TWO ALPHAS (VKOOKMIN)

💜 Cap 4 💜

🐯

"Otra cena más de negocio, que vida tan aburrida"- Pensé mientras mi socio hablaba, a decir verdad no estaba prestando mucha atención, ya conocía el discurso de memoria.

Llegó a mis oídos unas risas burlonas, seguí con mi mirada aquel sonido, a lo lejos había una mesa llena de unos chicos revoltosos.

"Valla deben estar de vacaciones"- sentí como mi corazón se estrujaba pensando en aquello.

Carraspeé mi garganta.

-Necesito ir a fumar- Dije parándome de la silla, a lo que los demás asintieron sin prestar mucha atención.

Salí al inmenso patio prendí el cigarrillo pensando como seria tener una vida normal, como se sentiría ir de vacaciones con amigos, poder salir y divertirse, tener pasatiempos, hacer lo que quisiera y no lo que debía.

-Debe ser genial - Solté el humo con un suspiro.

Lleve nuevamente el cigarrillo a mi boca, cuando lo sentí, era el olor mas exquisito que jamás había sentido.

"Un olor a chocolate y fresas"

Mi cuerpo reaccionó a él, a su olor pero reaccionó más a su tacto en mis dedos arrebatándome el cigarrillo y llevándolo a sus labios.

Miré sus hermosos ojos color azul, tan azules que podría jurar que vi un cielo entero en ellos.

-Me gusta tu olor.

Mi corazón se aceleró parecía un caballo desbocado mirando el descaro en su mirada y en su boca al decir esas palabras.

-Y a mi el tuyo - Solté sin pensar.

Me miró y sonrió, una sonrisa ladina llena de deseo, sus ojos se ponían cada vez mas oscuros como un cielo a punto de anochecer.

Sentí como mis músculos se tensaron y lo único que pude sentir fueron mis manos en su cintura mientras el se sostenía de mi cuello y empezábamos a besarnos tan apasionadamente, tan profundo, tan cálido.

"Mierda sus feromonas me están mareando" - Miré de reojo y vi un par de personas mirando hacia nosotros.

"Esto se está saliendo de control"- Pensé.

Lo tomé de la cintura y solté sus labios, provocando que hiciera un puchero.

-Tranquilo bonito, ven conmigo - Dije mientras sostenía su carita en mi mano, el solo asintió, tomó mi mano y me siguió hacia mi auto.

Su olor se hacia cada vez mas fuerte, mas atrayente, mas difícil de soportar haciendo que sea casi imposible controlar mi deseo.

"Debo ir a una farmacia"- Pensé mientras conducía rápidamente.

El solo me miraba, jugaba con sus labios mordiéndolos y lamiéndolos, haciéndome saber que deseaba ser besado y yo quería besarlo y mucho! perderme en esos ricos, carnosos y hermosos labios rosas, pero no podía hacerlo, no cuando el no estaba en sus cinco sentidos.

-Dime bonito ¿Cómo te llamas?

-Jimin.

-Así que Jimin... Que bonito nombre tienes.

Traté de desviar mi mirada y mis pensamientos de ese lindo chico de ojos brillantes y mirada sexy.

No me di cuenta cuando se acercó enredando sus brazos alrededor de mí cuello dejando un beso en el, restregando suavemente su nariz contra mi, impregnándome de su olor y llenándose del mío, casi escuché como ronroneaba en mi oído.

-La farmacia - Dije sacándonos de la burbuja que habíamos creado segundos atrás, estacioné rápidamente.

-Ya vengo bonito, espérame.

El solo asintió, bajé del auto entrando a la farmacia, compré una caja de supresores y una botella de agua.

-Toma bonito.

-No quiero.

-Vamos Jimin, tómate uno.

-¿Qué me das a cambio?

Sonreí ante tan ocurrencia, se veía tan pequeño haciendo pucheros y reclamando algo a cambio.

-Lo que tú quieras - Dije sonriendo.

Arrebató de mis manos la caja y el agua, y se tomó uno de los supresores, reí ante tal acto.

-Oye bonito ¿Te llevo a tu casa?

-No vivo en esta ciudad, solo vine de paseo.

-Entonces ¿Te llevo a tu hotel?

-Dijiste que me darías lo que yo quisiera.

"Mierda... Pensé que ya le había empezado a hacer efecto los supresores, su olor y feromonas ya bajaban su intensidad, pensé que se olvidaría de eso"

-Claro, dime ¿Qué quieres?

-Llévame a tu casa - Dijo mirándome con una cara tan seria que hizo temblar mi pulso sobre el volante.

-Como órdenes.

No estábamos lejos de mi casa así que no tardamos en llegar, durante el camino solo se dedicó a mirar por la ventana y al paso de unos momentos cayó en los brazos de Morfeo, al parecer el medicamento por fin estaba haciendo efecto.

-Jimin, despierta - Lo llamé varias veces pero no respondía, decidí dejarlo dormir.

La casa que habitaba era espaciosa tenía muchas habitaciones, muchas camas en donde el podía descansar, entonces ¿Porqué no pude solo dejarlo en alguna de ellas? ¿No podía? Claro que podía, solo no quería.

"Es eso, quiero su olor en esta habitación, en esta cama, en mi..."

Me sorprendí a mi mismo deseando algo tan egoísta, yo que nunca e tenido pensamientos posesivos hacia algo o alguien, todo se me había dado, toda mi vida a estado planeada desde antes de nacer, nunca e tenido nada verdaderamente mío y ahora estaba allí después de 25 años queriendo a ese chico para mí .

-Este chico va a ser mi perdición - Dije para mí mismo, mirándolo por última vez antes de salir de la habitación.

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La historia contada desde el punto de vista de tae.

Y vemos un poco de cómo es la vida de nuestro alfa castaño.

Gracias por leer

💜 PEACE AND LOVE 💜

TEFA