TWO ALPHAS (VKOOKMIN)

💜 Cap 25 💜

☀️

-Buenos días amor - Su rostro reposaba sobre mi pecho, respirando tranquilamente.

-Buenos días - Me respondió con su voz adormilada y ojitos cerrardos.

Me levanté dejando pequeños besos en su frente y nariz viendo como una leve sonrisa se adueñaba de sus labios, me dirigí hacia el baño dándome una ducha rápida.

Al salir del baño vi a mi hermoso rubio enrollado en las sábanas sin intenciones de levantarse, me vestí con un conjunto deportivo bastante cómodo para dirigirme hacía la cocina con la firme intensión de preparar el desayuno.

-Huele delicioso - Mi corazón se apretó al verlo tan pequeño y tierno delante de mi, mientras se frotaba sus pequeños ojitos sentándose en la mesa.

Serví la comida una mezcla entre desayuno americano y coreano, el sólo me miraba con sus ojos brillantes mientras su estómago pedia a gritos comida mientras bajaba su rostro con un hermoso sonrojo en sus mejillas.

-Gracias... ¡Me encanta tu comida! -
Me encantaba su forma de ser, tan frajil, tan tierno, tan sensible, tan él.

"Toc, toc, toc"

El sonido de la puerta nos sacó de nuestro pequeño mundo, jimin se paró de la mesa dirigiéndose a abrir la puerta.

-¿He? - Lo escuché decir en la puerta de la casa.

-Si, soy yo.

-Gracias.

Jimin cerró la puerta a sus espaldas dándole una patada ya que en sus manos traía un gran ramo de rosas rojas.

-¿Y eso? - Pregunté curioso.

-No lo sé - Dejó el ramo sobre la mesa.

Llevé mi mano a mi bolsillo posicionándome detrás de el, divisando como buscaba algo dentro del ramo.

Entre las flores había una pequeña tarjeta blanca.

Feliz cumpleaños mi amor

TH

Posdata: Mira hacia atrás.

Mi hermoso rubio volteó a mirarme con sus ojitos llenos de lágrimas mientras sacaba mi mano del bolsillo sacando una pequeña caja aterciopelada.

-Amor...

Lo miré a sus hermosos ojos azules los cuales me miraban completamente emocionado, todo con él era tan real, tan recíproco.

-Tu eres mi persona, la persona que quiero en mi vida y se que cada una de mis decisiones en el pasado, cada uno de mis fracasos y mis aciertos me han preparado para estar contigo...

Sus ojitos se llenaron de lágrimas, en ese momento me di cuenta de lo profundo que había caído por este dulce omega.

-Quiero estar contigo Jimin... Sólo quiero que seas tú...

Abrí la pequeña cajita dejando ver un par de anillos a juego.

-¿Quieres ser mi novio?

Sus brazos se enredaron en mi cuello y sus piernas en mi cintura.

-Si... si.. ¡Si quiero!!

Dejé suaves besos en su rostro, sintiendo una calidez en mi cuerpo y corazón que hacía mucho tiempo no sentía.

-Pero... ¿Cómo?... ¿Cómo sabías de mi cumpleaños? Yo nunca te lo dije.

-Te digo pero no te enojas.

-Dime amor.

-Te mandé a investigar.

-¡TAEHYUNG!

Se bajó de mi regazo dándome palmadas en el brazo, todo lo que hacía me parecía totalmente encantador.

-Jajajajaja... Tu roomie me lo contó.

-¿He? - Bajó sus manos, mirándome con cara de cachorro perdido.

-Lo busqué por facebook y estuvimos hablando de ti.

-Lo voy a matar - Su mirada bajó al suelo, dejando caer su cabello sobre sus ojos.

-Vamos amor no te enojes con el... ¿No te gustó mi sorpresa?

Lo miré con ojitos de cachorro, poniendo un leve puchero en mi boca.

Por lo general era una persona fría, no me gustaba mostrarme débil ante nadie, ni mucho menos permitir que alguien me mimara, me habían criado para no demostrar amor por nada ni por nadie.

"Sólo con él"

Tomó mi rostro entre sus pequeñas manos, empinándose para alcanzar mis labios, juntándolos en un pequeño roce, lo tomé por su fina cintura juntando nuestros cuerpos, profundizando el beso enredando nuestras lenguas, disfrutando nuestro sabor.

-No puedo contigo - Dijo dando un pequeño suspiro regresando nuevamente a la mesa.

-Mi regalo - Estiró su mano sin mirarme, formando en sus labios un pequeño puchero.

Mi sonrisa se amplió, era un caprichoso, tierno y lindo omega que me volvía loco.

Puse la cajita en su mano, el la abrió sacando los dos anillos plateados.

-¿El mío es el azul y el tuyo gris? - Asentí.

-Me queda perfecto... ¡Gracias mi amor! - Su preciosa sonrisa escondía sus pequeños ojitos mientras un leve sonrojo se asomó en sus mejillas.

El resto del día lo pasamos entre películas, risas, momentos llenos de ternura y placer.