela, espero que no haya sido directo a un hotel, aunque sé que la pelirroja no aceptaría tan fácilmente, ella no es así.

Estaría mal si le escribo un mensaje, sólo para saber si se encuentra bien. Pensé.

Tomé el celular decidida a escribirle, busqué su número, pero a último momento me arrepentí, no era nadie para meterme en su vida

Dejé mi celular en la cama, lo mejor que puedo hacer es dejar de pensar que estarán haciendo, Marcela es bastante mayor.

Fin de flashback

-Espero que la respetes-advertí.

-Sí, mamá, no pienso tocarle ni un solo cabello... si ella me lo pide tal vez lo haga-bromeó. Aunque a mí no me causó mucha gracia.

-Que chistosa te has vuelto-ironice

-Amargada, no sé porque siento que a ti te gusta en el fondo Marcela y no lo quieres admitir, y mira que te pregunté, si es así yo no intento nada con ella.

-No digas estupideces te di mis razones, las recuerdas-aclaré.

-No lo sé, luego no te vayas a arrepentir.
Antes de irme quiero el número de Alejandra-pidió.

-Para qué lo quieres-pregunté. Pude ver su cara de indignada.

-Es en serio, necesito hablar con ella, si quieres no me lo des igual lo puedo conseguir.

Lo debatí un poco, pero al final termine dándoselo de todas maneras Daniela buscaría la forma de conseguirlo.

-Gracias Andrea, no te guardo rencor por lo que hiciste, quiero vivir en paz y después de que hable con mi ex madrastra lo lograré por completo.

-De todo corazón espero que así sea.

De esta manera se fue de mi oficina, había sido un día muy pesado, no pensé que iba a ocurrir todo esto. Yo también debía hablar con Alejandra y disculparme, pero hoy no sería, ahora no me escucharía.

-¡Amiga! -escuché de golpe causando que por poco tuviese un paro cardíaco.

-Joder Camila, quieres matarme de un susto-recrimine

-No aguantas nada, solo quería sorprenderte, aunque la sorprendida fui yo, vi salir a semejante bombón. Dios mío, que guapa es esa mujer. Me miró y mis bragas se humedecieron, toca, toca-intentó agarrar mi mano.

-No seas asquerosa, no voy a tocar nada.

-Eso no decías antes, pero ya está
Qué ha pasado, esa carita que traes me dice que no ha sido un muy buen día o me equívoco -Camila tenía la capacidad de leer mis expresiones.

-Una mierda eso ha sido, problema tras problema, Alejandra que sabe que he tenido contacto con Daniela. Daniela ahora sabe que Alejandra es viuda. Daniela tratando de conquistar a Marcela, un total caos.

-Y de todo esto, qué es lo que más te afecta.

-Cómo Marcela puede salir con Daniela, le dije que no es alguien que le convenga-hablé sin prestar atención a la pregunta que me había hecho mi amiga.

-Estás celosa, es eso-Concluyó Camila.

-¡No! solo me preocupo, ya ves que a la pelirroja no le ha ido muy bien con las parejas, quiero evitar que sufra nada más.

-Sí claro y yo quiero una noche con tu secretario.

-¿Qué? -no había entendido.

-La verdad te hará libre, solo debes abrir tus ojos y tu corazón y sabrás a quien de verdad quieres-declamó llevando su mano al corazón.

-Pensé que ya habías dejado la hierba.

-Idiota, no aprecias mi ayuda. Olvídalo.
Quería invitarte a tomar vino a tu casa.

-¿Eh?

-Sí, por si no te diste cuenta me ausenté algunos días, es momento de convivir como las buenas amigas que somos.

-No lo sé, me siento cansada.

-Por eso es en tu casa, te cansas vas a tu habitación y ya. Yo puedo dormir con Marcela-entrecerré mis ojos.

-Bueno no, el sofá estaría bien, vamos de una vez.

Realmente no quería, pero, no le haría un desplante a Camila, espero que termine todo bien.

Un capítulo para las criaturitas que no hayan salido un sábado por la noche como yo 😅

Que lo disfruten, se vienen cosas muy interesantes.
No se olviden de apoyarme con un voto o comentario.

¡Gracias!

Siempre fuiste túDonde viven las historias. Descúbrelo ahora